Lo primero que el visitante comprobará en esta actividad es que los líquidos, a diferencia de los gases, no se pueden comprimir. Constatará el principio de Pascal que dice que una variación de la presión de un fluido en un punto es transmitida inmediatamente a todos los puntos del líquido. Después, mediante una máquina hidráulica hecha con jeringuillas de diferente diámetro actuando como pistones, verá que cuanto menor es la superficie del pistón menos fuerza hay que hacer para subir un peso, pero a costa de hacer un recorrido mayor, es una forma muy gráfica de ver dos cosas: que la presión es igual a fuerza entre superficie y el principio de conservación de la energía. Después podrá manipular maquetas en las que se verá la aplicación técnica de este principio. Una última aplicación en la que interviene a la vez lo aprendido en la actividad anterior y en esta es el principio de los vasos comunicantes.
En esta actividad los dispositivos con que podrá investigar el visitante estarán construidos principalmente con jeringuillas y tubos. Además del citado en "¿en qué consiste la actividad?" otro muy llamativo y divertido es el que utilizamos para lo que llamamos guerra de jeringuillas, en la que dos jeringuillas de diferente diámetro y llenas de agua están unidas por un tubito, entre dos tienen que apretar cada uno una jeringuilla para vencer al contrario, increíblemente gana el que tiene la jeringuilla más pequeña, es una forma muy visual de entender el principio de Pascal. Como aplicación de este principio habrá maquetas interactivas de un elevador y un brazo hidráulicos. Para ver el principio de los vasos comunicantes el visitante podrá manipular un balancín con dos vasos comunicados entre sí y otro dispositivo como y el sifón, que se utiliza en multitud de aparatos, como el inodoro y la lavadora.