La profunda transformación que sufre la cadera en el bipedalismo, para cargar por sí sola el peso del tronco, la cabeza y las extremidades, va a complicar sobremanera el parto. En los homínidos el útero y la vagina forman un ángulo recto, esta última se abre en un plano ventral y el canal del parto es un cilindro angosto en relación a la cabeza del feto . En esta actividad se pretenden reproducir los partos de un chimpancé y de un humano.Necesitamos la cadera de un esqueleto humano de resina al que se le han aflojado levemente los tornillos, una cadera de chimpancé moldeada en escayola y dos muñecos de cuerpo blando con brazos y piernas colocados en posición fetal.

El monitor mostrará con la cadera de chimpancé y uno de los muñecos que este puede progresar facilmente por el canal del parto. Se le pedirá al visitante que coloque "el feto humano" sobre la cadera de resina y que intente hacerle avanzar. La cabeza se ajusta mucho a las paredes y las espinas ilíacas le dificultan el paso. El monitor le explicará los giros que debe hacer con la cabeza para que el feto pueda recorrer un canal del parto que es en realidad, como un tubo doblado y retorcido