Nuevo bachilletaro

 Nada más conocerse las nuevas líneas del nuevo bachillerato han comenzado las protestas.  Todo cíclico. Hubo plan del 34, del 38, del 54, del 57 del 67, del 70, del 88, del 97…  Y las protestas pertinentes, que cortó por lo sano la sonrisa del franquismo: «Más deporte y menos latín». La UCD recogió el legado del franquismo, bachillerato elemental para todos, tronco único hasta los 14 años, que después se sustituyó por la ESO (enseñanza única y obligatoria hasta los 16 y un bachillerato de dos añitos). Se reconvirtió brutalmente al profesorado, los catedráticos fueron eliminados al rito de «Abajo el corporativismo»; los institutos  dejaron de ser nobles establecimientos de segunda enseñanza para convertirse en escuelas de secundaria, donde todo el mundo podía progresar.

Manes sacros de Ivan Ilitch. De Giner de los Ríos, ni rastro. Un preste llamado Mar… dirigía las operaciones; ha reaparecido ahora. Emergen asignaturas de nombre sugestivo; cada vez se va a enseñar menos literatura…. Mar y sus esbirros tan contentos. Como dijo González, España tiene las generaciones mejor preparadas de su historia. Cómo serían las demás, apostilló el comentarista lúcido. Mientras tanto,  después de un cuarto de siglo de democracia solo Portugal y Grecia están por debajo de nosotros en el índice de lectores de periódicos por mil habitantes. Pues ¡hala! todos por el Nuevo Bachille…¿qué? rato

 

Miguel García Posada

 

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