¿Cómo se dividen las células madre?

Las células madre podrían suponer una revolución en la medicina de los próximos años gracias, precisamente, a sus diferencias con las células somáticas. Por ejemplo, sufren una división celular (mitosis) asimétrica, lo que permite que una célula hija se diferencie mientras que la otra se mantiene como célula madre, pudiendo seguir así indefinidamente. Pero cómo ocurre esto sólo estamos empezando a entenderlo. Científicos españoles han contestado en parte a esta pregunta.

 

En el Institut de Recerca Biomedica  IRB-ICREA-PCB, en Barcelona, un grupo de investigadores dirigido por el Dr. Cayetano González  ha arrojado algo de luz sobre la división asimétrica que presentan las células madre. Esta división asimétrica es vital para evitar situaciones potencialmente tumorales, como ocurriría si ambas células hijas fuesen células madres, así como para mantenerlas en cultivo, ya que es necesario que al menos una descendiente sea “inmortal”.

 

El modelo elegido han sido los neuroblastos de Drosophila. El estudio ha sido realizado gracias al uso de modernas técnicas de microscopía de fluorescencia, lo que ha permitido seguir el movimiento de la maquinaria de división celular “in vivo”. Normalmente, una célula antes de dividirse duplica el centrosoma, y se desplazan a polos opuestos de la célula. El eje de división viene determinado por la posición de ambos. Una vez posicionados, comienza la mitosis. En neuroblastos, sin embargo, existe un único centrosoma inmóvil situado en un extremo de la célula. Justo antes de dividirse, aparece un segundo centrosoma en el otro extremo, y comienza la división.

 

Este proceso es lo que se aborda en el trabajo del grupo español. En realidad, lo que ocurre es que hay una duplicación peculiar del centrosoma: mientras que uno de ellos está “activo” y fijo, el otro es incapaz de actuar como un organizador de microtúbulos y además presenta un movimiento agitado por toda la célula y aparentemente al azar. Previo a la división, este centrosoma se detiene, se estabiliza y se “activa”, formándose entonces el huso mitótico. El centrosoma entonces “activado” siempre es heredado por la célula hija que va a diferenciarse. Además, han identificado una proteína implicada en el mantenimiento de la distinta identidad de los centrosomas, lo que sugiere un posible papel en la transformación tumoral. Recientemente se ha descrito un proceso parecido en células madre de la línea germinal de Drosophila. En machos, sólo un centrosoma está activo (es decir, mantiene el áster) mientras que el otro se desplaza hacia el extremo siendo heredado por la célula hija, que es la que va a diferenciarse.

 

¿Es este mecanismo algo específico de Drosophila?¿qué proteínas dirigen esta asimetría?¿está presente en otras células madre dentro de Drosophila? Aunque todavía estamos lejos de poder responder a estas preguntas y de utilizar todo el potencial de las células madre, ahora estamos más cerca gracias, en parte, a avances obtenidos por científicos españoles.

Francisco A. Martín, PhD.

CBM (CSIC-UAM)

Compartir:

6 comentarios

  1. • ¿Antes de la primera clonación de animales, que hipótesis pudieron a ver llevado a los científicos a pensar que la clonación era posible?

  2. ¿Como se llama la proteina implicada en la diferenciación de los centrosomas antes de la mitosis?

Deja un comentario