Alguna luz, poca, en el párrafo octingentésimo trigésimo sexto de El Origen de las Especies

El autor es escurridizo. No quiere fijar su pensamiento en las graves ideas expuestas en el párrafo anterior y nos da un quiebro. Cambia completamente de dirección. Ahora ya no le importa el precio de las producciones y no insiste en que las variedades agrícolas o de la granja vayan a ser más interesantes que las especies en la naturaleza. No vuelve a incidir en el valor de dichas producciones. Ahora su discurso se va a otras latitudes, se dispersa:…