Peces y ojos. Córneas de escamas de peces

Desde hace varios años se investiga sobre la posibilidad de utilizar corneas elaboradas a partir de escamas de peces para su transplante a humanos.

Actualmente existe un déficit de donantes de córnea a nivel mundial. Aunque estamos en el inicio del camino, los resultados obtenidos en modelos animales sugieren que las corneas preparadas con una matriz de colágeno obtenida de escamas de peces son una alternativa real a las procedentes de donantes humanos.

Una importante cantidad de los casos de ceguera se dan por problemas que afectan a la córnea, una pequeña capa transparente que se ubica en la superficie del ojo y que, además de proteger otras estructuras del ojo, tiene la función de enfocar las imágenes que tenemos ante nosotros. Cualquier defecto o daño en la cornea, afecta a la vista.

La ceguera relacionada con problemas en la córnea es la segunda causa de ceguera a nivel mundial. Esto es más acusado en los países en desarrollo. La idea original es del Dr Julio Lin cuya investigación identificó a la tilapia como posible origen de colágeno viable con una composición en aminoácidos muy similar al del colágeno de humanos. Además su transparencia es muy similar a la de los humanos. El material puede ser cosido y su biocompatibilidad es muy positiva tanto en ratones como en conejos.

A través de un proceso relativamente complejo, en el que las escamas de pez son descalcificadas y eliminadas las células presentes, se consigue un armazón de colágeno con propiedades similares a las de la córnea humana.

En ese armazón se pueden cultivar células madre para crear una córnea para investigación o para transplante.

Otra alternativa que se está investigando es la de emplear células madre. Se trata de la regeneración en el laboratorio de las córneas dañadas mediante el uso de células madre de adultos, lo que se realizaría en laboratorio. Específicamente, se trabaja con las llamadas células madre limbares, capaces de recrear y mantener el tejido de la córnea. Su uso, permitiría regenerar una cornea dañada.

Como ya hemos escrito anteriormente el mar y los ríos no solo producen alimentos o sirven como basurero. Sus recursos pueden emplearse, entre otras cosas, para curar enfermedades.