Llega la TDT de pago

El pasado 17 de junio el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio aprobó finalmente la televisión de pago mediante la TDT (Televisión Digital Terrestre). Con esta medida, el Gobierno autoriza una modalidad de televisión de pago que se venía reclamando desde el sector y que, según el Ministerio, intenta evitar que nuestro país se quede retrasado respecto a otros países de nuestro entorno -como Reino Unido, Francia, Suecia, Finlandia, Países Bajos o Italia- donde la TDT de pago ya es una realidad. A partir de este momento, aquellos operadores privados de televisión terrestre que así lo soliciten podrán prestar este servicio. Por su parte, la televisión pública queda excluida de esta iniciativa, ya que no podrá lanzar canales de estas características, según lo establecido en la Ley de Financiación de RTVE.

El portavoz de la Unión de Televisiones Comerciales Asociadas (UTECA), Jorge Del Corral, ha destacado la «unanimidad» de las cadenas privadas al defender la implantación de la TDT de pago. Por el contrario, la decisión adoptada por el departamento que dirige Miguel Sebastián no ha sentado nada bien a los operadores de televisión de pago a través de las plataformas de cable, satélite o ADSL que temen ver mermados sus ingresos. Estos operadores agrupados en Redtel consideran  que se da preferencia a los canales de pago en digital terrestre. Al mismo tiempo, las operadoras de telecomunicaciones esperan la concesión de nuevas frecuencias procedentes del ‘dividendo digital’, es decir, aquellas que quedarán liberadas en el espectro como consecuencia de la migración digital y que podrán ser concedidas para consolidar la televisión móvil.

Los deportes, el cine y las series televisivas serán los contenidos más atractivos para la TDT de pago. Jaume Roures, máximo responsable de Mediapro, ha anunciado que Gol TV, el primer canal de TDT de pago en España, comenzará sus emisiones a partir de la última semana de agosto. Gol TV ocupará la frecuencia por la que ahora emite en TDT Hogar 10 y ofrecerá los partidos de la Liga y de la Champions a un euro.

El mayor obstáculo para la implantación de la TDT de pago es que requiere un nuevo descodificador que permita escoger los programas y efectuar el pago. La mayoría de los 17 millones de descodificadores ya vendidos e instalados para TDT en abierto -no interactiva- no disponen del necesario canal de retorno para efectuar esta compra ‘on line’. Lo que la mayor parte de los ciudadanos desconocen es que ni los televisores planos de gama alta que incorporan sintonizador TDT, ni los denominados zappers -los descodificadores más económicos y más comprados- son útiles para completar el pago por los contenidos a través del mismo televisor.

La oferta de descodificadores interactivos es todavía marginal y, aunque los precios están bajando, todavía se sitúan por encima de los 100 euros frente a los 30 euros que ahora cuesta un descodificador no interactivo. De los 2,4 millones de descodificadores vendidos el año pasado, apenas 36.000 ofrecen funciones que van más allá de la simple traducción de las señales.

La opción más conveniente para la implantación de la TDT de pago será el sistema prepago, ya probado con éxito en el mercado italiano. Pero, Asimelec, la patronal de los fabricantes de aparatos electrónicos, critica el hecho de que ahora tengamos que incorporar dispositivos de prepago para más adelante sustituirlos por los terminales interactivos que, en un futuro proporcionarán también la señal de televisión en Alta Definición. En este sentido, el Ministerio de Industria apuesta por descodificadores que consientan acceder a los distintos canales desde cualquier dispositivo interactivo, a lo que los fabricantes se quejan por no haber sido informados de los planes sobre este nuevo servicio.

A la espera de que se resuelvan las dificultades técnicas, confiamos en que la TDT de pago sirva como motor para la dinamización de la industria audiovisual. Todo ello sin que esto conlleve una merma de contenidos en la TDT en abierto, una programación que hasta el momento tampoco supone una fuente de innovación con respecto a la televisión analógica. Esperamos que la llegada del pago a la TDT suponga una nueva fuente de la financiación para los operadores y que ésta ‘alimente’ la paupérrima oferta de contenidos de la TDT en abierto.