guerra del partido republicano (EEUU) contra la ciencia

En EEUU la ciencia está sufriendo ataques desde el nivel más alto hasta el más bajo.

 

Sobre el rechazo a la ciencia y el resurgimiento de la magia

 

 

Voy a comentar sobre un libro aparecido en los EEUU y sobre una recensión del mismo realizada por David Brin.

 

El libro se llama «The Republican War on Science», de Chris Mooney.

 

El tema me interesa: Libro y recensión analizan el rechazo creciente  que está experimentando la ciencia (pero no sus resultados) por parte de  un segmento importante de la población americana.

 

Me gustaría añadir mis reflexiones sobre este tema, por si tuviesen  algún valor y pudiesen interesar a alguien.

 

La ciencia, en un segmento de una sociedad esencialmente iletrada, está  hoy disociada de sus efectos. Para una parte de la sociedad humana, el apretar un botón y tener luz eléctrica, o mejor aun, el apretar 12  teclas y poder hablar desde un autobús  en el desierto del Sahara  con un periodista en Madrid, es algo «normal». Es algo que «es así»,  que ocurre sin el menor esfuerzo.

 

Muy poca gente relaciona los millones de horas de trabajo en los  laboratorios con el lujo de que disfruta. Para una muy buena parte de la  población humana, los aviones existen y vuelan porque alguien dispuso  que volaran, con el mismo razonamiento con que aceptan que las gaviotas  vuelan porque alguien, suponen ellos, las diseñó así.

 

El hecho queda disociado de su causa, o más bien, las innumerables  causas, que es de lo que trata la ciencia, quedan diluidas siempre  en una causa única, en un diseño inteligente.

 

El problema de ese diseño inteligente es que no lo es. No lo es porque  si alguien diseñó el vuelo de los cisnes, también debió diseñar los virus  que los matan. Y aquí acaba la teoría del diseño inteligente.

 

Porque esos miles de millones de personas no aceptan los virus, y demandan, no a quien los diseñó, sino a personas normales, que encuentren la manera de  eliminarlos: Es decir, demandan vacunas, y las demandan rápidamente, como  si las vacunas fueran obra de Harry Potter y se hicieran con un chasquido  de los dedos.

 

Esa demanda ha perdido la conexión con los seres humanos. Se demanda cura  contra los virus como se piensa que fuimos diseñados para disfrutar de la vida. Hoy la ciencia ha quedado alejada de los mortales, o más bien, de una  cierta mayoría de éstos, que rechaza el esfuerzo de aprender, pero que no  rechaza los logros de ese aprender, que exige resultados sin aceptar las contrapartidas.

 

Dejenme explicar este párrafo críptico: La cura contra los virus, el diseño  de los aviones, la fabricación de los móviles, etc., etc., etc. dependen  de una cultura de esfuerzo e inversión masiva en ciencia. No hay cura  contra las enfermedades en culturas que rechazan la capacidad humana  para cambiar el mundo y el orgullo humano frente a la naturaleza.  No hay cura contra los virus en aquellas culturas que aceptan el «Así está  escrito».

 

Pero estas culturas tienen un enorme encanto, un enorme encanto para cierta  forma de pensar: Para aquella forma de pensar que, por un lado, rechaza que  alguien pueda combatir sus opiniones. Hay personas que buscan tener esclavos,  y ¿qué mejor justificación de la esclavitud que señalar que el mundo es «así»  y que debemos aceptar esa esclavitud porque así está ordenado? Para  estas  personas los logros de la ciencia son automáticos y ocurren porque  así está mandado. Nunca han dudado de que los beneficios de la ciencia  les llegarán como les llega una comida que no saben ni donde se ha  comprado ni cómo ha sido producida.

 

Pero otra cierta cantidad de personas que si saben de donde viene la comida no aceptan, sin embargo, la libertad de la ciencia. La libertad es un concepto  muy duro, porque viene acompañada de responsabilidad. Una cierta cantidad  de seres humanos, prefiere, como los niños, que les den las cosas ya hechas.  Que haya un gobierno, o una esquema mágico, que les proporcione vivienda,  energía, precios bajos, comodidad, pero que todo eso no venga del  esfuerzo y del trabajo de mucha gente, sino como un regalo de un padre amante.

 

Por desgracia para la humanidad, nada de eso lo encontramos en la Tierra como recogemos sin esfuerzo conchas en la playa. La historia de la  humanidad, y de la vida en general es una historia de escasez,  de lucha contra los elementos, de combate contra las enfermedades.

 

Solo gracias a la actitud mental que inventó Galileo, la actitud mental de no dar nada por supuesto, la actitud  mental de asumir que podemos cambiar las cosas gracias al esfuerzo y al  estudio, solo gracias a esta actitud tenemos hoy vacunas, podemos volar y  hablar con nuestra familia a miles de kilómetros de distancia.

 

El problema actual es el enorme éxito de la ciencia y su disociación  de la vida común. Cuando compramos un móvil, un aparato de televisión,  una vacuna, cuando nos operan sin dolor, o nos curan el cáncer, no  asociamos ese móvil, ese avión, esa medicina, esos láseres, esa química,  con el esfuerzo inmenso de millones de personas que los hacen posibles.

 

La ciencia exige dudar constantemente de lo que se nos dice: Empezó  dudando de que fuera el Sol el que se movía, y hoy duda de cualquier  afirmación de cualquier persona. Al ser la ciencia duda sistemática  es la ciencia rechazada por todo el que quiere que se respete su dogma  particular, y es rechazada por todo aquel que se siente inseguro  ante la duda permanente: Una buena parte de la humanidad prefiere la falsa seguridad ante la duda permanente de la ciencia, pero  quiere añadir a esa seguridad los -resultados- de la duda permanente.

 

Una solución para mantener la ciencia, que necesitamos más que nunca,  es volver a mostrar a los ciudadanos el proceso real del trabajo  científico: No mostrar solo los resultados, sino mostrar que para  llegar a una vacuna exitosa, se han probado millones de combinaciones  sin éxito.

 

En un mundo donde solo cuenta el triunfo, debemos mostrar que este  triunfo deriva del trabajo duro, y sobre todo, de poner en duda cualquier  hipótesis, cualquier verdad revelada, cualquier afirmación gratuita.

 

Porque es evidente que hay líderes que rechazan de plano  que se dude de sus palabras, pero es la población la que debe  conocer que solo en la inseguridad está el éxito. Que el éxito  no es una gracia que llevamos dentro y que se nos da gratuitamente, sino  que el éxito deriva siempre del trabajo y de la duda.

 

La alternativa es evidente: Si rechazamos la ciencia, volvemos al  sistema de unos cuantos poderosos en posesión del dogma rodeados de  innumerables esclavos que aceptan su vida miserable porque «Así está escrito».

 

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5 comentarios

  1. Caro António, soy português e no escribo byen espanhol. Estou de acordo con su artigo e partilho sua preocupacion con la ceguera religiosa. Permita-me una solo correccion:non has sido Galileu que hay inventado la actitude mental qui est la mentalitade científica mas los gregos, Pitágoras, Tales, Platon, Aristoteles et outros.

    Grato por suas reflectiones

    Jaime Macedo

    Lisboa – Portugal

  2. la ciencia algun dia tendra que colapsar, lo malo que tiene la ciencia que no acepta a dios ni lo moral , lo moral se lo meten por la raja y dios tambien, haci como sigue la ciencia va exterminar lo espiritual y va a pasar a una epoca inmoral con experimentos con la tierra destruyendola y destruyendo todo lo moral porque de la religion biene lo moral, si la gente no cree en dios esto se va poner de lo peor, la gente va hacer lo que quiera, van a matar con experimento, se van a matar unos a otro, se van a violar a unos a otro, no importa de que religion sea pero lo esencial es lo moral y los cientificos no tienen moral no tienen espiritualidad, son unos malditos imbeciles igual que los ateos, yo e conocidos muchos sinverguenzas que son ateos y prefieren la ciencia.algun dia la ciencia se dara cuenta que el mejor camino es lo espiritual no lo inmoral.

  3. LeoGim se defiende de los esclavos, es decir los mamelucos-. Creo energa, por primera vez, al conseguir empujar toneladas sin precisar variar el volumen de fluido-. En mi rotacin, lleno de aceite mineral, alcanzo el punto de fuerza cuando mi plano de trabajo abre un ngulo determinado donde todos los vectores directores de fuerzas inciden en un 80 % sobre el seno del ngulo recto del plano de trabajo y del perpendicular, el seno del ngulo fijo de la camisa aporta su fuerza unidireccional al plano de trabajo como gradiente-. El momento de fuerza se produce al inyectar un 0,5 % del volumen de la masa por cada 70 k/pcm2 que eleva la presin de empuje. El volumen de fluido de ambos ngulos obligan a la rotacin del cilindro-rotor, y cuando los planos perpendiculares se separan con el giro, los surcos hacen posible mantenerlos comunicados durante el tramo que empuja SIN VARIAR LA PRESION Y EL VOLUMEN.

    Sres. De madridmasd, representis la ciencia de I+D+I de Espaa, la que hace que la cada de la industria del tocho sea irrelevante para la economa, que derroche de talento,. Deberais empezar a asimilar lo mas fcil, el portal de libertad que supone Internet, -para todos-.

    Os continuo retando a que en este portal expongis vuestros argumentos tcnicos- contra LEOGIM. El insulto dejarlo para los polticos, a m, no me paga nadie.

    LEOGIM Motor Hidrulico.

    http://www.energia-electrica-leogim.info

  4. LeoGim se defiende de los esclavos, es decir los mamelucos-. Creo energa, por primera vez, al conseguir empujar toneladas sin precisar variar el volumen de fluido-. En mi rotacin, lleno de aceite mineral, alcanzo el punto de fuerza cuando mi plano de trabajo abre un ngulo determinado donde todos los vectores directores de fuerzas inciden en un 80 % sobre el seno del ngulo recto del plano de trabajo y del perpendicular, el seno del ngulo fijo de la camisa aporta su fuerza unidireccional al plano de trabajo como gradiente-. El momento de fuerza se produce al inyectar un 0,5 % del volumen de la masa por cada 70 k/pcm2 que eleva la presin de empuje. El volumen de fluido de ambos ngulos obligan a la rotacin del cilindro-rotor, y cuando los planos perpendiculares se separan con el giro, los surcos hacen posible mantenerlos comunicados durante el tramo que empuja SIN VARIAR LA PRESION Y EL VOLUMEN.

    Sres. De madridmasd, representis la ciencia de I+D+I de Espaa, la que hace que la cada de la industria del tocho sea irrelevante para la economa, que derroche de talento,. Deberais empezar a asimilar lo mas fcil, el portal de libertad que supone Internet, -para todos-.

    Os continuo retando a que en este portal expongis vuestros argumentos tcnicos- contra LEOGIM. El insulto dejarlo para los polticos, a mi, no me paga nadie.

    LEOGIM Motor Hidrulico.

    http://www.energia-electrica-leogim.info

  5. Eduardo Ferreyra, desconozco si perteneces a madridmasd, para decir lo que escribes. Te aclaro que son ellos los que están insultando a través de realizar más de cien Links, en 24 horas, con el objeto de insultar y desprestigiar la invención. Madridmas I+D+I están vinculados con la ciencia de España y otros países. Mejor harían en exponer públicamente sus argumentos contra LEOGIM de manera técnica, si son capaces entre tantos Doctores de Ciencias, los estoy esperando para dejarlos en ridículo y llamarles lo que se merecen, mientras llega el momento de que les haga comparecer en los tribunales, amén de otras acciones. A madridmasd, les debería dar vergüenza del papel que están haciendo –sirviendo a quien yo me imagino- que no dudaré en sacar públicamente.

    No pe pidas que me calle al insulto Javier, soy una persona que no he recibido nunca, un céntimo del Gobierno, a ti no se te cae la cara de vergüenza, si es que la conoces, diciéndome lo que debo hacer, como dice ese que opina ¿eres gilipollas? O que te mueve en esto. Todo el gasto lo vengo poniendo yo, y como sabrás los organismos del estado gastan y también despilfarran muchos millones. Mi trabajo de años no me lo paga nadie, faltaría más que aguante insultos de un centro de ciencias, que ellos si que cobran de mis impuestos. Anímalos a que expongan sus dudas, os espero.

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