Vodka, gin tonic y antibióticos
autor: Marcin Krupka
Becado por la Fundación “La Caixa” en el Centro Nacional de Biotecnología
El uso de los antibióticos como medicinas tiene un origen reciente, menos de un siglo. Sin embargo, las propiedades curativas de muchos compuestos naturales ya se conocían hace más de dos milenios. Los chinos, griegos y árabes usaron en la antigüedad extractos de plantas para curar las infecciones. Hasta hoy varios pueblos africanos utilizan la corteza del quino, que contiene la quinina, para curar la malaria. Para hacer más llevadero el fuerte sabor amargo de las aguas carbonatadas de quinina utilizadas para prevenir la malaria, los colonos británicos de la India la transformaron añadiendo ginebra, fue el origen del “gin tonic”.
El estado de la medicina en el siglo XIX, en el que se desarrolla la acción de la novela Antek, de Boleslaw Prus, no difería mucho de lo que existía en las épocas más antiguas de la humanidad.