La calidad del agua, un problema que daña la salud

Según la Agencia Europea del Medio Ambiente en su último informe “La calidad del agua está mejorando y se ha reducido la presencia de contaminantes nocivos, sin embargo, las perspectivas a largo plazo no son buenas”. El informe prevé que los fenómenos naturales cada vez más virulentos motivados por el cambio climático y el uso de los suelos agravarán los problemas relacionados con el agua y la salud.

Patricia García-Muñoz, Ingeniería Química UAM

Cada día necesitamos agua aprovechable y limpia: para beber, bañarnos, cocinar y producir muchos bienes y servicios. Por ello, se deben proteger los recursos hídricos y garantizar su calidad ecológica. La Directiva Marco sobre el Agua (DMA) (2000/60/CE) [1] fue la primera directiva que adoptó una estrategia integrada para abordar esta tarea: proteger los ecosistemas acuáticos de la misma forma en cuanto a calidad del agua, cantidad de agua y su papel como hábitats.

Sin embargo, es probable que la mitad de las masas de agua de Europa no alcance el objetivo de la DMA y siga estando en un mal estado ecológico en 2015 [2]. Las razones son por una parte las presiones a las que se están sometiendo los recursos hídricos: escasez, contaminación y excesos en su uso; una situación que se conoce como vulnerabilidad. El uso del suelo, las captaciones de agua y el cambio climático son cambios inducidos por el hombre que alteran los ‘regímenes hidrográficos’ naturales de las masas de agua.

Varias fuentes apuntan asimismo a un frecuente desequilibrio en las aguas superficiales de Europa (agua de ríos y lagos) y aguas subterráneas (agua en acuíferos subterráneos). El uso del agua supera a menudo la disponibilidad de la misma, lo que provoca estrés hídrico en gran parte de Europa [3].

Según AEMA en su último informe “la calidad del agua está mejorando y se ha reducido la presencia de contaminantes nocivos, sin embargo, las perspectivas a largo plazo no son buenas”. El informe prevé que los fenómenos naturales cada vez más virulentos motivados por el cambio climático –inundaciones, sequías…– agravarán los problemas relacionados con el agua y la salud.  Además AEMA advierte que los nuevos contaminantes, procedentes de productos farmacéuticos y de cuidado personal entre otros, pueden convertirse en un problema en el futuro, al igual que la floración de algas y los microorganismos patógenos.

Por otra parte, AEMA señala que la contaminación por nitrógeno afecta a la calidad de los acuíferos y ocasiona la eutrofización del agua dulce y de los ecosistemas marinos. Después de la aplicación de estiércol y fertilizantes a las tierras de cultivo, el exceso de nutrientes puede ser emitido al aire, filtrarse en forma de nitrato hacia las aguas subterráneas o bien ser arrastrado hacia las aguas superficiales. Esta carga de contaminación presente en el agua dulce acaba descargándose en las aguas costeras, donde puede acarrear graves consecuencias. La OMS señala que el 20% de las muertes en el mundo se deben a factores ambientales destacando el papel crucial de las aguas contaminadas.

A pesar del éxito relativo obtenido en la reducción de contaminantes emitidos a las aguas en las últimas décadas, se necesitan reducir las presiones sobre el agua que provocan su deterioro para poder permitir una recuperación medioambiental. Entre las medidas claves destaca el empleo de tratamientos de aguas residuales más efectivos y mejores prácticas agrícolas. Estos últimos son uno de los objetivos del Séptimo Programa de Medio Ambiente recientemente aprobado por la Unión Europea [4].

El séptimo Programa de Medio Ambiente establece un marco coherente para ampliar los esfuerzos de la sociedad hacia un sistema sostenible. Se compromete a que la Unión Europea «estimule la transición hacia una economía verde y se esfuerce por una disociación absoluta del crecimiento económico y la degradación del medio ambiente» con la visión hacia el año 2050 [5].

FUENTES:

[1] Directiva Marco del Agua 2000/60/CE
[2] Informe de la Agencia Europea del Medio Ambiente 08/2012
[3] Informe de la AEMA 11/2012
[4] Sétimo Programa de Medio Ambiente de la Unión Europea
http://www.eea.europa.eu/themes
[5]  European waters — assessment of status and pressures.
 ISSN 1725-9177

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