El talento y las empresas responsables: simbiosis necesaria

Hace unos días veía el nuevo autorretrato del genio del Renacimiento Miguel Ángel Buonarroti que ha sido descubierto en la recién restaurada Capilla Paulina en el Vaticano. Miguel Ángel representa sin duda el talento con mayúsculas: fue escultor -quien no piensa en su David-, pintor de la Capilla Sixtina y arquitecto.

 Les cuento esto porque desde hace años, el talento es considerado como el talismán necesario tanto para los grandes logros de la historia, como las innovaciones científicas o tecnológicas. En los últimos años, además, se confía en él, como pieza clave para los nuevos retos de las empresas responsables del siglo XXI.

Este hecho me ha hecho reflexionar ¿Qué simbiosis existe entre las empresas responsables y el talento?

La respuesta más inmediata sería que las empresas responsables apuestan por atraer y retener el talento. Para ello, las empresas intentan apoyar el desarrollo profesional, con actuaciones que favorecen la motivación y conciliación de la vida profesional y personal. Son empresas que apoyan la igualdad de oportunidades y la diversidad. Al tiempo, presentan un equilibrio entre beneficios económicos, respeto medioambiental y compromiso social. Desde mi punto de vista, esta vinculación de talento y responsabilidad social debe ser entendida desde una simbiosis necesaria. Ambos –empresa responsable y talento- se necesitan para avanzar y generar un binomio virtuoso a la hora de obtener resultados. Intentaré explicarme desde la perspectiva de expertos en las nuevas formas de gestión de los recursos humanos, y desde las empresas responsables que son reconocidas como los mejores lugares para trabajar:

1.  Acabo de leer el informe The Boston Consulting Group (GCG) y la World Federation of Personnel Management Associations (WFPMA), donde se indica que la falta de talento será el principal reto de la gestión de los recursos humanos en todo el mundo en los próximos años. El estudio, basado en una encuesta a 4.741 ejecutivos en 83 países, concluye que, en opinión de los directivos, el desarrollo del liderazgo y la conciliación de la vida profesional y personal son prioridades urgentes. Según este informe, la gestión del talento se presenta como el mayor reto de los recursos humanos en 9 de los 17 países analizados con mayor profundidad, incluidos Estados Unidos, Australia, Singapur, Japón, Reino Unido y España.Sin duda estamos en presencia de la necesidad de una nueva gestión del talento que requerirá nuevos enfoques centrados en:

  • La búsqueda del compromiso: Éste es un factor clave en el rendimiento. La sostenibilidad de las empresas requiere de personas comprometidas, de talento comprometido. Todas las personas tienen capacidad de comprometerse, pero el compromiso no es algo que se pueda exigir sino algo que las personas deciden dar. Por lo tanto, las empresas deben estar preparadas para favorecer la aparición de ese compromiso. Empresa y empleado/a deben ser capaces de construir un contexto para favorecer el compromiso. Aquí, el estilo de dirección de los líderes juega un papel fundamental, tomando decisiones que tengan en cuenta a sus empleados/as.
  • El desarrollo de los profesionales que están en nuestra organización. Junto a los conocimientos y experiencia necesarios para la mejora de los profesionales, el desarrollo del talento demanda nuevas competencias para dar respuesta a nuevas situaciones de mercado. La adaptación acelerada a los cambios requiere de un modelo de aprendizaje que contribuya a la búsqueda de soluciones. Además, las redes de experiencia, la creación de network y los sistemas de apoyo individual adquieren un valor trascendente en el desarrollo del talento. Es preciso ofrecer retos y crear expectativas adecuadas de desarrollo.

2.    En relación a las empresas responsables, hace poco tiempo se ha publicado el ránking MERCO (Monitor Empresarial de Reputación Corporativa)    que ha señalado que el desarrollo profesional es el valor más importante por parte de los empleados. Le siguen la motivación y el reconocimiento. Si se repasa el resto de los factores valorados por los más de 7.000 trabajadores, resulta llamativo que sólo se mencione uno de carácter material (el salario) frente a los diez restantes relacionados con intangibles. Desde los ya comentados – crecimiento profesional o motivación- a otros como la flexibilidad, la identificación personal con el proyecto o la igualdad de oportunidades forman parte de los componentes que más valora el empleado en una empresa.

El Informe Merco Personas 2009 también pone de relieve cuáles son las medidas de conciliación laboral preferidas por los más 7.000 trabajadores encuestados. Entre estas herramientas se sitúan la flexibilidad horaria y el teletrabajo. Otros estudios, también muestran que las empresas responsables están preocupadas por definir el futuro de las carreras profesionales de sus empleados. También están apareciendo informes donde se analizan los intereses de los jóvenes, pues serán los nuevos directivos, líderes y empleados en general en los próximos años. Además desde hace unos años las empresas responsables pueden participar en los reconocimientos como mejor lugar para trabajar.

Mientras les expongo estas ideas de talento y empresas responsables, me pregunto sobre las Pymes que también necesitan talento y su apuesta por actuar de forma responsable. Cuento esto, porque a veces las Pymes apenas son visibles en ranking de mejores lugares para trabajar, pero están allí y también están preocupadas por el talento, y que el éxito empresarial necesita personas con ideas innovadoras, para hacer posibles los productos y servicios que los consumidores y la sociedad demanda. De hecho, muchas Pymes apuestan por la conciliación de la vida profesional y personal; y también por la calidad en el empleo para todos sus empleados.

En resumen, las empresas tanto grandes como pequeñas se enfrentan a importantes cambios que diariamente surgen en el mundo y que exige contar con los mejores profesionales para adaptarse óptimamente a los cambios actuales y futuros.

Me gustaría finalizar mencionando a François Jacob premio Nobel de Medicina 1965, y en concreto su Libro La Lógica de lo Viviente, donde comenta que la historia de la biología no es únicamente una acumulación de resultados experimentales, sino que hay que tener presente todas las interrelaciones favorables existentes. Siguiendo con esta idea, comenzaba este post con Miguel Ángel quien desarrolló su labor artística a lo largo de más de sententa años entre Florencia y Roma, que era donde vivían sus grandes mecenas, la familia Médicis de Florencia, y los diferentes Papas romanos. Este genio pudo mostrar todo su potencial con el apoyo de mecenas, y hoy podemos admirar sus obras. De igual forma, las personas con talento deben contar con los cimientos y las condiciones de apoyo en el entorno de trabajo, pero a su vez las empresas responsables saben muy bien que para los resultados sostenibles en el tiempo, deben favorecer el compromiso con sus empleados/as tanto con aquellos que tienen talento como con el resto. En resumen, una simbiosis empresa responsable y talento es necesaria.

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2 comentarios

  1. Es una pena que no todas las grandes entidades, en especial las administraciones públicas, no den la suficiente importancia al talento. Por ello mantienen sistemas de promoción basados más en parámetros como la antigüedad o los cursos que el talento y el compromiso.

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