Una vez más, el amigo Alfred Zinck nos envió un enlace al blog denominado Hemmy.Net, en el que se nos informa de como algunos agricultores compaginan sus labores agrícolas con actividades lúdicas, generando así bellas imágenes en el seno de sus campos de arroz. Estas fotos pertenecen a la villa de Inakadate, aunque desde este sitio del ciberespacio también se comenta que en otros pueblecitos nipones también se lleva a cabo esta arte agrario. No estaría mal que los agricultores de otros lares imitaran su ejemplo, por cuanto debe ser divertido a la par que pudieran  incrementar los ingresos de estas localidades por el denominado turismo rural. No se trata de usar arroz. Es factible emular tal práctica mediante el uso de otras especies cultivadas o mezclando varias de ellas, ya que el policultivo acarrea numerosas ventajas desde el punto de vista ambiental (ver nuestra categoría “etnoedafología y conocimiento campesino”). Esta iniciativa podría beneficiar más a aquellos espacios planos, en donde la monotonía no resulta atractiva a los ciudadanos que desean pasar uno o más días entreteniéndose en la naturaleza. Comprar una casa en el campo, y convertirla en un hotelito bajo el reclamo de usar energías renovables es una práctica hostelera muy extendida en España. Sin embargo, en la mayor parte de los casos, la originalidad brilla por su ausencia, mientras que la relación costo/beneficio resulta ser deplorable, así como los propios servicios que tal hostelería brinda. Ganar dinero, sin imaginación y con el menor trabajo posible no es una solución satisfactoria.

agricultura-arte-y-turismo-rural-3-hemmy-net 

Agricultura y arte campesino en Japón. Fuente: Hemmy.Net

También considero que muchas actividades laborales pueden resultar atractivas o no para los trabajadores en función del entusiasmo y la imaginación con que se apliquen en llevarlas a cabo. Tan solo muestro tres fotos, aunque en el blog   Hemmy.Net se exponen muchas más. Os animo a visitarlo. Ojalá un día cunda el ejemplo en España y otros lugares de habla hispana. No se trata pues de explotar tan solo la belleza que ofrecen ciertos espacios geográficos, sino de construirlos por nuestros propios medios tradicionales en otros que no la atesoran per se.

 agricultura-arte-y-turismo-rural-2-hemmy-net

Agricultura y arte campesino en Japón. Fuente: Hemmy.Net

El beneficio indirecto para los agricultores y sus aldeas de agricultores-artistas puede ser enorme si aprovechan ellos mismos la generación de belleza con vistas a levantar hotelitos y casas, o les cobran un canon a los foráneos que deseen explotar la belleza del turismo rural que ellos bordan con sus manos. Más hermoso que “cosechar cultivos subvencionados”, a la par que les independiza de la veleidades del mercado.

agricultura-arte-y-turismo-rural-2-hemmy-net 

Agricultura y arte campesino en Japón. Fuente: Hemmy.Net

 En este caso concreto, como se apunta en el blog aludido, los campesinos del Japón haciendo uso de cultivares de distinto color y sus disposiciones en patrones espaciales, dan lugar a estas hermosas creaciones.

Juan José Ibáñez     

Compartir:

2 comentarios

  1. nonadado, boquiabierto, sorprendido. Se requiere de una gran imaginación. Felicitaciones al autor o autores de tamaña puesta en escena. Me gustaría conocer pormenores de esta obra de arte rural.

Deja un comentario