La ciencia está presente en nuestra vida diaria. Muchas veces oculta y escondida, pasa desapercibida a nuestra mirada. El objetivo de este concurso es desvelar este mundo, hacer evidente la relación de la ciencia con nuestra cotidianidad, mostrar los edificios de la ciencia en su contexto espacial, presentarlos como parte fundamental en la definición del territorio y en concreto en la formación y definición de la ciudad.

La construcción de un laboratorio, de un hospital, de una facultad o de un instituto de investigación no es sólo una decisión de política científica. Son, por supuesto, lugares para crear ciencia, pero son también potentes elementos simbólicos que sirven para promocionar tanto la disciplina para la que han sido concebidos como la ciudad que los alberga. Vanguardia y ciencia se solapan, funcionalidad y símbolo confluyen en ellos. El crecimiento, la conquista de nuevos espacios y la urbanización han estado y están estrechamente unidos al desarrollo de la ciencia.

Al mismo tiempo, las ciudades imponen y siguen imponiendo su lógica a la ciencia.
La estructura urbana, las múltiples redes que la conforman (agua, luz, gas, transporte, telefonía, sanidad, comunicaciones, información,…) y que hacen posible nuestra vida son el resultado de un intenso trabajo de planificadores urbanos, científicos e ingenieros.

El objeto de las fotografías de este concurso son espacios relacionados, actualmente o en el pasado, con el desarrollo de ciencia. La ciudad tal y como hoy la conocemos es el resultado de un largo proceso de construcción tanto en lo material como en lo ideológico. El objetivo, por tanto, es mostrar cómo la ciencia ha conformado el espacio ciudadano y en sentido inverso, cómo la ciudad ha impuesto sus condiciones a la ciencia, o en otras palabras, se pretende buscar la ciencia en la ciudad que la acoge y al mismo tiempo encontrar la ciudad en la ciencia que la sostiene. La ciudad está llena de ciencia pero la ciencia también está llena de ciudad.

El tema de este año quiere hacer hincapié en la definición y formación de los espacios urbanos del mundo. Si bien las fotografías deben mostrar los edificios relacionados con la ciencia, éstos no deben ser el objeto final de la fotografía. No se buscan ni personajes concretos de la ciencia ni objetos meramente científicos o fachadas imponentes de edificios sin una vinculación con el entorno. Las fotografías deben descubrirnos la ciencia y los espacios de la ciencia.