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"Nos concentramos en proyectos que dejen huella en el sistema sanitario y beneficien al paciente"

José Antonio Sacristán

Director de la Fundación Lilly
 

29/05/2014

1.- ¿Cómo nació la Fundación Lilly? ¿Con qué objetivos?

La Fundación Lilly nace en el año 2001 con el objetivo de contribuir al desarrollo y mejora de la salud de los ciudadanos, llevando a cabo actividades encaminadas a fomentar la investigación biomédica, la formación y la divulgación científica.

2.- ¿Qué tipo de actividades realiza la Fundación?

Dentro de las actividades orientadas a fomentar la investigación, destacan por su prestigio los premios Fundación Lilly de Investigación Biomédica, que desde el año 2002 reconocen las aportaciones de los científicos más importantes de nuestro país. Como muestra, señalar que los último galardonados, que precisamente recibirán el Premio hoy de manos de la Ministra de Sanidad, son los profesores Amparo Cano y Jesús San Miguel, cuyas investigaciones han tenido un gran impacto en el conocimiento de la metástasis y el tratamiento del mieloma múltiple, respectivamente, beneficiando a miles de pacientes en el mundo.

Asimismo, a través del Foro de la Ciencia, la Fundación trata de generar propuestas encaminadas a mejorar el desarrollo y la competitividad de España en ciencia e investigación. Otras actividades que merece la pena destacar son la Cátedra Lilly-Universidad Complutense de Educación Médica, que se ha convertido en una referencia en todo lo que tiene que ver con la estandarización y la mejora de calidad en la enseñanza de la medicina; la iniciativa MEDES (Medicina en español), que además de mantener la base de datos MEDES.com, trata de fomentar el uso del español como lengua del conocimiento médico; el Programa de Alta Dirección en Instituciones Sanitarias, de IESE, en que ya se han formado cerca de mil directivos sanitarios españoles; o la Lección Magistral Andrés Laguna.

3.- ¿Qué beneficios aporta a la sociedad?

Nuestro objetivo es que las actividades de la Fundación redunden directa o indirectamente, en la mejora de la salud de los pacientes. Creemos que reconocer el valor de la investigación, fomentar el conocimiento y los valores médicos; o contribuir a mejorar la formación en gestión sanitaria, son actividades que encajan perfectamente con ese objetivo general. Por ejemplo, el curso IESE está sirviendo para lograr una gestión más eficiente de nuestro sistema sanitario, mejorando tanto su sostenibilidad como los resultados sanitarios obtenidos.

4.- Una de las iniciativas más novedosas es la lectura de la Lección Magistral en la Universidad de Alcalá, ¿debe la ciencia y la investigación estar más presente en la educación?

Absolutamente. La Universidad debería estar integrada en la estrategia de investigación, y tener un papel central en dicha actividad. Todos los países que destacan en ciencia tienen universidades que son punteras en investigación. Además, la ciencia y la investigación deben estar presentes en la educación, de forma muy especial en la de los médicos. Este es uno de los motivos por el que hace tres años la Fundación Lilly creó la Lección Magistral Andrés Laguna. Una Lección que, teniendo como referencia a uno de los médicos e investigadores más importantes de la historia de la medicina española, trata de desarrollar ese concepto del médico humanista que también basa su práctica médica en las evidencias que proceden de la observación y la experimentación.

5.- ¿Qué papel juega España y el español en la publicación Biomédica?

Aunque el inglés sea el idioma de la ciencia, la lingua franca, no debemos olvidar que en España, o mejor dicho, en Hispanoamérica, contamos con un activo enormemente importante, como es el español, hablado por más de 500 millones de personas. La publicación biomédica en español debe tener un protagonismo mucho mayor del que tiene. No para publicar los resultados de los trabajos más punteros, ya que estos seguirás publicándose en inglés, pero sí para difundir el conocimiento médico. Muchos médicos leen en español, y adquieren y actualizan sus conocimientos a través de las revistas en español. En este sentido, nuestra asignatura pendiente es que haya menos revistas en español, pero que su calidad sea mayor, de forma que también mejore su impacto y su atractivo para publicar. Con MEDES queremos poner nuestro granito de arena en los temas de la calidad y la difusión de las mejores publicaciones.

6.- ¿Qué retos tiene la investigación biomédica desde el punto de vista científico?

En mi opinión, existen tres retos fundamentales: 1) que esa investigación traslacional de la que tanto se habla se convierta en una realidad, pero redescubriendo que su verdadera direccionalidad no es tanto la que va del laboratorio al paciente como la que empieza con las preguntas relevantes, que tienen lugar en la práctica clínica y traslada dichas preguntas a los científicos básicos; 2) que se entienda que en investigación la colaboración no es una opción, sino una necesidad; y 3) que la actividad misma de la investigación deje de estar tan centrada en los métodos para estar más centrada en los fines. O lo que es lo mismo, que la investigación sea un proceso mucho más creativo.

7.- ¿Y desde el punto de vista del tejido empresarial?

La colaboración, en todas sus versiones: público-privada, pública-pública, y privada-privada. Y por supuesto, entendiendo que se trata de una actividad cuyos frutos se recogen a largo plazo y que es intensiva en inversiones, tanto monetarias como, sobre todo, en personas. La investigación es muy cara y requiere altísimas inversiones, pero sobre todo, requiere personas bien formadas y creativas que sepan sacar el máximo partido de los recursos disponibles.

8.- Llevan más de 10 años apoyando la investigación, ¿cuáles son los propósito para la próxima década de la Fundación?

Nos gustaría que la Fundación Lilly y nuestras actividades siguieran siendo reconocidas por su nivel de excelencia. Somos partidarios de concentrar nuestros esfuerzos en aquellos proyectos que, a medio y largo plazo, dejen una huella en el sistema sanitario y tengan al paciente como beneficiario final. Sabemos que son objetivos ambiciosos, pero creemos que ese es el camino.



José Antonio Sacristán es Doctor en Medicina por la Universidad Autónoma de Madrid, Médico Especialista en Farmacología Clínica y Máster en Administración en Empresas por IESE.

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