La iglesia ha sido sometida a diferentes actuaciones de restauración. La más reciente es del año 2002. En la portada toscana, se bajó el nivel de la calle para descubrir las basas de las columnas, que fueron restauradas con mortero de restauración, y el nuevo solado se realizó con losas de piedra natural y cantos rodados.

Es frecuente la sustitución de sillares, que se distinguen de los originales por el diferente acabado y labra de la superficie que presentan. También se ha procedido con la sustitución de elementos perdidos, mediante la utilización de morteros de restauración. Por debajo de estos morteros se han generado sales, que han favorecido el desprendimiento del mortero y el deterioro de la piedra.