A lo largo de cuatro diferentes apartados, en este documento publicado por el Centre d?Economia Industrial de la Universidad Autónoma de Barcelona, se muestran las aportaciones, resultado de la investigación de tres destacados académicos, a cerca de las condiciones de éxito de las inversiones en tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y principalmente como éstas se relacionan con la estrategia competitiva de la empresa.

De acuerdo con lo planteado por los autores Alex y Joseph Rialp y Esteban García Canal, aunque las inversiones en TIC pueden marcar un antes y un después en la vida de una empresa, por si misma la adquisición de este tipo de tecnologías no implica una repercusión inmediata en su competitividad. Con este planteamiento, la obra inicia con la exposición de un marco conceptual, delimitando al mismo tiempo el concepto y alcance de las TIC que se han considerado para la investigación.

En esta misma parte se habla sobre el papel de las TIC en la empresa. Se explica como éstas han generado importantes oportunidades de mercado, al abrir nuevos canales de venta y comunicación con los clientes; así como el reconocimiento de posibles sinergias e implicaciones organizativas, a través por ejemplo del surgimiento de nuevas oportunidades para la optimización de procesos internos.

A continuación, obedeciendo al objetivo principal del trabajo, los autores acometen la labor de aportar sus criterios acerca de cómo una empresa puede aprovechar las oportunidades de crecimiento y de mejora de la rentabilidad asociada a la inversión en TIC. Tomando como punto de partida la explotación de diversas bases de datos y estudiando en profundidad un conjunto de casos seleccionados de compañías españolas analizado su experiencia particular, presentan además una tipología de usos estratégicos de las inversiones en TIC, así como un análisis de diversos problemas de gestión que se pueden presentar en su implantación. Tipología que ha sido validada y desarrollada a partir del estudio a las empresas Banco Sabadell, Derecho.com, FICOSA, Fagor-Ederlan y mccgraphics.

Hacia el último punto, la evidencia empírica cuantitativa y cualitativa integrada, permite a los autores argumentar que las empresas pueden realizar hasta tres usos estratégicos de las TIC: 1. Mejorar la eficiencia interna de la empresa, 2. Mejorar la atención a los clientes actuales y 3. Definir nuevos mercados y nuevas oportunidades de negocio. Y por su pertinencia, me permito citar textualmente que su investigación muestra además, que estos tres usos no son sustitutivos sino complementarios.

Por último, se menciona que el estudio cualitativo realizado ha permitido identificar también criterios para afrontar diversos retos asociados a la puesta en práctica de estrategias de crecimiento vinculadas a inversiones en este tipo de tecnologías.

Sin duda este libro resulta de interés para aquellos interesados en temas de investigación sobre gestión de las TIC, pues analiza aspectos no estudiados sistemáticamente en literatura previa. No obstante su rigor científico y académico, no deja de ser un referente práctico para empresarios y directivos preocupados por la gestión de las inversiones en TIC, al mismo tiempo que puede aportar elementos para la formulación de políticas públicas que no sólo incentiven la adopción sino la eficiente gestión de las tecnologías de la información y la comunicación.