Taller de Conocimiento del Medio  
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Enigmas egipcios
 
   

Responsables:
Gregoria Batalla Batalla
Virginia Cabrera Sánchez
Ana Díaz Cappa
Rosa M.A Ropero Perejil
M.A José De Blas Arribas
M.A Jesús Torres Asensio

Centro: Escuela de Educación Infantil Zaleo

Fuente: VII Feria Madrid por la Ciencia

Dirigido a: Todos los niveles educativos

Materiales
 Cartulina.
 Pintura de dedos.
 Rodillo.
 Bolas con números o bingo.
 Cartulinas con numeración egipcia.
 Cartones con numeración egipcia.

Siempre mido diez veces mis manos

Siempre mido diez veces mis manos.
¿Tienes un cuerpo 10?

Los egipcios solían utilizar partes del cuerpo, como los brazos o los dedos, para hacer mediciones. La utilización de este tipo de medidas dependía de las características físicas de cada persona. Por eso inventaron el «codo real»: una medida estándar que equivalía a unos 52,3 cm de nuestro sistema métrico decimal.

En la historia de las matemáticas existen muchos referentes a la medida con partes del cuerpo, como, por ejemplo, la propuesta de Leonardo da Vinci y su hombre de Vitruvio. Se trata de una proporción matemática del cuerpo humano. Igual que el codo equivale a siete palmos, la longitud de la mano es aproximadamente un décimo de la altura de un hombre.


Flor de Loto

Los egipcios utilizaban el sistema decimal para sus cálculos. Para representar un número utilizaban una serie de símbolos escribiéndolos normalmente de derecha a izquierda. La mejor forma de conocer significativamente estos números egipcios para nuestros alumnos es hacerlo mediante un recurso pedagógico como la lotería.


¿Qué hizo el visitante?

Sobre un trozo de papel continuo marcaba su altura y la medía con sus propias manos, estampándolas una detrás de otra hasta alcanzar la marca de su medida. Nuestros alumnos explicaban el curioso fenómeno por el que todos los visitantes medían 9 o 10 manos. Cada visitante pudo llevarse la prueba de su «cuerpo 10».

¡LOTO…!
¡LOTO…!

En la actividad de «Loto egipcia», el público era partícipe del juego de lotería, pudiendo poner a prueba su capacidad de representación numérica y de reconocimiento de los números en nuestra especial flor de loto, así como familiarizarse con el sistema decimal egipcio.

El que conseguía cantar «Loto» obtenía como premio un escarabajo de la suerte que le entregaban personalmente nuestros faraones científicos.

Otras actividades realizadas en el stand se pueden consultar en la página web del centro.


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