El público observará la naturaleza eléctrica de la materia con cualquier experiencia de electrización por frotamiento, contacto o inducción. Se les referirá el modelo del átomo macizo de Thomson, presente en el stand con ilustraciones plastificadas y póster gigante. A continuación se simulará el experimento que llevó a cabo Rutherford al bombardear una lámina de oro fina con partículas α. La lámina de oro, a nivel microscópico, será una malla metálica con huecos hexagonales y el papel de las partículas α lo desempeñarán pequeñas bolas de hierro. Los visitantes lanzarán los proyectiles y observarán que la mayoría de ellas atraviesan la red metálica. Sólo unas pocas, las que choquen con los finos alambres, se desviarán o rebotarán. Se incidirá en la incompatibilidad de este hecho experimental con el modelo atómico de Thomson, así como la necesidad de establecer un nuevo modelo atómico donde haya unos “huecos” (espacio entre el núcleo atómico y las órbitas).Indicaremos también dos hechos

El público llevará a cabo experiencias de electrización por frotamiento o inducción (globo que se electriza por frotamiento y no cae, chorro fino de agua de una bureta que se desvía por la presencia de un peine con electricidad estática por frotamiento,…) donde se demostrará la naturaleza eléctrica de la materia. Se les referirá el modelo del átomo macizo de Thomson con ilustraciones plastificadas y póster gigante. Los visitantes lanzarán contra la malla metálica los perdigones de hierro, se les retará a que intenten acertar con los alambres (núcleos de los átomos de oro o electrones del propio metal). Observarán cómo la mayoría de los proyectiles pasan la malla metálica sin incidencia. El participante introducirá el resultado de su experimento en un ordenador portátil, conectado a un cañón de luz, que proyectará constantemente en una pantalla el número total y porcentaje de partículas que han atravesado la red metálica sin incidencias, de las que se han desviado y las que han rebotado