Una forma alternativa y económica de iniciar a los alumnos de primaria y secundaria en la robótica es construyendo un artefacto móvil de reducidas dimensiones con aspecto de insecto terrestre. Podemos lograr su desplazamiento apoyando directamente sobre una superficie horizontal los ejes de uno o dos motores pequeños de baja potencia, sin utilizar ruedas. Los escasos componentes mecánicos y electrónicos se disponen intencionadamente, siguiendo un criterio estético inspirado en la biología, para originar un microrobot de muy bajo coste y altas prestaciones. Estos robots pueden funcionar de un modo autónomo aprovechando la vibración o la dirección de giro de los ejes de sus motores, pero también reaccionarían al contacto con las superficies que los rodeen o ante la presencia de luz, calor o humedad en su entorno próximo. Para controlar sus movimientos utilizaremos un mando compuesto de pulsadores, fabricado a propósito o reciclados, y que se comunique con el robot a distancia. También

- sobre una mesa se dispondrán para su observación, distintos prototipos elaborados por los alumnos del Centro que se encargarían de explicar sus distintos funcionamientos, los esquemas de los circuitos, así como las singularidades constructivas de cada uno de ellos. - una serie de insectoides construidos por los alumnos serán exhibidos funcionando conectados a distintos tipos de mandos diseñados previamente, explicándose los esquemas de cada circuito. El visitante podrá participar en una competición de destreza en el guiado con mando de robot-bichos. - una vez explicado como se conectan bichoide, placa y ordenador, los alumnos inician a los visitantes del stand en el lenguaje de programación LOGO y experimentan con él.