8 de Junio. Día Mundial de los Océanos

El 8 de junio se celebra el Día Mundial de los Océanos. Fue aprobado por la Asamblea General de la ONU a través de la Resolución 63/111, de fecha 5 de diciembre de 2008, como una manera de celebrar los océanos que comparten los países de mundo y nuestra relación personal con el mar, así como para crear conciencia sobre el papel crucial que los océanos desempeñan en nuestras vidas y las distintas maneras en que las personas pueden ayudar a protegerlos.

El lema para este año 2022 es “Revitalización: Acción colectiva por el Océano”, cuyo propósito es informar sobre el impacto de los humanos en el océano, desarrollar un movimiento mundial de apoyo y unir a la población en un proyecto para la gestión sostenible de nuestros mares.

Según la OCDE, la cantidad de desechos plásticos producidos a nivel mundial está en camino de casi triplicarse para 2060, con alrededor de la mitad terminando en vertederos y en el agua, y menos de una quinta parte reciclada.

Silvia Álvarez Torrellas – Grupo CyPS, Universidad Complutense de Madrid

“Si queremos un mundo libre de contaminación plástica, en línea con las ambiciones de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, tendremos que tomar medidas mucho más estrictas y coordinadas a nivel mundial”, dijo el secretario general de la OCDE, Mathias Cormann. “Este informe propone políticas concretas que se pueden implementar a lo largo del ciclo de vida de los plásticos que podrían frenar significativamente, e incluso eliminar, la fuga de plástico al medio ambiente” [1].

El informe preliminar, proyecta un aumento del consumo mundial de plásticos de 460 millones de toneladas (Mt) en 2019 a 1231 Mt en 2060 en ausencia de nuevas políticas renovadoras, un aumento más rápido que la mayoría de las materias primas. El crecimiento será más rápido en los países en desarrollo y emergentes de África y Asia, aunque los países de la OCDE seguirán produciendo muchos más desechos plásticos por persona (238 kg por año en promedio) en 2060 que los países no pertenecientes a la OCDE (77 kg) [2].

A nivel mundial, se prevé que la fuga de plástico al medio ambiente se duplique a 44 Mt por año, mientras que la acumulación de plásticos en lagos, ríos y océanos se triplicará con creces, ya que los desechos plásticos aumentarán de 353 Mt en 2019 a 1014 Mt en 2060. La mayoría la contaminación proviene de desechos más grandes conocidos como macroplásticos, pero la fuga de microplásticos (polímeros sintéticos de menos de 5 mm de diámetro) de artículos como gránulos de plástico industrial, textiles y desgaste de neumáticos también constituye una gran preocupación.

El aumento proyectado en el consumo y desperdicio de plásticos se producirá a pesar de un aumento esperado en el uso de plástico reciclado en la fabricación de nuevos productos, así como de los avances tecnológicos y los cambios económicos que deberían significar una disminución estimada del 16 % para 2060 en la cantidad de plástico necesaria para crear 1 euro de producción económica.

Se prevé que la proporción de residuos plásticos que se reciclan con éxito aumente al 17 % en 2060 desde el 9 % en 2019, mientras que la incineración y el vertido seguirán representando alrededor del 20 % y el 50 % de los residuos plásticos, respectivamente. Se prevé que la proporción de plástico que evade los sistemas de gestión de residuos, terminando en vertederos no controlados, quemados en pozos abiertos o filtrándose en el suelo o en ambientes acuáticos, caiga del 22% al 15% [3].

 

Con todo lo mencionado anteriormente, cabe destacar algunos datos importantes que se deben conocer sobre el Día Mundial de los Océanos:

– Los océanos cubren más de 70% de la superficie del globo. Solo el 1% de la superficie oceánica está protegida.

– Un conjunto de organismos marinos minúsculos llamados fitoplancton producen la mitad del oxígeno de la atmósfera mediante la fotosíntesis.

– Los océanos contienen el 96% de toda el agua de la Tierra. El resto es agua dulce que se encuentra en forma de ríos, lagos y hielo.

– El océano absorbe anualmente cerca del 25% del CO2 que se agrega a la atmósfera. – Esto se debe a la actividad humana, reduciendo así el impacto de este gas con efecto de invernadero en el clima.

– El conjunto de los ecosistemas costeros que actúan como sumideros de carbono, como los manglares, las marismas salinas y las praderas submarinas pueden contener una cantidad de carbono cinco veces superior a la de los bosques tropicales.

Y, es que, los océanos nos conectan y sostienen; son los pulmones de nuestro planeta —producen al menos el 50 % del oxígeno del planeta―, son una fuente importante de alimentos y medicinas —son la principal fuente de proteínas para más de mil millones de personas en todo el mundo―, y son una parte fundamental de la biosfera. Por no mencionar que resultan claves para nuestra economía, ya que, según la ONU, se estima que, para 2030, habrá en torno a cuarenta millones de trabajadores en todo el sector relacionado con los océanos.

Ocho millones de toneladas de plástico al año acaban en nuestros océanos, causando estragos en la vida silvestre, la pesca y el turismo. Pero el plástico no es el único culpable de que los océanos sean también grandes vertederos, pues cada segundo más de doscientos kilogramos de basura van a parar a los océanos, lo que ha provocado, incluso, la formación de “islas” de contaminación en mares y océanos.

Según la ONU, hay casi 3.000 millones de personas que dependen de la biodiversidad marina y costera para su subsistencia y, en la actualidad, los países dedican a las ciencias oceánicas entre el 0,04 % y el 4 % del dinero invertido en Investigación y Desarrollo (I+D), de manera que uno de los objetivos también se centra en reforzar y diversificar las fuentes de financiación en esta materia: “Cubren más del 70 % del globo, pero apenas hemos explorado menos del 5 %. Es nuestra nueva frontera. Tenemos muchas lagunas de conocimiento sobre los océanos, a pesar de su papel crucial para mantener nuestro planeta seguro y respirable”, señala Audrey Azoulay, directora general de la Unesco.

Y, es que, la salud de los océanos se encuentra en la actualidad en un punto de inflexión, al igual que el bienestar de todo lo que depende de ellos. Es por ello que este Día Mundial de los Océanos debe servir como una oportunidad de aumentar la conciencia mundial sobre los beneficios que obtenemos de los océanos, así como nuestro deber individual y colectivo de utilizar sus recursos de manera sostenible.

Bibliografía:

[1] https://www.oecd.org/acerca/.

[2] Global Plastics Outlook: Policy Scenarios to 2060. OECD 2022.

[3] Global Plastics Outlook. Economic Drivers, Environmental Impacts and Pollicy Options. OECD, 2022, 1-201.

[4] https://news.un.org/es/story/2017/12/1423492.

Compartir:

Deja un comentario