1.- ¿Cual es la naturaleza y los aspectos distintivos de la invención que ha patentado?

Se trata de una estructura en Y que soporta un generador sumergido, similar a los aerogeneradores, para el aprovechamiento de la energía de las corrientes marinas. Consta de un domo central, donde está el generador eléctrico, en cuyo extremo se sitúa la hélice que absorbe la energía. Del domo salen tres brazos, en cuyos extremos se colocan sendos flotadores con forma de torpedo.

Con respecto a otros generadores existentes o en desarrollo, se distingue porque es un conjunto que flota a la profundidad que se desee, con lo que es más flexible y fiable en operación y menos costosos los procesos de instalación y mantenimiento.
Imagen virtual del generador submarino

2.- ¿Qué soluciones aporta y en que campos o sectores se puede aplicar?

En estos momentos, que resulta fundamental el desarrollo de las energías renovables, este diseño permitirá reducir los costes del ciclo de vida de este tipo de generadores y acceder a emplazamientos más profundos. Los generadores existentes están limitados a zonas que no sobrepasen los 50 m, con lo que sólo pueden acceder al 20% del potencial energético de las corrientes marinas.

Además, se ha simplificado mucho la maniobra de salida del generador a la superficie, que es imprescindible para realizar el mantenimiento. Otros generadores necesitan complejos sistemas mecánicos para realizar esta operación, o el auxilio de una embarcación especial.

El diseño del generador patentado, incluye un sistema de control de lastres que permite que el generador, por si solo y de forma automática, realice la maniobra de paso de vertical sumergido en operación, a flotando en horizontal para mantenimiento o transporte.

3.- ¿Ha recurrido a servicios profesionales para llevar a cabo la protección de su invención?

Sí, en concreto he contado con la OTRI de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), cuya ayuda ha sido muy importante para concretar la idea primitiva en una propuesta con mayor protección industrial, además de encargarse de los aspectos administrativos.

Para la extensión internacional de la patente, la UPM ha suscrito un convenio con las fundaciones SOERMAR e INNOVAMAR y la OTRI se está apoyando en una agencia de propiedad industrial.

4.- ¿Que valor adicional considera que ha obtenido con la patente?

Institucionalmente, asegurar que la UPM esté presente, en la medida de sus posibilidades, dentro de las distintas fases del proceso de I+D+i hasta la explotación comercial de la innovación. La experiencia en desarrollos similares, indica que este proceso puede durar hasta una década.

Maqueta del Generador GESMEY en pruebas en el LEEyS de la ETSI Navales de la UPM

Personalmente, facilitarme la creación de un grupo de I+D dentro de la UPM, con el que estamos trabajando con la Fundación Centro Tecnológico SOERMAR en el diseño funcional de un generador (que denominamos GESMEY), adaptado a las condiciones del Estrecho de Gibraltar, gracias a la ayuda del Ministerio de Ciencia e Innovación dentro de un Proyecto de Investigación Industrial.

Quiero destacar que en este proceso ha sido fundamental el trabajo realizado por el profesor Núñez Rivas, compañero de la ETSI. Navales, que me está permitiendo centrarme en desarrollo tecnológico del proyecto.

5.- Desde su perspectiva como investigador de un centro público de investigación, ¿qué medidas (normativa, apoyo y asistencia, ayuda económica) considera necesarias para fomentar la protección de los resultados de la investigación y su comercialización?

En mi experiencia para los primeros pasos la estructura de apoyo de la UPM es suficiente, pero la complejidad del proceso de protección internacional necesitaría de un mayor apoyo. Nosotros lo hemos solucionado, de momento, gracias al convenio con las fundaciones citadas.

En un caso como éste, antes de pasar a la fase de comercialización es necesario un complejo proceso de I+D+i, para el que esperamos contar con la ayuda de las distintas administraciones.

6.- ¿Desde donde considera que deben de existir: en la institución donde se trabaja, en la Administración Pública correspondiente.?

Para la primera fase de protección (patente nacional) considero que el modelo de la UPM es bueno, pero que la Comunidad de Madrid podría apoyar el proceso para la extensión internacional. Por ejemplo, se me ocurre que los premios madri+d fuesen acompañados de ayudas para este proceso.

7.- Su patente está dentro del ámbito marino y la Comunidad de Madrid no tiene costa. ¿Esta situación ha supuesto alguna dificultad adicional?

Aunque nuestra Comunidad no tiene mar, en ella, además de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Navales del la UPM, están los principales centros de I+D del sector marítimo a nivel nacional, tanto públicos como privados. Por ello, se respira un "ambiente marino" que permite una colaboración bastante eficaz entre empresas, OPIS y Administración.

En otras Comunidades Autónomas existen líneas de ayuda específicas para energías renovables marinas, cosa que no ocurre con la nuestra. Por ejemplo, en la ORDEN 679/2009, en el área de energía se contemplan sólo las siguientes renovables: aerogeneradores, energía solar térmica y fotovoltaica, cultivos agroenergéticos. Es indudable que aparte del interés energético de los desarrollos (con posibles plantas en nuestra región), está el industrial (para fabricar sus equipos y sistemas) y el tecnológico (para diseñarlos y validarlos).

En nuestro caso necesitamos formar consorcios que incluyan entidades de otras comunidades como astilleros y operadores marítimos y, en fases sucesivas, de otros países europeos, con objeto de internacionalizar el desarrollo, acceder a un abanico más grande de fuentes de financiación y abrir el mercado para otras localizaciones en las que el potencial energético es mayor aún que el del Estrecho de Gibraltar.

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