1.- Los proyectos de la Agencia Espacial Europea, como su sistema de navegación por satélite Galileo, el programa Copernicus o el programa científico, están cosechando muchos éxitos, ¿cuál es el papel de España en estos proyectos?

Nuestro país participa en mayor o menor medida en prácticamente todos los programas de la Agencia Espacial Europea y tanto la comunidad científica como la industria espacial española juegan un papel cada vez mayor en nuestras misiones.

En el programa científico, por ejemplo, que forma parte de las actividades obligatorias de la Agencia, la contribución de España está por encima del 8%, siendo el quinto contribuyente de Europa. En el sector de aplicaciones, tanto en navegación por satélite como en observación de la tierra, nuestro país cuenta con industrias clave, que en muchos casos lideran sistemas o subsistemas completos.

2.- ¿Qué destacaría de las actividades de la ESA en España y, en particular, en la Comunidad de Madrid?

Lo primero sería recordar que España es uno de los diez países fundadores de la Agencia Espacial Europea y que actualmente es la quinta potencia europea en el sector. Mucha gente no es consciente de ello. Es importante indicar también que nuestro país es sede del Centro Europeo de Astronomía Espacial (ESAC), uno de los cinco centros principales de la Agencia Espacial Europea (ESA) y que está en Villanueva de la Cañada, en la Comunidad de Madrid. ESAC es el centro científico de la ESA, desde donde se coordinan las operaciones científicas de todas las misiones de astrofísica y de exploración del Sistema Solar de la ESA. En ESAC trabajan actualmente unas trescientas cincuenta personas y participa en las operaciones científicas de unas veinticinco misiones. En España está también una de las tres estaciones de espacio profundo de la ESA, la estación de Cebreros, en la provincia de Ávila, que es una de las estaciones terrenas más modernas del mundo. Dentro de la red de estaciones de la ESA, ESTRACK, de la que hemos celebrado recientemente el cuarenta aniversario de su inicio, España acoge también las estaciones terrenas de Villafranca y de Maspalomas, en colaboración con el INTA.

Además, disponemos de varios laboratorios asociados a la ESA en nuestro país, como el laboratorio MeliSSA que desarrolla tecnologías necesarias para el soporte de vida para futuras misiones espaciales, en colaboración con la Universidad Autónoma de Barcelona; el centro E-USOC de investigación en microgravedad, en la Comunidad de Madrid, asociado a la Universidad Politécnica de Madrid; y el Laboratorio de Radiofrecuencia de Alta Potencia en Valencia, asociado a la Universidad Politécnica de Valencia y a la Universidad de Valencia. Por último, en España tenemos dos centros de incubadoras de empresas basados en tecnología espacial, los ESA BIC de Barcelona y de la Comunidad de Madrid. Todas estas instalaciones confirman a nuestro país como uno de los socios principales de la Agencia Espacial Europea.

La Comunidad de Madrid es una de las regiones espaciales más importantes de Europa. La facturación del sector espacial en la Comunidad de Madrid es del orden del 90% de la facturación total en España, con un porcentaje muy similar en cuanto a puestos de trabajo directamente en el sector. La Comunidad de Madrid es, además, la única región de Europa que acoge un centro de la ESA, un centro de la NASA y un centro de satélites de la Unión Europea, además de ser la sede del tercer operador de satélites de Europa, Hispasat.

3.- Las actividades en el ámbito espacial de la ESA son muy conocidas, sin embargo hay una faceta menos popular, que es la que lidera la Oficina de Transferencia Tecnológica de la Agencia, ¿cuáles son sus objetivos?

En efecto, la ESA tiene una oficina dedicada exclusivamente a la transferencia tecnológica del sector espacial a otros sectores. Su principal misión es facilitar el uso de la tecnología espacial, sistemas y aplicaciones para su uso en aplicaciones no espaciales. Hasta la fecha se han transferido cerca de trescientas tecnologías en aplicaciones no espaciales en prácticamente todos los sectores de la economía.

La Oficina de Transferencia de Tecnología gestiona también los centros BIC, las incubadoras de empresas de la Agencia Espacial Europea, un total de once actualmente en Europa, entre ellos el BIC Comunidad de Madrid abierto este año 2015.

4.- En efecto, una de las herramientas de esta Oficina son los ESA BICs (Business Incubator Centers). Por favor, explíquenos qué son y cuál es su función.

Los ESA BIC son centros de incubación de empresas cuyo objetivo es facilitar la creación de empresas que basen su negocio en el uso de sistemas o tecnologías espaciales para aplicaciones terrestres, no espaciales.

Los ESA BICs están cofinanciado al 50% por la ESA y por una institución local o regional. Las compañías que resulten seleccionadas para formar parte de una ESA BIC disfrutan de incentivos tanto económicos como de soporte técnico y de negocio.

Actualmente hay una red formada por once centros distribuidos en diferentes países europeos, que acogen actualmente unas cien empresas al año. En España tenemos los BIC de Barcelona y de la Comunidad de Madrid.

5.- ¿Cómo valora la ESA los resultados arrojados por esta iniciativa desde que se puso en marcha?

Los resultados son altamente positivos. Hasta la fecha se han creado más de trescientas start-ups en Europa gracias a este programa y se han generado más de mil puestos de trabajo de alta base tecnológica. Actualmente el programa da apoyo a más de cien empresas al año en Europa, desarrollando productos o servicios basados en el uso de tecnologías espaciales en todos los sectores de la economía. Los países miembros de la ESA están muy satisfechos de los resultados de esta iniciativa. Prueba de ellos es el alto número de peticiones que recibimos en la ESA, solicitando la creación de nuevos BICs en Europa.

6.- ¿Qué papel juegan las empresas españolas en el sector espacial?

La industria espacial española es una industria consolidada, con muchos años de experiencia en el sector y una reputación excelente a nivel europeo. Nuestro país cuenta en estos momentos con industrias capaces de liderar como contratista principal un programa completo de la ESA, con industrias que pueden realizar un satélite completo, además de cubrir todos los sectores de valor del sector espacial: el segmento terreno, fabricación de satélites, cargas de pago, instrumentación avanzada, lanzadores, operaciones, etc.

7.- ¿España tiene potencial para crear start-ups que utilicen tecnologías del espacio? ¿Y la Comunidad de Madrid?

No tengo ninguna duda de ello, yo creo que nuestro país reúne todos los ingredientes para ello. Prueba clara de ello es el gran éxito del ESA BIC de Barcelona que lleva casi dos años en funcionamiento y está siendo un ejemplo de éxito para toda Europa.

Mi análisis es el siguiente. En primer lugar, nuestro país cuenta con industrias altamente competitivas en el sector espacial que trabajan además, en muchos casos, en otros sectores de la economía y pueden facilitar mucho esa transferencia. En segundo lugar, la tecnología espacial se puede aplicar prácticamente en todos los sectores de la economía, destacando su aplicación en ámbitos como el turismo, la energía, la agricultura, el sector del automóvil, el transporte, el medio ambiente, los servicios en las ciudades, etc. En muchos de estos sectores nuestro país es experto y altamente competitivo; el incluir en ellos la tecnología espacial puede permitir mejorar procesos y crear muchas nuevas empresas.

En nuestro país hay además buenos ingenieros y tecnólogos, con muchas ganas de trabajar y en busca de nuevas oportunidades que muchas veces no encuentran. El país dispone además de las mejores escuelas de negocios del mundo y un sector financiero de importancia mundial. A eso hay que añadir un país en el que por nuestro carácter las relaciones profesionales se pueden realizar con facilidad y con un clima envidiable, que podría atraer a los mejores talentos si se consigue que las oportunidades se generen. España es un país exportador con los canales adecuados ya establecidos para vender en el exterior y con la gran ventaja de la importancia mundial de nuestra lengua.

En el caso del BIC de la Comunidad de Madrid se dan todas esas circunstancias de una forma rotunda. La oportunidad, en mi opinión, es inmejorable.