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"Empezar algo nuevo y con un grupo propio especializado determinó mi incorporación a IMDEA"

Alberto Dávalos

Jefe de Grupo del Laboratorio de Patologías del Metabolismo Lipídico y Nutrición Molecular. Instituto IMDEA Alimentación
 

25/11/2015

1.- Para empezar esta entrevista, nos gustaría conocer cómo nació su vocación científica ¿Cuándo y por qué decidió que quería ser científico?

Sobre los 10 años de edad empecé a estudiar inglés en el Instituto British Council de Lima (Perú), donde tuve la oportunidad de acceder a todas las obras de su biblioteca. Me encantaba leer a Shakespeare, claro que en versión adaptada para niños y con muchos dibujos. Tras un par de años 'devorando' todo lo que se movía por allí, encontré una sección de revistas entre las que llamaron especialmente mi atención tres: Nature, Science y New Scientist. Al principio fue ésta última publicación la más accesible por su carácter divulgativo y lógicamente Nature la que más se me "resistía". De hecho hay artículos que ni siquiera hoy día puedo entender bien.

Este contacto temprano con los avances de la ciencia despertó mi fascinación por ella. Conocer las cosas, en este caso haberlas leído, por lo menos 10 años antes de que fueran noticia era lo que más me gustaba. En aquel entonces me atraía mucho la bioquímica, la biotecnología y la astronomía e influido por mi contacto con el British Council, hacer mi carrera y el doctorado en la Universidad de Cambridge o de Oxford era mi sueño.

2.- ¿Cuál es su formación y trayectoria como investigador? ¿A qué instituciones ha estado vinculado hasta ahora?

La escasez de becas para ir a Cambridge u Oxford hizo que estudiase Farmacia y Bioquímica en Lima. Ya desde el segundo año de carrera empecé a colaborar en la Universidad de San Marcos (Lima) como 'asistente de cátedra', es decir, colaboraba preparando las clases y en algunas ocasiones impartía las clases prácticas a estudiantes de cursos inferiores. También durante la carrera colaboré en un centro de investigación de biotecnología durante dos años y en los últimos años en un centro de investigación de inocuidad alimentaria.

Empecé el doctorado en 2001, en la Universidad Complutense de Madrid. La tesis doctoral la realicé en el Instituto de Fermentaciones Industriales del CSIC en Madrid, donde estudié la actividad antioxidante y la biodisponibilidad de los polifenoles de la dieta. Tras defender la tesis en 2005, empecé mi primer postdoctoral en el Servicio de Bioquímica-Investigación del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid. Allí estudié el metabolismo del colesterol y las lipoproteínas en la enfermedad cardiovascular. En 2008 empecé un segundo postdoctoral en la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale (New Haven, EE.UU.), donde estudié el endotelio vascular y la arteriosclerosis. Para mi tercer postdoctoral, en 2009, me incorporé a la Universidad de Nueva York (Nueva York, EE.UU.). Allí investigué el papel de los microARNs y el metabolismo del colesterol en la enfermedad cardiovascular.

3.- ¿En que circunstancias surgió la posibilidad de venir a trabajar a Madrid?

Durante mi estancia en Estados Unidos había oído hablar del programa IMDEA de la Comunidad de Madrid. En 2010 IMDEA Alimentación me ofreció la posibilidad de formar parte del Instituto a través del programa Amarout. En la Universidad de Nueva York estaba trabajando en un grupo de investigación nuevo, la ciencia que hacíamos me fascinaba y podía haberme quedado allí durante un tiempo más. Sin embargo, tras una entrevista con el Director Científico de IMDEA Alimentación decidí incorporarme y regresar a Madrid.

4.- ¿Qué es lo que más le ha interesado del proyecto IMDEA y qué determinó su incorporación?

La posibilidad de empezar un nuevo grupo de investigación, haciendo ciencia de frontera y en un área del conocimiento donde mi experiencia e investigaciones previas podían resultar muy relevantes fue lo que más me interesó del proyecto IMDEA. Empezar algo nuevo y con un grupo propio especializado determinó mi incorporación. Además, otros factores, como los familiares, influyeron en mi decisión de regresar a Madrid e incorporarme a IMDEA Alimentación.

5.- ¿En qué líneas de investigación va a trabajar y qué resultados concretos espera alcanzar?

Nuestro grupo de investigación se centra en dos aspectos que van íntimamente ligados. Uno de biología fundamental (ciencia de frontera) que se dedica a buscar y caracterizar nuevos ARNs no codificantes de proteínas (ncRNAs) que regulan el metabolismo lipídico en condiciones fisiológicas y patológicas, principalmente ligados a las enfermedades cardiovasculares. Y otro que es básicamente aplicado, donde buscamos terapias farmacológicas y/o dietéticas para modular la expresión de dichos nuevos ncRNAs a fin de prevenir o tratar la enfermedad cardiovascular asociado al metabolismo lipídico o la dislipidemia.

Prendemos encontrar nuevos ncRNAs que puedan ser susceptibles de ser modulados farmacológicamente y/o a través de la dieta y que pueda abrir nuevas dianas terapéuticas reales para combatir nuestras enfermedades modernas asociados a nuestros excesos alimenticios.

6.- ¿Qué es lo que más le gusta de Madrid?

Como realice la tesis doctoral en Madrid, la conozco bien desde entonces. Una de las cosas que me gusta es que es una ciudad tranquila para vivir. Existen muchas ofertas de todo tipo de ocio y al estar en el centro de la península hace que sea más fácil moverse por España, además de estar bien comunicada con todas las ciudades europeas. Aún en épocas de crisis, la Comunidad de Madrid invierte en I+D+I más que otras comunidades españolas.



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