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"En la ciencia, como en el deporte, lo importante es saber recomponerse, levantarse y volver a intentarlo"

Mario Martín

Investigador del Instituto IMDEA Energía
 

28/09/2016

La Noche Europea de los Investigadors de MAdrid 2016

Un año más se acerca La Noche Europea de los Investigadores de Madrid. Y un año más, los investigadores de los Institutos IMDEA quieren aportar su granito de arena a este proyecto europeo (encuadrado en el Programa Horizonte 2020) que persigue que la sociedad conozca mejor a los investigadores que trabajan en la Unión Europea, no sólo su trabajo, sino también su lado más personal. Uno de estos investigadores, Mario Martín, del Instituto IMDEA Energía, ha aceptado responder a unas preguntas poco convencionales dentro del mundo de la ciencia, en el que este joven investigador se mueve como pez en el agua.

1.- La primera pregunta no podía ser otra ¿qué le ha llevado a participar en La Noche Europea de los Investigadores de Madrid 2016?

Es una pregunta totalmente obligada. El asistir a la Noche Europea de los investigadores de Madrid 2016 se encuentra asociado al propio ejercicio de los investigadores de IMDEA Energía, ya que uno de los principales objetivos de nuestro trabajo es difundir nuestros resultados y hallazgos a la sociedad. Además, qué mejor manera de hacerlo que trasmitiendo nuestra actividad a los más pequeños e intentándoles concienciar de la importancia de la investigación y, en mi caso, de la implantación de sistemas energéticos más sostenibles.

2.- La segunda, también es obligada ¿qué deporte o deportes practica? ¿Y cuáles le gustan como espectador?

La verdad, estoy enganchado a bastantes deportes: es una manera muy sana de desconectar de días intensos de trabajo. Actualmente, estoy muy enfocando en el crossfit, correr, o hacer running, como se dice ahora, y la natación. Aunque también me encanta practicar deportes colectivos como el baloncesto o el fútbol. En cuanto a espectador, soy muy fan del futbol, aunque me divierto más viendo el baloncesto.

3.- ¿Se parece en algo la carrera científica a la deportiva? ¿Qué características destacaría en la personalidad de los investigadores que conoce? ¿Las comparten con los deportistas profesionales?

Creo que la carrera deportiva se parece mucho a la del investigador. En ambos casos se parte desde cero y se necesitan mucha constancia y paciencia para obtener resultados e ir ganando capacidades. Además, en ambas, muchas veces te caes y fracasas pero, a pesar de ello, son profesiones muy satisfactorias que logran llenarte. Respecto a la segunda pregunta, destacaría la capacidad de análisis y la constancia. Todo el mundo asocia la imagen del investigador con el típico "cerebrito", pero hay muchos investigadores que a pesar de no ser 'Einstein', gracias a su constancia y fuerza de voluntad llegan a ser mentes brillantes. Creo que constancia y fuerza de voluntad son dos de las principales características que compartimos investigadores y deportistas profesionales.

4.- La especial capacidad de análisis que suele tener un investigador, ¿la aplica sólo en su trabajo o la extiende a otros aspectos de su vida? ¿Al deporte?

En mi caso, la capacidad de análisis que he ido desarrollando durante los años que llevo haciendo la tesis no queda aparcada una vez salgo de IMDEA y suelo aplicarla en otros contextos de mi vida. Uno de ellos es el deporte, ya que requiere organización, sobre todo a la hora de realizar la planificación de entrenamientos y objetivos que te propones (especialmente los que se hacen en Año Nuevo ¡ja ja!).

Mario Martín
Mario Martín

5.- ¿Qué 'aparato tecnológico' se llevaría a una isla desierta? ¿Y si pudiesen ser tres?

No sé si esta respuesta valdrá como válida, pero creo que si me fuera a una isla desierta, por voluntad propia, no me llevaría ningún tipo de aparato tecnológico ya que me iría para desconectar del mundo vertiginoso que nos está tocando vivir. En todo caso me llevaría a mi novia, familia y amigos, ya que solo sé que no podría vivir.

6.- Siguiendo con preguntas tópicas ¿con qué investigador o investigadores le gustaría compartir unas cervezas o una cena? ¿Y con qué deportista?

A parte de con los investigadores de IMDEA Energía, con los que suelo compartir alguna, me gustaría tener un rato de charla con Stephen Hawking. Sé que no entendería casi nada de los temas que habláramos pero, además del campo energético, me atrae mucho la Astronomía. Respecto a deportistas, me encantaría tomarme una cerveza con Francisco Javier Gómez Noya, triatleta español (campeón del mundo y Europa) que no ha tenido el reconocimiento mediático que se merece habiendo logrado algo increíble, del que estoy seguro que aprendería muchísimo.

7.- Y como no hay dos sin tres, de no ser investigador le hubiera gustado ser...

Cocinero. Siempre que tengo un hueco me gusta experimentar y perderme entre fogones. Aunque el mundo se lleva un mejor investigador que lo que hubiera sido de cocinero... ¡ja ja ja! (no soy ningún masterchef).

8.- Y ya para terminar ¿qué es lo mejor y lo peor de ser investigador? ¿Y deportista?

Mejor empezar con la peor para dejar buen sabor de boca al final. Tanto para un investigador como para un deportista, creo que es la frustración de no obtener el resultado que te habías marcado como objetivo. Muchas veces las cosas no salen como uno querría, ya sea en un análisis o en un ejercicio deportivo. Lo importante es saber recomponerse, levantarse y volver a intentarlo. Y para mí lo mejor de ser investigador es que es una profesión en la que cada día aprendes algo nuevo (se disfruta más si eres una persona curiosa) y en la que, por normal general, no se suele caer en la rutina. En el caso del deporte, la verdad no sabría decir que es lo mejor, simplemente es algo que te llena y te engancha, sobre todo si lo practicas con amigos.



Esta actividad forma parte de la Noche Europea de los Investigadores Madrid 2016, un evento promovido por la Fundación para el Conocimiento madri+d (Consejería de Educación, Juventud y Deporte de la Comunidad de Madrid). Este proyecto, que tiene lugar simultáneamente en más de 250 ciudades europeas desde 2005, está financiado por la Unión Europea dentro del Programa de Investigación e Innovación Horizonte 2020 -acciones Marie Sklodowska-Curie-, bajo el acuerdo de subvención número 721631.



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