PATRIMONIO  LUGARES DEL SABER  Facultad de Farmacia: historia
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 Historia 

 

El germen que propició la modernización de los estudios de Farmacia en nuestro país tuvo lugar durante el último tercio del siglo XVIII, con el paso de un modelo de administración farmacéutica de tipo gremial a un modelo absolutista, con la consiguiente pérdida de poder por parte del colectivo farmacéutico en favor de una serie de organismos administrativos -como el Protomedicato o el Real Junta Superior Gubernativa de Farmacia-; estos cambios acabarían estimulando y enriqueciendo los contenidos científicos de esta disciplina -sobre todo botánicos y químicos-, hasta entonces un simple oficio de artesanos.

Los antecedentes de la actual Facultad de Farmacia de Madrid se retrotraen a principios del siglo XIX, cuando se ordena la creación de un Colegio de Farmacia en Madrid que sirviera como modelo a todos los que, con posterioridad, se fuesen estableciendo en distintas partes de España; en él debería haber dos Catedráticos y dos ayudantes, que se ocuparían de las materias "Historia Natural", "Química" y "Farmacia Práctica".



OBRA DE JOSÉ RODRÍGUEZ CARRACIDO, 1900



Tras una breve actividad durante los años que precedieron a la Guerra de la Independencia, tanto el Colegio de San Fernando de Madrid como los que se establecieron en Barcelona, Sevilla y Santiago, comenzaron definitivamente su andadura en 1815; sus actividades volverían a ser suspendidas durante el Trienio Liberal, para ser retomadas -sólo en los Colegios de Madrid y Barcelona- una vez reimplantado el Absolutismo.

La primera sede que tuvo el Colegio de Farmacia de San Fernando estuvo ubicada en la calle del Barco; allí permaneció hasta 1830, en que se produce su traslado al número 11 de la calle de San Juan, actualmente de la Farmacia.



LABORATORIO DE FARMACIA PRACTICA (1845)



Este edificio fue construido, de manera expresa, para albergar este Colegio y, tanto el solar -procedente del derribo de tres casas- como las obras, fueron sufragados por el propio colectivo farmacéutico, en gran parte debido al interés mostrado por el Presidente de la Junta Superior Gubernativa de Farmacia, Agustín José de Mestre, quien solicitó, mediante carta circular, ayuda económica a todos los farmacéuticos para levantar este edificio.

Entre las instalaciones de este Colegio, existía un jardín botánico, un laboratorio para la enseñanza de la Química, con aparatos y materiales procedentes de los clausurados Colegios de Sevilla y Santiago y del antiguo Laboratorio de Química de la calle del Turco, que dirigiera Louis Proust, y una biblioteca compuesta por 1.750 libros, herencia de la ciencia ilustrada.

Continuación


   

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