Mañana día 25 se celebra el ‘Día de Internet’ en España

Viendo las noticias y escuchando la radio me he encontrado con que el próximo día 25 se celebra el día de Internet en España. En ese momento me empecé a preguntar «¿Por qué un día de Internet?» Como todo buen bioinformático debe saber, la Bioinformática actual (al igual que muchas otras disciplinas) no estaría en el lugar en el que se encuentra sin la existencia de la red de redes. Es el momento de hacer memoria…

Cuando comencé en 1999 a trabajar en el mundillo de la Bioinformática y la Biología Computacional, casi toda la gente que tenía acceso a Internet trabajaba en el sector académico/universitario (o una gran multinacional) y una minoría lo hacía desde casa con un cutre-módem de 33.6Kbps. Google apenas era conocido, al igual que la Bioinformática. En aquella época, la base de datos SWISSPROT todavía se distribuía en CD-ROM, al igual que los primeros genomas secuenciados (como por ejemplo, el de levadura), el genoma humano no había terminado de secuenciarse, y un disco duro de 9GB era gigantesco. En mi caso, como casi todo hijo de vecino, empecé a tener acceso a Internet (muy restringido, todo hay que decirlo) cuando estaba escribiendo mi proyecto fin de carrera en la UMA, y no empecé a tener una idea clara de lo que era Internet hasta que empecé a buscar trabajo. En ese momento empezó a popularizarse lo de tener una cuenta de correo electrónico (¡y también el SPAM!), y Microsoft no se veía amenazado por Linux y los programas de código abierto. La gente no se imaginaba la importancia que iban a adquirir las siglas UMTS o ADSL, ni que habría una burbuja especulativa alrededor de las empresas .COM.

Hoy en día no podríamos trabajar, investigar, progresar, etc… sin mantener actualizadas nuestras bases de datos semanalmente, sin consultar en línea el último artículo de Nature, Science o Bioinformatics; sin mantener el contacto con nuestros colaboradores o amigos en otros países, sin acceder a los servicios web bioinformáticos que proporcionan EBI, NCBI o cualquier otro centro, etc… En definitiva, el mundo actual sería muy distinto sin la existencia de Internet. La llegada de la red al público en general ha proporcionado medios impensables de acceder al conocimiento, de aprender, de comunicarse, y en definitiva, de innovar y de intercambiar ideas. Grandes proyectos colaborativos bioinformáticos, como ArrayExpress, Ensembl, BioMOBY, PlaNet, etc… que funcionan gracias a que hay Internet, y a que va más rápida que hace unos años, no serían una realidad sin el crecimiento y mejora de la red de redes.

Por tanto, ¿ésta revolución provocada por Internet se merece un día? Desde mi punto de vista, sí. Pero hay que tener en cuenta que todavía queda mucho camino por recorrer hasta que todas las personas puedan usar esta maravillosa tecnología, y sobre todo la entiendan y la use en todo su potencial. Es necesario que la conexión a Internet desde casa tenga un precio popular, que haya ordenadores más baratos (o subvencionados), que haya formación para adultos para evitar que se conviertan en «analfabetos tecnológicos», y sobre todo, que la gente aprenda a usar de forma ética y mesurada Internet (¡que ya hay gente que siente pánico por no poder chatear un día o una hora!). En esta época de «Grandes Hermanos» y «Salsas Rosas» en que la educación y la ética están de capa caída, es necesario asumir que Internet es como la energía nuclear o un cuchillo: se puede usar con buenos o malos propósitos, pero nosotros decidimos qué uso darle, y cómo educar a nuestros hijos al respecto. Pero está claro no podemos, y no debemos, ignorarla.

En cualquier caso ¡Feliz Día de Internet a tod@s!

(Más fuentes:

)

Compartir:

3 comentarios

  1. Brave new Internet world!!

    La Revolución de Internet ha sido sencillamente el mayor cambio experimentado por el ser humano en toda su historia.

    Quiza esto suene rotundo, lo reconozco. Pero mi seguridad en ello es plena y no hay más que leer el artículo de este blog para ello.

    A lo largo del mismo se nos muestra, en cierto modo y muy emotivamente, una respuesta fidedigna y poco nostálgica a la pregunta ¿Como éramos antes de Internet?

    Cuando se recuerda algo sin nostalgia, sin el deseeo de volver a esa época, es porque ese algo no nos proporcionaba nada interesante comparado con el ahora. Esto es lo que uno siente al pensar en BBSs, modems a los que "enchufar" aquellos viejos teléfonso analógicos con forma de plátano… Un desastre aunque necesario, era todo aquello. Como una novia de la que no quieres a acordarte pues si lo haces te da utricaria por todo el cuerpo solo de pensarlo. Incomodidad es el sentimiento que inunda nuestros ciber-recuerdos preInternet.

    Ahora voy en el autobus leyendo una revista (no todo va a ser Internet) y se que luego en casa profundizaré más en aquellas noticias, publicidad o artículos que más me interesan, usando la red de redes y sus infintas posibilidades. Puedo enterarme de lo que quiera como quiera y cuando quiera y compartir mis opiniones. Eso es libertad y no nada de lo que los gobiernos nos han ofrecido durante la evolución de la civilización, me digo orgulloso de ser científico.

    Mientras tanto, una joven apenas mayor de edad usa su movil (otra gran revolución, que al fin y al cabo es una red) para decirle a su novio que no se enrolle más, que luego terminan de hablar "por el messenger". ¿Se enamorarían por la red? Seguramente. Hoy por hoy los humanos mantenemos relaciones intimas utilizando la red de redes más que cualquier otro sistema de "apareamiento" natural o supuestamente natural.

    Cuando este tipo de cosas ocurren, ya no estamos hablando de computación distribuida, ni de parafernalias tecnológicas varias con mero interés académico. Estamos hablando de nuestra vida diaria, nuestra evolución social e incluso de selección natural darwiniana. ¿Cuanto tiempo seguiremos siendo Homo Sapiens Sapiens? Quizá la necesidad de adaptación de los seres humanos a un cambio tan grande en el entorno (habitat) que podemos considerar biológicamente sin precedentes nos conduzca a algo inesperado. Un nuevo hombre.

    Este pensamiento no es descabellado.

    Nuestra vida ha cambiado. Más que con el descubrimiento de América o con la máquina de vapor. Internet no solo esta para quedarse. Ha venido para liberarnos de nuestras ataduras. Esperemos que las autoridades sepan cuidar este nuevo entorno de creación, evolución y comunicación.

    Felicidades por el artículo, me ha encantado leerlo e inspirado para este comentario.

Deja un comentario