El siglo XXI empieza con un hito, el que
supone la descripción completa del material genético
humano, el libro de instrucciones para hacer un ser humano, una
hazaña comparada muchas veces con el ascenso al Everest.
Dicen que el siglo XXI será el siglo de la biología,
como el siglo XX fue el de la física.Como todos los hitos,
su carácter simbólico supera el acontecimiento en
sí, y el desciframiento del genoma humano representa la culminación
simbólica del explosivo desarrollo, en la segunda mitad del
siglo XX, de la biología molecular, a partir del momento
en que Francis Crick y James Watson dilucidaron la estructura en
doble hélice del ácido desoxirribonucleico (ADN) que
forma los genes en todas y cada una de las células de un
ser vivo. Las aplicaciones de tal descubrimiento básico tardaron
bastante en llegar, de la mano de nuevas técnicas que permitieron
acceder al interior de la célula y manipular su material
genético. Sigue