Ciencia y Cultura


Escritores, mecenas y bibliófilos en la época del Conde-Duque de Olivares


La visualización de las estrechas relaciones entre el poder y el saber



Una exposición que pretende visualizar, a través de las colecciones de la Fundación Lázaro Galdiano, los temas fundamentales que abordó el Congreso Poder y Saber: Bibliotecas y bibliofilia en la época del Conde Duque de Olivares (24 al 26 de septiembre), organizado por la University of Nottingham, la Fundación, y la Red "Solo Madrid es Corte" proyecto de investigación I+D en Humanidades y Derecho (Referencia: P-2007/HUM-0425) de la Comunidad de Madrid, representada en esta ocasión por la Profª. Drª. Jesusa Vega, directora de la Fundación, y miembro fundador del Instituto Universitario "La Corte en Europa" de la Universidad Autónoma de Madrid.

Retrato de Francisco de Quevedo y VillegasLa exposición, que incluye retratos de los literatos más ilustres del entorno de Felipe IV, abordando su labor de mecenazgo, y las bibliotecas de bibliófilos notables de su tiempo, como Gaspar de Guzmán y Pimentel, III conde de Olivares, I duque de Sanlúcar la Mayor, conocido como el Conde-Duque de Olivares, quien mantuvo estrecha relación con destacados artistas, entre ellos Velázquez, y escritores, como Góngora, Quevedo o Lope de Vega, consciente de cómo el poder político podía servirse para su propaganda de las imágenes y de los textos para reforzar sus pretensiones de grandeza y defender su integridad a ultranza.

La formación humanística del Conde-Duque se forjó en Italia, donde pasó su niñez, y después en Salamanca, etapa que se prolongó de 1600 a 1604 y que dejó en él profundas huellas despertándo su afición a los libros y al estudio, y proporcionándole una sólida educación universitaria, revelándo su inclinación a las tertulias eruditas. Durante su estancia en Sevilla, desde 1607 a 1615, por ejemplo, siendo ya conde de Olivares, acrecentó su colección de libros con los heredados de su padre, iniciándo su labor de mecenazgo con literatos, y contribuyéndo al fomento de la actividad cultural en la capital hispalense donde había academias tan notables como la de Francisco Pacheco. Más tarde, Olivares cambió las placenteras veladas sevillanas Retrato de Luis Góngora y Argotepor la agitada vida cortesana y palaciega al ser nombrado en 1615 gentilhombre del príncipe Felipe, primer paso, bien meditado, para alcanzar la privanza en 1623, aunque no abandonó su labor de mecenas y su pasión por los libros, aspectos que pone de relieve esta muestra.

El conjunto de obras expuestas reúne impresos y manuscritos, entre ellos el afamado Libro de Retratos de Pacheco, suegro de Velázquez, y el retrato de Góngora. Este último se muestra nuevamente tras la restauración que se ha llevado a cabo en el Instituto del Patrimonio Histórico Andaluz y que ha desvelado la excelente calidad de la pintura y su extrema proximidad a la mano del maestro.

El Conde-Duque mecenas

El árbol de la ciencia de Raimundo LulioOlivares fue protector de las artes y las letras, por este motivo los artistas y literatos buscaron con frecuencia su mecenazgo a través de dedicatorias, escritos de alabanza y retratos laudatorios. En esta tarea se significó desde que costeó la edición de las Poesías de Fernando de Herrera, publicada por Francisco Pacheco y prologada por Francisco de Rioja. En la Fundación Lázaro Galdiano se conservan diversos impresos que proporcionan datos de interés sobre el oferente, el homenajeado y sus relaciones mutuas, como por ejemplo: Los nombres y atributos de la impecable siempre Virgen María (1624) del poeta precursor del conceptismo, natural de Baeza, Alonso de Bonilla, que contiene la aprobación elogiosa de Lope de Vega, La Circe con otras Rimas y Prosas (1624) de Félix Lope de Vega, Política de Dios, Govierno de Christo (1630) de Francisco de Quevedo y Antigüedades y principado de la ilustríssima ciudad de Sevilla (1644) de Rodrigo Caro.

El Fernando o Sevilla restauradaLa exposición también incluye El Fernando o Sevilla restaurada (1632), del conde de la Roca, sui generis al utilizar el recurso de mostrar el retrato para alabar al Conde-Duque en la portada, siguiendo la práctica adulatoria al presentarle como Atlas desnudo «de interés» y como Hércules vestido «de valor», captatio benevolentiae que explica con esta leyenda: "Para sustentar mejor el grave peso que ves, la lealtad yace (o lector) desnuda aquí de interés, vestida allí de valor". Una obra realmente fascinante, entre otras de especial intéres, en esta esquisita muestra.




Susan Campos Fonseca
Universidad Autónoma de Madrid
Fuente: Fundación Lázaro Galdiano

Lugar: Museo Lázaro Galdiano c/ Serrano 122, 28006 Madrid.
Fecha: 24 de septiembre - 29 de noviembre de 2009
Horario: De 10 a 16:30 horas (Martes cerrado). Visitas guiadas sábados y domingos a las 11:30
Enlaces: Escritores, mecenas y bibliófilos en la época del Conde Duque de Olivares
Mas Información: Poder y Saber. Bibliotecas y bibliofilia en la época del Conde-Duque de Olivares