A iniciativa de la IUPAC (International Union of Pure and Applied Chemistry) y de la UNESCO se declara a 2011 como Año Internacional de la Química, bajo el lema "Chemistry: our Life, our Future" (Química: nuestra vida, nuestro futuro). Este año ha sido elegido por coincidir con el centenario de la concesión del Premio Nobel de Química a Marie Curie. Durante estos meses se están celebrando alrededor del mundo muchas actividades que conmemoran este Año Internacional de la Química. Una de estas múltiples actividades es la exposición "Las huellas de la Química, las huellas de Segovia" que organizan la Academia de Artillería e I E University dentro del convenio de colaboración entre ambas Instituciones. Esta exposición es un reflejo de cómo la química ha ido dejando su impronta en la sociedad segoviana.

Muestra un recorrido histórico, desde finales del siglo XVIII hasta la actualidad, identificando los científicos relevantes vinculados con la química y destacando sus principales hitos en la ciencia, así como su influencia en la sociedad y vida segoviana. En este recorrido podemos ver aparatos de laboratorio, fotografías, carteles, libros, etc. en definitiva, Química y Segovia.

Podemos afirmar que la interacción Segovia-Química empieza en 1764 con la inauguración del Real Colegio de Artillería en Segovia, institución que apoyó la investigación en Química desde el primer momento. Sin lugar a dudas, la presencia en Segovia de J. L. Proust, que estableció en esta ciudad "la ley de las proporciones definidas", uno de los pilares de la química, junto con sus discípulos contribuyó a que Segovia tuviera un gran patrimonio histórico científico.

Además de Proust, que en muchas ocasiones amalgama la reciprocidad entre química y Segovia, otros químicos han dejado en la ciudad sus aportaciones en la Ciencia Central. Por ejemplo, tan sólo un año después de que el suizo Schöenbein sintetizara el fulmicotón (algodón pólvora, piroxilina) como pólvora de guerra, el profesor de la Academia Claudio del Fraxno y su ayudante Joaquín de Bouligny xperimentaron en Segovia esta pólvora sin humo y de escaso residuo.

O más recientemente, el Coronel Antonio Blanco, llevó a cabo importantes investigaciones y patentes en relación con la fabricación del amonal y del material de protección contra la guerra química. La Química también ha estado presente en la sociedad segoviana a través de la industria. Varias empresas vinculadas a esta ciencia han elegido esta provincia para su instalación y desarrollo desde hace muchos años, como es el caso de la industria resinera, concentrada fundamentalmente en la Tierra de Pinares de esta provincia. En estos últimos años, la química también está presente en la enseñanza superior que se imparte en Segovia, concretamente en la titulación de Biología en IE University. En este grado, la química, como ciencia central y creativa, supone un ámbito de conocimiento esencial para temas de actualidad como puede ser la sostenibilidad, además de poder ayudar a resolver problemas globales como la energía.

Actualmente, Segovia también es un lugar de reuniones, congresos y conferencias que la convierten en una esfera donde se muestran algunos de los últimos avances en química.

Además de la exposición, el programa contempla tres conferencias en las que se reflexionará sobre la contribución de la Química a lo largo de la historia y sus perspectivas de futuro:

Todas las conferencias tendrán lugar en la Academia de Artillería en la Calle de San Francisco los días indicados a las 17.00 h.