Teotihuacan fue durante ochocientos años (del siglo II a. C. al siglo VII d. C.) el centro cultural, político y religioso de una potente civilización. Situada a cuarenta y cinco kilómetros de Ciudad de México, llegó a ser la sexta ciudad más grande del mundo en su tiempo y hoy es una de las grandes maravillas arqueológicas, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
La exposición que presenta la Obra Social "la Caixa" en CaixaForum Madrid tras su paso por Barcelona, Teotihuacan, Ciudad de los Dioses, es la más completa realizada nunca sobre la cultura teotihuacana, con 400 piezas que incluyen algunas de las obras maestras que se han encontrado en esta ciudad prehispánica durante un siglo de excavaciones arqueológicas. Las piezas que se exponen, algunas de ellas de grandes dimensiones, revelan un elevado refinamiento y un espíritu cosmopolita, abierto a las principales culturas de América central. En la exposición, el visitante descubrirá esta gran ciudad a través de algunos de los aspectos más notables de su cultura: ideología, poder, arte, sociedad, religión, guerra, tradiciones, vida cotidiana y, por supuesto, la influencia que legó la civilización teotihuacana a las diferentes culturas prehispánicas. Tras su paso por Barcelona, la muestra, organizada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, llega a CaixaForum Madrid enmarcada en una itineración internacional que ya ha pasado, entre otras ciudades europeas, por París, Berlín y Roma, y que ha tenido cerca de 460.000 visitantes.
Teotihuacan, Ciudad de los Dioses, organizada junto con el Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, conmemora un siglo de excavaciones arqueológicas en esta ciudad prehispánica.
La ciudad de Teotihuacan, a cuarenta y cinco kilómetros de Ciudad de México, es una de las maravillas arqueológicas del mundo, cuyos principales monumentos -la Pirámide del Sol y la Pirámide de la Luna, unidas por la Calzada de los Muertos, el bellísimo Palacio de los Jaguares o el templo de Quetzalcóalt- son referentes de la cultura universal. Teotihuacan significa en lengua náhuatl 'el lugar de los dioses' o 'el lugar donde se hacen dioses'. Considerada como la mayor ciudad prehispánica jamás construida en el continente americano, fue un centro cultural, político y religioso. En esta gran metrópoli antigua se desarrolló, durante más de 800 años, una de las sociedades más importantes del México precortesiano.
Como gran metrópoli, Teotihuacan marcó la pauta de la política, el comercio y la ideología en buena parte de Mesoamérica durante el periodo 150 a. C. - 650 d. C.
La muestra Teotihuacan, Ciudad de los Dioses presenta más de cuatro centenares de piezas arqueológicas -reunidas por primera vez- que proporcionan una completa visión de la cultura teotihuacana. Las obras proceden de los principales museos pertenecientes al Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, entre los cuales destacan el Museo Nacional de Antropología, la Zona Arqueológica de Teotihuacan y el Museo del Templo Mayor. Las obras de estas colecciones se complementan con otras procedentes de colecciones privadas, como la que el pintor Diego Rivera reunió en el palacio de Anahuacalli.
Entre las obras que integran la exhibición, el visitante encontrará pintura mural, esculturas en piedra, estatuillas trabajadas en obsidiana, bellos recipientes de cerámica, suntuosos ornamentos de joyería prehispánica y máscaras rituales -algunas recubiertas de turquesa-, además de figurillas de animales mitológicos de gran importancia en Mesoamérica, como el jaguar y la serpiente, elaboradas en diversos materiales.
Las piezas revelan un elevado refinamiento y un espíritu cosmopolita, abierto a las principales culturas de América central. Se incluyen desde los objetos localizados en los albores del siglo pasado hasta los más recientes descubiertos en el Palacio de Xalla, al norte de la Pirámide del Sol. Entre las piezas emblemáticas destacan el Gran Jaguar de Xalla, una fachada escultórica (descubierta hace pocos años) que conserva gran parte de su policromía; y el llamado Disco de la Muerte, figura en piedra que alude al misterioso fin de esta antigua civilización.