La Cátedra Unesco de la Universidad Politécnica de Madrid cumple y celebra sus primeros diez años de vida
Parece muy oportuno celebrar el décimo aniversario de la fundación de la Cátedra Unesco con un programa, en principio, tan atractivo. Por tanto, enhorabuena de forma anticipada a los organizadores que han conseguido reunir a tres de los últimos cuatro ministros de educación que hemos tenido en España.
Puede ser una buena ocasión para escuchar y valorar las opiniones, sugerencias y propuestas de tan distinguidos ponentes.
En tan sólo unos meses nos encontraremos en ese futuro tantas veces anunciado en los últimos años: los nuevos programas formativos de grado y postgrado saltarán al ruedo universitario español y las actuales titulaciones universitarias empezarán a ser pasado.
Como es sabido existe mucha incertidumbre, ya que en estas fechas, como consecuencia de que numerosas universidades han dejado los deberes para el último momento, seguramente el trabajo se le acumulará a la ANECA y a los organismos que deben pronunciarse sobre las diferentes propuestas formativas.
Estamos atravesando según todos los indicadores una profunda crisis económica de la que no se ve la salida con claridad y coincide con éste gran cambio en el ámbito universitario. ¿Se pueden acometer las transformaciones que el sistema necesita en el ambiente descrito?
Por otra parte, cada universidad va tomando posiciones de cara al futuro, pero a la vez algunos hablan de transparencia, de reglas de juego claras, parece que se ha dado la orden de salida en cuanto a la competitividad entre los diferentes campus universiarios. ¿Si el gobierno delimita el campo de juego, las comunidades autónomas jugarán en ese marco o podrán diseñarse uno propio, como a veces sucede en diferentes ámbitos?
¿Para cuándo una regulación precisa de las distintas profesiones existentes y de las que previsiblemente aparezcan impulsadas por esta reforma?
Estos diez años de la Cátedra Unesco han coincidido con el conocido proceso de Bolonia y para muchos de nosotros ha sido el foro donde hemos aprendido algo de su tortuoso camino, también hemos compartido ideas y opiniones, en definitiva, ahora, valoramos mejor la gran labor que el equipo comandado por el profesor Franciso Michavila está haciendo.