Ciencia y Cultura


JUANELO O EL HOMBRE NUEVO

 

Juanelo o el Hombre Nuevo Ferrero,  Jesús.

Alfaguara, Madrid, 2000

 
 
 
 

EL AUTOR

Jesús Ferrero nació en Zamora en 1952. Pasó su juventud en Barcelona, Ginebra, Madrid y París. En la Escuela de Altos Estudios de la capital francesa se graduó en Historia Antigua relacionada con el mundo griego, a la vez que ejercía de portero de noche en un hotel, donde escribió su primera novela, Bélver Yin (1981), con la que obtendría el Premio Ciudad de Barcelona de 1982.

Ha publicado, entre otras muchas, las novelas: <<Bélver Yin>> (1981), con la que se reveló, <<Opium>> (1986), <<El Efecto Doppler>> (1990), <<Alis el Salvaje>> (1991), <<Juanelo o el hombre nuevo>> (2000), <<Las trece rosas>> (2003) y <<Ángeles del abismo>> (2005). Es también poeta; la editorial Siruela dio a conocer su hasta ahora más reciente libro de poesía, <<Las noches rojas>> (2003). La fantasía y la paradoja cumplen un papel central en la poética de Ferrero, que ha declarado al respecto que <<La imaginación sólo debiera servir para suplir las deficiencias de la visión>>, y que <<El arte empieza donde comienza la paradoja, que es la ambigüedad multiplicada. Frases ambiguas lo son muchas, pero no ocurre lo mismo con las frases paradójicas. Para que la paradoja aflore es necesario que a una ambigüedad le suceda otra como respuesta, y que al cruzarse con ella genere en su cópula nuevas paradojas que se encadenen a las anteriores>>

 
 

RESUMEN ARGUMENTAL

Siempre imaginativo, Jesús Ferrero toca en esta novela un asunto que lo sitúa en el amplio espectro de la literatura fantástica. En el Toledo del siglo XVI vive un hombre creado de modo artificial, una especie de gólem, un hombre, pues, literalmente nuevo; se llama Juanelo y ha sido creado por un raro inventor que, al darle la vida, se dio la muerte. Henos ante el mito del hombre inmortal, con el que Mary Schelley inauguró el género al alumbrar a Frankestein. El sueño del mágico inventor, emplazado en un Toledo nocturno y gótico, era conseguir un hombre nuevo: duro, frío, distante. Pero la novela es la historia del derrumbamiento de ese sueño. Juanelo se revela como una criatura cordial y frágil, que llega a conocer la verdadera tragedia del hombre: su condición perecedera. La narración está diestramente referida. Ferrero sabe dar con eficacia el ámbito nocturno y gótico de la ciudad de Toledo y sabe explotar las posibilidades novelescas del asunto, comenzando por el universo de los alquimistas e inventores.

 
 

VALORACIÓN

El problema crítico que plantea <<Juanelo>> es, sobre todo, de visión. Había al menos dos posibles planteamientos. Uno irónico, al modo del Calvino de <<Nuestros antepasados>>, y otro en clave trágica. Ferrero ha optado por la visión trágica: Juanelo acaba descubriendo la condición mortal de la criatura humana. Quizá la visión irónica hubiera sido más fecunda, pues la fábula, amable y como en <<scherzo>>, de un homúnculo hubiera suscitado mucho juego, mucho humor y acaso una percepción más profunda de la realidad. Con todo, queda un texto hábilmente narrado y desarrollado con sobriedad e imaginación, que acredita las facultades de uno de los más innovadores narradores españoles de los últimos tiempos.