¿Hacia dónde va la Convención sobre la Diversidad Biológica? Últimas novedades del COP 10 en Nagoya (Japón)

Dra. Rosario G. Gavilán. ENVIROVEG. Dpto. Biología Vegetal II, Facultad de Farmacia. Universidad Complutense de Madrid.

La Convención sobre la Diversidad Biológica (CBD en inglés) fue firmada en Rio de Janeiro en 1992, en la llamada ‘Reunión de la Tierra’, aunque no empezó a funcionar hasta el 29 de diciembre de 1993. Es el primer organismo que trata de aglutinar  todos aquellos acuerdos o acciones sobre temas relacionados con la diversidad biológica a las que pueden llegar los países que forman parte de Naciones Unidas y que se resumen en: Conservación, Uso sostenible de sus componentes, y Reparto equitativo de los beneficios que puedan extraerse por el uso de los recursos genéticos.  El  Secretariado del CBD tiene como funciones organizar congresos y reuniones, preparar informes, asistir a los gobernantes en la implementación de distintos programas de trabajo, coordinar con otras organizaciones internacionales y agrupar y diseminar información. Este secretariado está ligado al programa medioambiental de Naciones Unidas.

Además el CBD tiene como tarea organizar la Conferencia de las Partes (Conference of Parties, COP en inglés) de forma bianual. Este año que, además se celebra el año de la Diversidad Biológica, le ha tocado el turno a Japón y se ha celebrado recientemente en la ciudad de Nagoya (18-29 Octubre).  Son reuniones importantes para el futuro de los seres vivos, tanto como pueda ser la reciente del G20 para la economía mundial y que, sin embargo, casi no trascienden a la opinión pública, y en ellas se toman decisiones o se llegan a acuerdos, en muchos casos importantes. Hay además circunstancias o actitudes que nos pueden parecer sorprendentes, como que se llega al último día sin haber cerrado acuerdos sobre temas que estaban en las agendas de todos los países y se hace en el último minuto o incluso se organizan reuniones bilaterales secretas. Sin embargo, en esta ocasión parece que ‘algo se ha movido’, aquí van alguno de los acuerdos a los que se ha llegado:

  • Se ha acordado la redacción del Protocolo Aichi-Nagoya para Compartir Beneficios. Esto significa que las comunidades indígenas y locales de determinadas áreas del planeta, tengan derecho a disfrutar de los beneficios que se produzcan de la explotación de sus recursos naturales (genéticos) y dejen de ser víctimas de la bio-piratería. Está previsto que entre en vigor en el 2012.
  • No se han tomado grandes decisiones sobre el futuro de bosques y zonas marinas de alta diversidad que todavía continúan sin estar protegidas, sólo se ha establecido una ‘diana’ del 17% de áreas terrestres o acuáticas continentales a proteger, siendo de un 10% para las costeras y marinas  (por ejemplo, si se ha acordado reducir la presión que se ejerce actualmente sobre los arrecifes de coral).  Esto ocurre porque bastantes países no han hecho sus ‘deberes’ o ni siquiera pueden (o quieren) organizar infraestructuras para garantizar un mínimo de conservación. Sin embargo, el 50% está de acuerdo con llevar a cero la ratio de pérdida de hábitats naturales, incluyendo los bosques.
  • Los gobiernos han acordado como objetivo prioritario Restaurar, al menos, un 15% de las áreas degradadas, lo cual nos congratula desde REMEDINAL2.
  • Firmar un nuevo Plan Estratégico del CBD que sirva de guía para los esfuerzos Nacionales e Internacionales que haya que desarrollar para la salvaguarda de la Biodiversidad.
  • También se ha acordado aumentar sustancialmente los recursos financieros para apoyar al CBD.

Como en otras reuniones que se organizan a escala mundial, los colectivos más cercanos a luchar políticamente por la Conservación de la Diversidad no consideran que los acuerdos de Nagoya vayan a ser de gran calado, pero al menos la percepción de mejora en los mismos ha sido más positiva que la anterior COP del Cambio Climático en Copenague y supone un paso más que se ha dado para la protección de la misma y de los que viven (o malviven) de ella.

¿Qué papel han jugado los científicos?

No siempre es fácil y, en nuestro país es particularmente complicado, participar en estos foros explicando la importancia que tiene la conservación de la biodiversidad a través del trabajo que hacemos. Las relaciones entre las estructuras  administrativas y las científicas presentan interrupciones. Sin embargo, en otros países existen algunos grupos de investigación que dedican parte de su esfuerzo y trabajo a estar presentes de forma activa en estas conferencias y a tratar de mostrar el valor del trabajo que realizamos y de lo importante que es Conservar la Biodiversidad. Ello unido al trabajo científico en red, hacen que en esta entrada al blog queramos destacar la importancia del trabajo organizado por el grupo de Christian Körner y la red GMBA (Global Mountain Biodiversity Assessment), en Basilea (Suiza), financiados por organismos oficiales del país helénico como la Academia de Ciencias.

GMBA es una red multidisciplinaria de científicos que busca explorar y explicar la gran riqueza biológica de las montañas del mundo.  Se agrupa con otras redes y organismos en DIVERSITAS, programa internacional de la UNESCO para el estudio de la Biodiversidad. Para este nuevo COP, DIVERSITAS ha preparado diferentes reuniones que tratan de mostrar y sensibilizar a los miembros de los gobiernos de los diferentes países que se reunían en Nagoya la importancia potencial que tiene proteger la Diversidad en los mismos.

GMBA ha estado presente en distintos eventos de esta COP de Nagoya (ver en su página web) y también ha preparado un documento conjunto de parte de sus miembros como contribución científica divulgativa para celebrar el Año Internacional de la Biodiversidad (2010), de un lado, y la presente Conferencia de las Partes de Nagoya, de otro, tratando de explicar el papel y la importancia de la biodiversidad de las montañas para la Humanidad y así tratar de sensibilizar a los participantes de algunos de los distintos grupos de trabajo que ha participado en la misma, además de la gran belleza de estos lugares, de los procesos funcionales y biológicos que tienen lugar a distintos niveles de organización, como fin último de explicar el significado y la importancia que para el Hombre tiene la biodiversidad de las montañas. Esto lo han hecho organizando la información que les hemos aportado de nuestras investigaciones, en torno a cinco grandes temas:

  • La Biodiversidad como Patrimonio Universal.
  • El significado funcional de la Biodiversidad de Montaña.
  • El dramático impacto de los cambios en los usos de los territorios de montaña.
  • El cambio climático y su relación con la diversidad.
  • La Protección de la Biodiversidad de montaña.

Podéis consultarlo en el siguiente link.

Por nuestra parte, en el segundo capítulo de ese documento  (‘El significado funcional de la Biodiversidad de Montaña’), aportamos unas breves pinceladas  sobre el papel de la ‘facilitación en la alta montaña mediterránea’ un fenómeno que se está estudiado a nivel mundial en las zonas cacuminales de las montañas y del que se ha sabido muy poco hasta hace algunos años.

La ‘facilitación’ es un proceso que ocurre en la naturaleza por el cual algunas especies se benefician de la presencia de otras. En medios alpinos, de alta montaña, este fenómeno es mucho más común que su contrario, la competencia, sobre el que se ha centrado durante décadas gran parte del esfuerzo de las investigaciones. En el mundo vegetal, que es en el que nos integramos, las especies facilitadoras son capaces de proteger a otras del viento, de la radiación e incluso de los herbívoros; también son capaces de mejorar los suelos donde están enraizadas y eso es también bueno para las semillas de otras especies que pueden germinar en mejores condiciones que las esperadas en esas zonas.

Estas facilitadoras suelen tener forma redondeada, como un cojín (algunas incluso pinchan, son espinosas) y son muy típicas en las altas montañas de toda la Tierra. En nuestras montañas comparten el espacio con otras hierbas, organizándose en forma de mosaicos, generalmente, rodeados de suelo desnudo. Entre los cojines, tenemos plantas endémicas, muy longevas y perennes, como Minuartia recurva, Silene elegans, Jasione centralis o Plantago alpina.

La conservación de estos tipos de vegetación es muy importante porque entre otras características garantizan la estabilización de las pendientes en las montañas y previenen la erosión que podría tener efectos muy negativos en zonas de pie de monte, donde se encuentran los pantanos que nos nutren de agua para beber. Nuestras investigaciones las desarrollamos en distintas sierras del Sistema Central, pero hoy queremos llamar la atención de la Sierra de Guadarrama, a sólo 60 kms de Madrid, la tercera ciudad más poblada de Europa con aproximadamente tres millones de habitantes  y más de seis en el llamado ‘Gran Madrid’. Las amenazas que rodean a esta pequeña montaña, con tanta población ejerciendo su influencia (potencial o real), a través de las más variopintas acciones, como puedan ser usos tradicionales, usos de ocio, etc., son enormes. Desde este documento presentado en Nagoya hemos querido expresar la necesidad de preservar el conjunto de ecosistemas que viven en ella, como medio para preservar nuestra propia integridad.

No creo que sea la última vez que desde este blog tratemos estos apasionantes temas.

Un abrazo. Charo

2010 Year of Biodiversitynagoya-cop10-en

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Un comentario

  1. No puedo estar más de acuerdo con esta información. Nosotros, por nuestra parte, hemos hecho alguna cosa en la montaña cantábrica. De hecho, definimos una aproximación similar no ya con el concepto de facilitación, muy atinado por otra parte, sino mediante otro elemento que está claramente asociado: el pionerismo, mediante la detección de patrones de recolonización de suelos denudados.
    Me congratula ver que existen razones para creer que el concepto puede ser parte del camino a recorrer para la restauración de hábitats de montaña. Saludos. Juan Vega

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