Algunos aspectos relacionados con los caminos y rutas ganaderas en la Península Ibérica anteriores al siglo XIII

Cuando se aborda el tema de la ganadería y de la agricultura en la antigüedad, una de las referencias ineludibles pasa por el significativo hecho de la creación del Honrado Concejo de la Mesta, impulsado por el rey Alfonso X “El Sabio” en el año 1.273, en realidad, se trata de un antes y un después en lo concerniente al desplazamiento del ganado y por ende a la evolución del entramado cañariego.

 

Convienen distintos historiadores en que la Reconquista avanza con paso firme ya bien entrado el siglo XIII. Se habla de una franja de terreno vacíos de entre 100 y 200 kilómetros en el interior peninsular donde los escarceos y batallas son constantes en esa época. Sólo  los pastores trashumantes pasan con sus ganados aprovechando sus escasos pastos y sobre todo buscando los extremos convenientes para cada estación.

A partir de este período se va consolidando en muchas partes de la Península  un sistema de convivencia entre una agricultura incipiente, muy precaria, necesitada del auxilio del ganado, por muy variadas razones, necesidad de abono, de tiro, de carne o de leche y una ganadería de doble modalidad, estante o riberiega y otra trashumante.

La profesora Marie-Claude Gerbet especialista en el estudio de la historia medieval española, defiende la tesis de una ganadería singular que se va formando en la península Ibérica, sobre todo entre los siglo X, XI, XII y XIII; muy diferente a la del resto de Europa.

En su libro un élevage original au Moyen Âge. La péninsule ibérique que está traducido al español como La Ganadería Medieval en la Península Ibérica hace un repaso cronológico respetando los diferentes territorios.

En definitiva se trata de una obra dividida en tres partes desglosada en diez capítulos en los que aborda los comienzos de la ganadería cristiana antes de la gran ofensiva de los musulmanes (principios del siglo IX) en donde señala el gran vacío existente, los pocos datos que conocemos desde la época romana hasta bien entrada la edad media.

Por otra parte los movimientos ganaderos hunden sus raíces en la prehistoria, en una concepción muy diferente, ya en época de dominio romano se practicaba en numerosos países del arco mediterráneo.  Hay que recordar que de la aquella época existen vestigios de todo tipo repartidos en innumerables asentamientos. En este mismo blog introducimos un post donde se mencionaban esas circunstancias, ver en:

http://weblogs.madrimasd.org/vias_pecuarias/archive/2008/01/13/82321.aspx

En otras entradas se comentará y analizará con más detenimiento la obra antes mencionada.

 

 

 

Compartir:

Deja un comentario