Tipos de NEBT: I la empresa durmiente

Supongamos que un grupo de investigación de una universidad comienza a realizar trabajos para empresas a través del artículo 83, y que cada vez tiene más demanda; un día en la cafetería de la facultad uno de los investigadores comenta a sus colegas, «menudo coñazo que es el papeleo para hacer cosas con el 83, llevamos cuatro expedientes este mes y yo me estoy pasando la vida en la Otri»; unos días después, y en ese mismo marco vuelve a comentar «¿os acordáis de Manolo? Pues resulta que creo la empresa, y me han dicho que se está forrando»; en ese momento surge entre los componentes del grupo una súbita inclinación por convertirse en emprendedores (con paracaídas), esa tarde, alargan el café hasta que el camarero les retira los platos, y se dan cuenta que su tecnología merece la pena, que son un grupo joven y majete, y que seguro que se ponen de acuerdo para repartir la fama y el dinero que, sin duda les espera a la vuelta de la esquina. En fin que, quizás eso de crear una empresa no tenga por qué implicar darle un uso espurio a la Ciencia.
Con gran ilusión acuden de nuevo a la Otri, esta vez en masa, y preguntan por los trámites para crear una spin-off, allí les hablan, entre otras cosas, de elaborar un plan de negocio; no importa, somos muchos, jóvenes y bien avenidos, seguro que podemos con eso y con mucho más; plan de negocio que nunca llegará a estar completo. Pero después resulta que lo del plan no mola tanto, que además la gente empieza a estar pillada,… No obstante sigue quedando ilusión, la empresa se constituye y comienza en seguida a facturar; eso sí allí nadie ha hablado de invertir dinero en la compañía, y cuando les preguntas por si necesitan financiación, te responden taxativamente que no.
¿Que cómo acaba la historia? Pues la historia no acaba, se crea una empresa que factura ocasionalmente, que no desarrolla tecnología, que no busca crecer, y por tanto tampoco precisa de capital, que no tiene un gestor y que tan sólo tiene contratado a tiempo total a algún becario durante unos meses,… en resumen: una empresa durmiente.

Compartir:

Deja un comentario