Zapatero: ¡escuche a los emprendedores!

Éste es el título del artículo que nos ofrece este mes de marzo la revista Capital , en el que  Martín Varsavski (ex consejero delegado de Jazztel, fundador de ya.com, FON,…) , Bernardo Hernández (director mundial de marketing de producto de Google, presidente del consejo de administración de Tuenti, fundador de Idealista) y Javier Oiván (Responsable de desarrollo internacional de Facebook) dan su opinión sobre el ecosistema para la creación de empresas en España, y lo comparan con la situación en otros países.

Empezando por los programas públicos, además de ayudas monetarias a veces mucho más cuantiosas, otros países nos llevan ventaja a la hora de atraer empresas tecnológicas extranjeras. Por ejemplo, en Irlanda y Suiza los gobiernos pagan el coste de los despidos en las start ups. Una medida que tal vez no sería muy popular en España, pero que «es una de las principales causas de fracaso de las startups«, dice Varsavski. En otros países no es tan complicado captar talento extranjero, porque «al final hay que traerlos de modo medio ilegal. Que vengan como turistas e irse cada cierto tiempo».

Además «los políticos españoles tienen una mentalidad muy cortoplacista», dice Bernardo Hernández. El estatuto de la joven empresa innovadora, al que nos referíamos por primera vez en nuestro blog hace ya TRES  años (ver post) no está vigente aún, pero tiene una ocasión de oro de cambiar cosas, y lo mismo respecto a algunas iniciativas de las Comunidades Autónomas.

En España abundan los programas públicos de apoyo a los emprendedores, pero es imprescindible que también lo hagan los líderes de opinión del sector privado. » (… ) ni la CEOE ni los grandes bancos ni las empresas dinamizan el espíritu emprendedor, y son los que podrían hacerlo», dice Bernardo Hernández. La verdad es que estos agentes privados son los que realmente cambiarán el ecosistema. Cuando en la Oficina del Emprendedor de Base Tecnológica de madri+d nos reunimos con emprendedores con afinidad en algún sector o tecnología, suelen estar de acuerdo en la poca atención que prestan las grandes empresas españolas a la captación de talento nacional vía start ups, frente a otros países como Alemania, por no decir EEUU. Según Javier Oliván «(…) es un ecosistema que tarda años en crearse, pero en algún momento hay que empezar».

A pesar de estos aspectos en los que incidimos una y otra vez, España es un país atractivo para crear empresas, y probablemente seguirá siéndolo:  según Bernardo Hernández,  «las nuevas generaciones están cada vez mejor preparadas. Hay más gente que habla inglés. [El programa] Erasmus ha hecho mucho bien a la hora de abrir la mente a los estudiantes. Y hay casos de éxito: Idealista, Softonic, Infojobs, eDreasms, Atrapalo… Han surgido con capital español y han salido fenomenal» .