Patentes y Seguridad ferroviaria: el dispositivo de «Hombre Muerto»
Lo que en el argot ferroviario se conoce como «Hombre Muerto», hace referencia a un dispositivo de seguridad de los vehículos ferroviarios que, en caso de ser necesario, actúa produciendo un frenado de emergencia, con el objetivo de producir la detención del tren.
Se emplea en el ferrocarril desde hace aproximadamente 100 años, y su nombre hace referencia a una persona que, estando a los mandos de un tren, pueda haber perdido el sentido o encontrarse indispuesta. El dispositivo «Hombre Muerto», tiene la finalidad de detectar cuándo se da esa situación, para detener el tren lo antes posible, evitando que esté circulando sin control. No sólo actúa cuando la persona que conduce el tren se desvanezca, sino también en otros escenarios a considerar, como por ejemplo, que dicha persona se ausente de la cabina de conducción estando el tren en movimiento.
El dispositivo «Hombre Muerto» comenzó a utilizarse en los ferrocarriles porque los vehículos ferroviarios, cuyo personal al mando era hasta hace pocas décadas un maquinista y un ayudante (en la actualidad, en los ferrocarriles modernos solo va al mando de la conducción una persona), pueden provocar graves accidentes en caso de que dicho personal descuide sus funciones o se vea afectado por alguna dolencia o situación que, por ejemplo, le produzca algún grado de pérdida de consciencia.
El dispositivo como tal consiste en un pedal situado en el suelo, para ser accionado o presionado con el pie, y frecuentemente también un par de botones a ambos lados de la cabina, que se pueden accionar o pulsar con la mano. El dispositivo deberá ser accionado cada cierto tiempo, ya sea con el pie o con la mano, para evitar que se active el frenado del tren. Así mismo, si el dispositivo es permanentemente presionado o pulsado, sin ser soltado cada cierto tiempo, puede ser indicativo también de una situación de peligro, por lo que el sistema actuaría de igual manera que cuando no se presiona o pulsa. En definitiva, la falta de accionamiento cada cierto tiempo o el accionamiento continuado sobre el dispositivo sin que sea liberado también cada cierto tiempo, son las condiciones que se utilizan para que el sistema actúe.
El tiempo en el que el maquinista debe presionar/pulsar o dejar de presionar/pulsar está regulado según unos ciclos de tiempo que pueden ser regulares o irregulares. En cada ciclo, el maquinista ha de pulsar y soltar el pedal o botón. Si pasa un ciclo sin que lo haga, se activa primero un indicador luminoso en el panel de mandos y posteriormente se produce un aviso sonoro. Si transcurrido un tiempo tras el aviso, el maquinista no ha actuado sobre el sistema, se activa en forma automática el freno de emergencia que detiene al tren por completo.
Los tiempos máximos para los ciclos de presionar/pulsar y soltar el pedal o botón cambian según el vehículo. Normalmente, con mayor velocidad se reducen los tiempos. Hay, no obstante, diversos esquemas de funcionamiento en cuanto a tiempos, secuencias y avisos sonoros y luminosos.
Tanto en la Clasificación Internacional de Patentes como en la Clasificación Cooperativa de Patentes existe subgrupo específico, el B60L3/02, para “Dispositivos de Hombre Muerto”, lo que da una idea de su importancia.
Invitamos al lector a realizar una búsqueda de acuerdo con este símbolo en las bases de datos INVENES y Espacenet para comprobar que existen multitud de patentes en relación a estos dispositivos. Muchas están relacionadas con la interacción entre los dispositivos como tales y el sistema de frenado (neumático, electroneumático, etc) propio del vehículo. A modo ilustrativo mostramos una patente inglesa publicada en 1927, con número de publicación GB268751, en la que se describe un dispositivo de hombre muerto para vehículos eléctricos. Puede verse que en la Figura 1 que el pedal y el pulsador del «Hombre Muerto» corresponden a la referencia «9», y como éstos se encuentran insertados en el circuito eléctrico que activa el freno, donde también se puede apreciar un relé temporizado «8».