Excelentísimo señor Consejero de Educación e Investigación, Excelentísimo señor Presidente de la Academia de Ciencias, Viceconsejera de Educación e Investigación, Rectores Magníficos, Directores generales, Directores de IMDEAs, investigadores, anteriores premiados, señoras y señores, buenos días a todos.
Me apasiona enormemente mi trabajo. Así que el haber recibido un premio por hacer investigación es una gran fortuna, más aún cuando el premio proviene de esta región que me ha acogido a mí y a mi familia tan cálidamente.
Yo siempre he tenido la suerte de estar rodeado de gente que me anima y me apoya a llegar más lejos. Por supuesto comenzando por mis padres y familia extendida. Mi esposa, que hace muchos sacrificios para que yo pueda pasar tantas horas en el laboratorio y viajando. Agradezco mucho a los miembros actuales y antiguos de mi grupo de investigación por el trabajo que hemos hecho juntos. También a los estupendos colaboradores que tengo en Madrid, algunos aquí presentes; ninguna financiación podría reemplazar lo mucho que aprendo de ellos. Pero quiero agradecer especialmente al equipo de personas que me rodea en IMDEA Materiales, que hace todo para que yo pueda centrarme en la ciencia, y que comparte la ilusión de este proyecto. Siempre me han animado a conseguir nuevos retos, incluidos los que me parecían demasiado grandes para mí.
Con tanto apoyo a mi alrededor, tengo claro que yo no soy importante de manera individual. Lo que sí es muy importante es la investigación que resulta de este esfuerzo colectivo
Con tanto apoyo a mi alrededor, tengo claro que yo no soy importante de manera individual. Lo que sí es muy importante es la investigación que resulta de este esfuerzo colectivo. Trabajamos para hacer que la revolución de los nanomateriales se materialice en estructuras macroscópicas. Fabricamos kilómetros de fibras más fuertes y más conductoras que el acero, más ligeras que el plástico y hechas a partir de alcohol o gas natural. Permiten hacer celdas solares flexibles, baterías estructurales y materiales que captan energía del entorno. Estoy convencido que éste será un material clave en la electrificación del transporte, entre otros sectores. El siguiente reto que veo ahora para mí, es lograr que parte mi investigación se traduzca en desarrollos industriales que beneficien más directamente a la región y por lo tanto tengan mayor impacto positivo en la sociedad; sin jamás descuidar la investigación fundamental.
