Innovaciones españolas finalistas en la historia del Premio Inventor Europeo

El pasado 4 de mayo, la Oficina Europea de Patentes (OEP) presentó los 15 finalistas al Premio Inventor Europeo 2021, galardón que anualmente se otorga a aquellos inventores que hayan contribuido de manera significativa a la innovación, la economía y la mejora de la vida diaria de la sociedad en Europa. Es un homenaje a la creatividad y a las habilidades técnicas de los innovadores y emprendedores, distinguiendo a los mejores inventores desde el año 2006 en un total de cinco categorías: industria, pequeñas y medianas empresas (pymes), investigación, países no pertenecientes a la OEP y logros de toda una vida.

El premio, aunque es meramente simbólico, otorga gran relevancia y reconocimiento a los galardonados, y es un incentivo para otros inventores, ya que fomenta la innovación y pone en relieve el valor de las patentes, mostrando cómo los derechos de propiedad industrial pueden ayudar a que una idea se convierta en una invención, en una solución a un problema técnico.

Desde el año 2013, hay una sexta categoría, el Premio Popular donde se invita al público a votar entre todos los nominados a las cinco categorías. La votación está abierta desde el momento que se dan a conocer los finalistas hasta el comienzo de la ceremonia.

España ha visto nacer a algunos de los nominados y premiados de estos galardones que nos gustaría destacar en esta entrada del blog.

El año 2010 marcó un hito para la historia de España en este campo pues era la primera vez que había finalistas españoles y, además, también era la primera vez que se celebraban en nuestro país, más concretamente en Madrid, por ser ese año cuando España asumía la presidencia de la Unión Europea. En paralelo a la celebración de los premios, tuvo también lugar el Foro Europeo de Patentes. La ceremonia de entrega de premios se realizó en una de las conocidas “Cuatro Torres Business Area” de Madrid, en concreto en la Torre PwC, tercer rascacielos más alto de España y quinto de la Unión Europea, y asistieron los actuales Reyes de España Felipe VI y Letizia.

La primera nominación española llegó de la mano de Jorge Blasco, investigador valenciano ingeniero de la Escuela de Telecomunicaciones de la Universidad Politécnica de Madrid que tuvo la idea, en la década de los 90, de usar cables eléctricos estándar de 110 y 220 voltios para transferir datos a través de líneas eléctricas y cables telefónicos. Siguiendo su visión, el ingeniero de telecomunicaciones recaudó 300 000 € de amigos y familiares, y en 1998 lanzó la empresa DS2. El desarrollo se hizo con el equipo de investigadores compuesto por José Luis González, Francisco Andrés, Antonio Pairet y Antonio Poveda y obtuvieron un conjunto de circuitos integrados que formarían la base de los equipos de comunicaciones de alta velocidad, como los módems, que se conectan directamente a una toma de corriente (EP1551089 A1 y EP1998467 A1).

 

Tres años más tarde, en 2013, volvíamos a hacer historia pues el primer galardonado de los premios en la categoría Premio Popular recaía en el ingeniero industrial burgalés José Luis López Gómez, que era finalista para la categoría Industria por haber desarrollado un sistema de suspensión de ruedas que mejoraba considerablemente los viajes en trenes de alta velocidad.  Esta invención era protegida como patente en el año 2007 (EP1826091 A1) y recogía un sistema para el torneado de ruedas de tren sin tener que desmontarlas, con lo que evitaba vibraciones en la marcha y, en consecuencia, mejoraba grandemente la comodidad del pasajero.

 

El entonces presidente de la OEP, Benoît Battisteli afirmó: “Este invento ha hecho los viajes en tren más rápidos, seguros y más eficientes energéticamente, y que López Gómez reciba el premio demuestra que el público valora mucho el progreso técnico que mejora de forma evidente la movilidad de miles y miles de viajeros todos los días”.

La empresa Talgo, registrada actualmente como Patentes Talgo, marcó la vida de José Luis López Gómez desde que entrara en 1967 a formar parte de la misma. Allí ostentó varios puestos hasta llegar a ser nombrado Director General de Tecnología (I+D), cargo que ocupó hasta su jubilación en 2004, momento en el que pasó a ser Asesor Técnico del Presidente de Patentes en la misma compañía.

Aunque no obtuvo el galardón en la categoría de la que era finalista, recibió el Premio Popular. Era la primera vez se entregaba y lo decidía el público.

José Luis López Gómez – Guiado independiente de ruedas para trenes de alta velocidad

https://www.youtube.com/watch?v=ItnAYljSb1Q

En 2014, el badalonés Carles Puente Baliarda, ingeniero de la Universidad Politécnica de Barcelona fue finalista en la categoría pyme por inventar la primera antena fractal multibanda, con la que es posible recibir señales en diferentes rangos de frecuencia debido a las propiedades geométricas y multicapa características de los fractales. De este modo, se consigue una gran transmisión en diferentes frecuencias con una antena de pequeño tamaño. Con su invento patentado en 1995 se abrió las puertas a la revolución de “Internet en cualquier lugar” y a disponer de teléfonos móviles con pequeñas antenas (EP1223637, EP1380069, EP1258054).

 

Fractus, la empresa cofundada por Puente Baliarda para comercializar su invento, es ahora un líder mundial en el desarrollo de antenas para dispositivos inalámbricos y en la actualidad tiene un importante portfolio de patentes que, además de la fabricación de antenas, le permite hacer transferencia de tecnología con grandes empresas de telefonía.

De nuevo, en 2017, un español, el madrileño José Ángel Ávila, participaba en una nominación al premio pero esta vez como parte del equipo que desarrolló la señal de radio que hizo del Galileo el sistema de navegación satélite más preciso del mundo, una tecnología de señalización que permitió que Europa tuviese su propio sistema global de navegación por satélite (GNSS) (EP1836778 A1). Se les galardonó con el premio Inventor Europeo en la categoría “Investigación”.

 

José Ángel Ávila, ingeniero de la Agencia Espacial Europea (ESA), formó parte del equipo de investigadores de un gran proyecto internacional. El invento, que consiste en dos señales de radio, una más pesada y otra más ligera, se ha convertido en el estándar para el GPS estadounidense, el ruso Glonass y el chino Beidou, y sirve para desarrollar aplicaciones y trabajos de gran valor en diferentes campos como es la meteorología, la gestión del transporte, la observancia de los efectos del cambio climático, la pesca, la agricultura y operaciones de búsqueda y rescate.

 

 José Ángel Ávila Rodríguez- Rastreando lo invisible

https://www.youtube.com/watch?v=xeU8k20RI4k

En 2019 volvimos a hacer historia y no sólo porque por primera vez había dos nominaciones españolas en dos categorías distintas: Industria (Antonio Corredor y Carlos Fermín Menéndez) y Logros de toda una vida (Margarita Salas Falgueras), sino que además esta última recibió finalmente dos de los galardones, uno como ganadora en la categoría en la que estaba como finalista, Logros de toda una vida, y otro, en la categoría Premio Popular, elegido por el público.

La doctora en bioquímica, Margarita Salas, natural de Canero-Asturias, trabajó en la Universidad de Nueva York donde fue discípula del Premio Nobel Severo Ochoa y donde adquirió los conocimientos y experiencia necesarios para liderar posteriormente el primer grupo de investigación en genética molecular en España en el Consejo Superior de investigaciones Científicas (CSIC). Era finales de los años sesenta y en ese contexto descubrió un mecanismo de secuenciación de ADN que causó una innovación disruptiva en aquella época. En sus trabajos demostró que un virus bacteriano llamado phi29 podía crear la enzima phi29 ADN polimerasa, la aisló y demostró su funcionamiento en células humanas. Con esta enzima se pueden ensamblar moléculas de ADN de manera rápida y precisa. Este fue el comienzo de las pruebas de ADN tan utilizadas hoy en día en pruebas médicas, forenses, arqueológicas y criminalística.

A raíz de estos estudios surgió la que ha sido la patente más rentable de la historia del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). La patente ES2103741T, que lleva por título “Reacciones de síntesis de DNA (in vitro) que emplean DNA polimerasa de Phi 29 modificada y un fragmento de DNA que codifica dicha polimerasa”.

 

 

“Margarita Salas es una pionera en el campo de la genética molecular y una referente para todas las mujeres en la ciencia”, dijo el presidente de la OEP, António Campinos. “Su trabajo ha puesto la secuenciación de ADN al alcance de muchos más investigadores y científicos, y ha allanado el camino para nuevos avances en genética.”

Lamentablemente, Margarita Salas falleció unos meses después de recibir ambos galardones, pero su gran legado y su ejemplo de trabajadora incansable nos quedará siempre.

En la categoría de industria de la edición 2019, los inventores españoles Antonio Corredor y Carlos Fermín Menéndez fueron finalistas por su invención consistente en un molde reutilizable para crear bloques de hormigón para la fabricación de Cubipods en diques y espigones de costas, para la protección de puertos y costas, obteniéndose una construcción rápida y ahorrando costes de construcción (EP2202361  B1).

Los diques rompeolas imitan la función de protección de los cabos y arrecifes naturales, y por lo general se construyen colocando de manera aleatoria grandes bloques de cemento en forma cúbica. Con estos bloques se consigue disminuir la potencia de las olas, reduciendo la erosión y protegiendo los barcos y servicios marítimos en los puertos y salvando vidas en caso de catástrofes producidas por tormentas. Sin embargo, los bloques son cúbicos con los lados planos y tienden a pegarse entre sí, haciendo desaparecer los huecos y formando una estructura compacta que se convierte en una rampa para las olas. Con el nuevo Cubipod, un bloque con protuberancias en cada cara desarrollado por la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) se encontró la solución, una pieza con buen comportamiento hidráulico y con las ventajas de producción que ofrecía el cubo convencional.

Antonio Corredor y Carlos Fermín, que trabajaban en la empresa de construcción marítima SATO, filial de OHL, diseñaron el molde reutilizable para fabricar estos elementos de manera industrial, consiguiendo así diques más eficientes y baratos, que bautizaron como Cubipods tras registrar la marca.

La producción in situ resulta un factor crítico ya que los diques rompeolas están formados por miles de Cubipods y su trasporte resultaría muy costoso. El molde metálico patentado se rellena de hormigón hasta que se solidifica formando los bloques y ahorra espacio al ser retirado ya que se levanta hacia arriba y de esta manera puede reutilizarse rápidamente permitiendo la fabricación de varios bloques en poco tiempo.

El Cubipod se utilizó por primera vez en el puerto de Málaga en 2011, y a partir de ahí se puede ver en otros puertos como el de A Coruña, Las Palmas de Gran Canaria, y Lanzarote entre otros.

Durante la ceremonia de entrega del Premio, Antonio Campinos, actual presidente de la OEP dijo: “La invención de Corredor y Menéndez ha sido un factor crucial para el Cubipod sea económicamente viable para la industria. Su trabajo muestra cómo las universidades y las empresas pueden trabajar juntas otorgando licencias de propiedad intelectual”.

Por último, Carmen Hijosa, nacida en Salas, pueblo asturiano que además da el apellido a la bioquímica Margarita Salas, es finalista del Premio Inventor Europeo de este año en la categoría PYME. Su innovación es un nuevo textil, sustituto del cuero por su apariencia y textura casi idénticas, pero hecho con los desechos de las cosechas de la piña. Se trata de un tejido natural, suave, duradero, resistente al agua y versátil, que produce un menor impacto medioambiental. El nombre comercial del material es Piñatex® y la empresa que lo produce, Ananas Anam Ltd.

Con este material se consigue dar uso a un subproducto de la cosecha local de piñas de Filipinas y ofrece un ingreso extra a los agricultores de la zona.

La inspiración le llegó de los textiles tradicionales tejidos a mano de Filipinas, país en el que trabajaba como consultora de diseño textil. Allí vio que se utilizaban fibras de hojas de piña y empezó a ser consciente de los extensos recursos naturales que se utilizan en la industria del cuero, desde la cría del ganado hasta el proceso de curtido con un alto contenido químico y su consecuente riesgo de contaminación. Además, las condiciones de trabajo en las curtidurías no eran aceptables, y ver que las alternativas de cuero sintético también afectaban por igual al medio ambiente y a la salud humana, la impulsó a dar un giro radical a su enfoque empresarial desarrollando un nuevo textil sostenible.

Este textil se produce mediante la purificación de las fibras de celulosa de las hojas y el procesamiento en un material no tejido similar al fieltro que posteriormente se malla, se lava, se tiñe, se prensa, seca y ablanda para posteriormente plancharse y así, poder utilizarse en una amplia gama de productos (EP2676881 A2).

Fuente de las fotos: página web de Ananas Anam Ltd

 

Este año, por primera vez en la historia del Premio Inventor Europeo y debido a la situación de pandemia, la ceremonia se llevará a cabo en un formato de realidad extendida e incluirá animación 3D. La retransmisión será en abierto, el día 17 de junio a partir de las 19:00 sin necesidad de inscripción, permitiendo a los espectadores de todo el mundo seguir el evento y conocer la historia de quince innovadores excepcionales.

Cinco galardones y un Premio Popular, este último, lo decidimos entre todos mediante votación popular permitida una vez al día hasta 15 minutos antes de entregar el galardón.

¿Quieres formar parte de este inmenso y magnífico jurado? ¡Anímate y vota!

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