La Innovación española en Alternativas Alimentarias

En los últimos años, hemos sido testigos de cambios significativos en las tendencias alimentarias a escala mundial. El 25 de septiembre de 2015 los Estados miembros componentes de la Asamblea General de la ONU adoptaron la denominada Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Dicha Agenda plantea 17 Objetivos con 169 metas de carácter integrado e indivisible que abarcan las esferas económica, social y ambiental. Entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) directamente relacionados con el sector alimentario se pueden citar el relacionado con el hambre cero (ODS2), el relativo a la salud y bienestar (ODS3), así como los vinculados a la producción y consumo responsables (ODS12) y a la acción por el clima (ODS 13). Estos objetivos establecidos por las Naciones Unidas pretenden ser el motor que impulse los cambios necesarios en la forma en que producimos, distribuimos y consumimos alimentos.

Fuente: Ministerio de Asuntos Sociales, Consumo y Agenda 2023

Adicionalmente, la creciente conciencia sobre el impacto que nuestra dieta tiene sobre factores como la salud, la sostenibilidad y el bienestar animal, ha llevado a cambios en la oferta de productos por parte del mercado y en las preferencias demandadas por el consumidor hacia opciones que hace unos años ni siquiera imaginábamos. Los más conocidos son los análogos cárnicos a base de plantas, que buscan imitar la estructura, color y aroma de una carne tradicional de origen animal. Igualmente, cuando hablamos de alternativas alimentarias, también tienen cabida los filetes de carne cultivados en laboratorio o incluso alimentos obtenidos a través de la transformación de residuos industriales.

La variedad de opciones que existen hoy en día es cada vez más amplia, y en respuesta a las tendencias y demandas del mercado, en España son muchas las empresas, startups e instituciones gubernamentales que invierten en la investigación y desarrollo de tecnologías destinadas a ofrecer alternativas alimentarias innovadoras. En este contexto, han sido muchas las organizaciones que han decidido beneficiarse de los aspectos que proporcionan los títulos de propiedad industrial. Específicamente, las patentes juegan un papel crucial para proteger las invenciones tanto de productos como de procedimientos innovadores en el campo técnico de las alternativas alimentarias. Al proporcionar una protección legal e incentivos económicos a través de derechos territoriales y temporales, las patentes garantizan a sus titulares la seguridad de una compensación por el esfuerzo e inversión realizados en I+D.

Por otro lado, las patentes no sólo benefician a sus titulares, sino que también aportan al público general toda la información sobre las nuevas tecnologías de las que tratan. La divulgación de estos conocimientos contribuye al avance general de las nuevas tecnologías, haciendo más fácil el intercambio de ideas ente diferentes investigadores y diferentes áreas técnicas, generando nuevas oportunidades de colaboración, creatividad e innovación, a la vez que se promueve así la prosperidad económica y el desarrollo tecnológico de nuestro país.

En este contexto, la empresa navarra COCUUS desarrolla soluciones industriales para la producción de análogos de proteína animal, vegetal o celular mediante la impresión láser 2D/3D, bioimpresión y mecatrónica. En el marco del Programa de Iniciación a la Exportación ICEX Next, COCUUS ha contado con el apoyo de ICEX y con la cofinanciación del fondo europeo FEDER. También ha sido subvencionado por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (Fuente: HOME – Cocuus).

COCUUS tiene actualmente en vigor una patente española (ES2933103B2) que tiene por objeto de protección un dispositivo extrusor de alimentos, el cual permite la impresión 3D de alimentos a gran velocidad para conseguir producir estos alimentos a escala industrial.

El dispositivo extrusor de alimentos objeto de patente está caracterizado por comprender al menos dos embutidoras, donde cada embutidora está conectada con un módulo de extrusión por medio de al menos un conducto, donde cada embutidora está configurada para impulsar una sustancia alimenticia a través del al menos un conducto que conecta cada embutidora con el módulo de extrusión, y donde el módulo de extrusión está configurado para extruir la sustancia alimenticia procedente de cada embutidora a través de respectivas salidas del módulo de extrusión.

En cuanto a la producción de carne cultivada en laboratorio, Biotech Foods es una empresa que utiliza tecnologías avanzadas para desarrollar carne a partir de células animales sin necesidad de criar o sacrificar animales. Tiene su sede en San Sebastián, y ha recibido subvenciones del proyecto Meat4All financiado con fondos europeos, un proyecto que busca mejorar la industria europea de la carne aumentando la competitividad y desarrollando el elevado potencial del mercado de la carne cultivada (Fuente: https://cordis.europa.eu/project/id/958660/es).

Biotech Foods ha presentado varias patentes en España dentro del marco del Tratado de Cooperación en materia de Patentes (PCT), cuyos efectos podrían ser válidos a nivel internacional. La solicitud de patente con publicación internacional WO2021/250290A1 se refiere a un método para la síntesis a gran escala de una matriz tridimensional (3D) macroporosa comestible y esterilizable con vapor caliente que comprende polímeros biocompatibles con poros interconectados como un material de soporte para el crecimiento, la proliferación y la diferenciación de células adherentes, que puede ser utilizada para tejidos diseñados in vitro, también conocidos en la técnica como carne cultivada, carne de base celular, carne celular y/o carne limpia. Estas matrices son adecuadas para soportar el crecimiento de tejido celular para aplicaciones biomédicas o alimentarias.

Otra solicitud de patente de Biotech Foods (WO2021/250292A1) se refiere a un proceso para la producción de tejidos diseñados in vitro y un dispositivo para la producción de los mismos. El proceso para la producción se caracteriza por comprender, entre otras, las etapas de cargar matrices tridimensionales esterilizables en el interior de una cámara de siembra, esterilizar las matrices, sembrar las matrices cargando un primer volumen del medio de cultivo en la cámara de siembra y otro segundo volumen del medio de cultivo en un biorreactor, en donde una posición de incubación de una o más rejillas en el interior del biorreactor acota las matrices al segundo volumen de cultivo, de forma que permanecen sumergidas durante una etapa de incubación.

Otra empresa destacada en el ámbito de alternativas alimentarias es Novameat, una startup con sede en Barcelona especializada en tecnologías de impresión 3D de alimentos. La empresa ha investigado y desarrollado la creación de alternativas cárnicas a base de plantas con texturas y propiedades similares a la carne convencional.

Novameat ha presentado una solicitud de patente (WO2020/030628A1) en el marco del Tratado de Cooperación de Patentes (PCT). La solicitud divulga productos comestibles microextruidos con módulo de elasticidad longitudinal (módulo de Young) similar a las propiedades mecánicas de la carne, lo que implica que presenta una textura y propiedades que pueden recordar a la carne tradicional. Dichos productos comprenden varias capas de elementos microextruidos hechos de una composición viscoelástica que comprende un disolvente, alto contenido proteico y un polímero pseudoplástico comestible. La invención de Novameat divulga también procesos particulares para obtener tales productos mixroextruidos, en particular un método de impresión 3D. También se enumeran los usos particulares de estos productos comestibles, incluido el uso como sustitutivos de la carne.

La empresa murciana Agrosingularity se dedica a producir ingredientes en polvo a partir de productos y subproductos vegetales, frutas y hortalizas no valorizadas.

Recientemente se ha publicado la solicitud de patente nacional de Agrosingularity ES2957538A1, que tiene por objeto el procedimiento de obtención de un ingrediente alimentario con fibra dietética, a partir de un subproducto agroalimentario, que comprende una limpieza del subproducto, una deshidratación, una pasteurización, una micronización, un tratamiento enzimático, evaporación del agua, y envasado. La solicitud de patente también se refiere al ingrediente alimentario con fibra dietética, obtenido mediante dicho procedimiento, que comprende una relación entre fibra soluble e insoluble mayor que la relación existente en el subproducto original, siendo la cantidad de fibra soluble entre 2 y 5 veces superior a la del subproducto original y donde, la cantidad de ingrediente obtenido en peso está comprendida entre un 80 y 95 % del peso del subproducto inicial.

Por último, se ha de mencionar a un organismo público de investigación tal y como es el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que encabeza la clasificación en cuanto al número de solicitudes de patentes nacionales, y también de solicitudes españolas presentadas en la Oficina Europea de Patentes.

Actualmente, el CSIC mantiene en vigor una patente en España (ES2369102B1) concerniente a un procedimiento de obtención de productos cárnicos con algas, mediante la incorporación de algas y complementariamente con la reducción de los niveles de sodio y/o una mejora en el perfil lipídico provocado por la sustitución de grasa animal por otra de origen vegetal y/o marina.  

La innovación en alternativas alimentarias está en pleno auge en España, marcando el camino hacia el futuro alimentario. Estos avances representan no solo oportunidades comerciales significativas, sino que también reflejan el compromiso colectivo para la creación de un sistema alimentario innovador en nuestro país. En este contexto, la propiedad industrial desempeña un papel crucial tanto por su papel como instrumento legal de protección del esfuerzo innovador como por su función de diseminar información tecnológica de vanguardia del sector alimentario, reflejando el avance continuo y la innovación en este campo.

María Martínez García

Programa de Jóvenes Profesionales de la Oficina Europea de Patentes (EPO)

 

 

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