Las mejores invenciones del año 2014 y sus patentes (1ª Parte)

Como todos los años la revista TIME ha elegido en noviembre las que según su criterio son las 25 mejores invenciones del año.  A continuación se analizan algunas de ellas haciendo referencia a los documentos de patente correspondientes.

El monopatín que levita

El “hoverboard” o “monopatín que levita” es un sueño hecho realidad. Permite experimentar algo que ya se ha visto en la ficción, en concreto en la película “regreso al futuro II”.  Su inventor es Greg Henderson, un arquitecto estadounidense que fundó una pequeña empresa tecnológica en “Silicon Valley” destinada a investigar medios para proteger las viviendas de los terremotos y las inundaciones. Su principal línea de investigación estaba dirigida a conseguir la levitación de las viviendas en caso de emergencia, mediante un campo magnético. Decía que si es posible hacer levitar trenes de 15 toneladas, ¿por qué no va a ser posible hacer levitar viviendas unifamiliares? Partiendo del principio de que es necesario crear una fuerza vertical ascendente equivalente a la fuerza de la gravedad, diseñó un monopatín que levita gracias a unos imanes permanentes que giran sobre un material conductor. De momento, el monopatín para poder levitar tiene que situarse sobre una superficie conductora (normalmente cobre o aluminio) y la batería sólo dura 15 minutos, pero es el principio de lo que parece un medio de transporte muy prometedor. Lo comercializa la empresa “Hendo” .

La invención es el objeto de una solicitud de patente internacional PCT, de número WO2014149626, con informe de búsqueda positivo.

La electricidad transmitida sin cables

El objetivo de la invención es equiparar la transmisión de la energía eléctrica a lo que ya se disfruta actualmente en las comunicaciones; WIFI, teléfonos móviles. La invención la ha desarrollado la compañía “Witricity”, con un nombre muy evocador. La tecnología se basa en la utilización de campos magnéticos que transmiten energía a circuitos diseñados para resonar con ellos, con pérdidas de sólo un 10%. El alcance es muy pequeño (menos de 1 metro), a diferencia de lo que predijo Tesla (que sería posible la transmisión de energía eléctrica a kilómetros de distancia sin cables),  pero permite que los vehículos se carguen al situarse sobre esos dispositivos emisores,  sin necesidad de enchufe alguno. Se está probando con coches eléctricos en Toyota, para la carga de ordenadores portátiles y se prevé que en 10 años se podrá utilizar en todo el ámbito doméstico.

Son numerosos los documentos de patente que protegen esta tecnología. En el documento de patente US2014327320 se divulga un calzado que obtiene la energía eléctrica mediante esta tecnología para accionar un sistema de calefacción en el interior de dicho calzado.