Mitos, leyendas y supersticiones en el mar

Acabo de leer en el interesante blog “Historias de la Ciencia” un post sobre el libro “Mitos y leyendas del mar” de Peter D. Jeans que relata multitud de anécdotas, mitos y leyendas relacionadas con el mar. Les recomiendo que lean el post completo y el libro. Copio a continuación algunos párrafos que me parecen interesantes y curiosos.


» Durante la Segunda Guerra Mundial, el crucero ligero HMAS Perth regresó a su puerto base de Australia para someterse a unas reparaciones, después de sufrir daños en la campaña de Creta. Una vez reparado, recogió a una tripulación de recambio en Fremantle y zarpó rumbo a Singapur a las doce y algunos minutos de la noche del viernes al sábado 14 de febrero de 1942. La armada había retrasado su salida para que no zarpara el viernes trece. Cuando el Wellwsley se hizo a la mar en un similar y fatídica fecha, la Armada lo hizo regresar de inmediato y obligó al capitán a esperar al día siguiente.»

“El primer lunes de abril es consideraro mal día para hacerse a la mar por la creencia de que no sólo fue el día en que nació Caín, sino también el día en que mató a su hermano Abel. Tampoco se considera buen día el segundo lunes de agosto porque fue cuando la ira divina arrasó con Sodoma y Gomorra. Tampoco el 31 de diciembre es un buen día, pues según la tradición popular fue el día elegido por Judas Iscariote para ahorcarse. Hasta el miércoles en inglés “Wednesday” viene de Wodin’s day, dia de Wodin, el dios nórdico protector de los navegantes. Los féretros y las flores no eran bienvenidas a bordo pues se consideraba que eran para los funerales; o llevar paraguas en un barco estaba mal visto porque podían provocar a los dioses.»

«También habla de los piratas. De joven, Gaius Julius Caesar navegaba hacia Rodas para estudiar derecho, cuando su barco fue abordado por “gente del mar”, le secuestraron y pidieron un rescate. Sus amigos pagaron dicho rescate, pero César reunió inmediatamente unos barcos de guerra y persiguió a los piratas; cuando los capturó, los crucificó a todos, como ya les había advertido. A las mujeres que piensen que sería muy romántico ser capturada por los valerosos piratas, lo deberíais pensar dos veces, ya que cuando una mujer era capturada la violaban en cubierta para más tarde arrojarla por la borda. Muchas veces mataban a sus prisioneros, o los arrojaban por la borda o los abandonaban en una balsa en medio del océano o dejaban en una isla desierta. Uno de los abandonos intencionados más famosos es el del escocés Alexander Selkirk en 1705. Puede que su nombre no os suene, pero si os digo que fue rescatado 4 años después y sus aventuras fueron la base para que Daniel Defoe escribiera Robinson Crusoe, ya os sonará más.»

«Un sorprendente relato es el de James Bartley, un timonel de un ballenero que cayó directamente en las fauces de una ballena cuando la perseguían para arponearla. El animal cerró la boca y se sumergió en el mar. Al día siguiente apareció en la superficie el cuerpo de un cachalote macho recién fallecido. Era un animal muy grande y la tripulación pasó dos días despellejándolo. Alguien de a bordo comentó que tal vez fuera el animal que se había tragado a Bartley, pues tenía una herida parecida a la que le habían hecho a aquel animal. Con reticencia, los despellejadores llegaron hasta el estómago y lo abrieron. Efectivamente, vieron una gran masa de gambas y otros pequeños animales junto a un gran bulto con una forma vagamente humana. Era el cuerpo ensangrentado de Bartley con el rostro violáceo. Tardaron cinco horas en reanimarlo. Cuando despertó parecía estar completamente loco, gritando y agitándose hasta tal punto que tuvieron que atarle en su catre. Hablaba incesantemente del fuego que le había estado consumiendo. Hay que tener en cuenta que la temperatura corporal de la ballena es superior a la del hombre y alguien en ese estómago tendría la sensación que le están asando vivo. Después de esta experiencia, no pudo volver a quedarse solo, nunca volvió a practicar la pesca de la ballena, incluso se negaba a mirar el mar.»

«Explica que la botella de champán que se rompe antes de la botadura de un barco no estaba antes asegurada con un cordón como en la actualidad. Eso es debido a que en una ocasión, a una dama de alta sociedad le falló la puntería y dio a un espectador que denunció al almirantazgo.»

¿Sabían que los plátanos dan mala suerte en los barcos?  ¿Y que, los marineros consideraban que traía buena suerte tener un gato negro a bordo, aunque no se podía pronunciar la palabra «gato», pues hacerlo acarrearía grandes desgracias.? Además, Las mujeres de los marineros solían tener un gato negro en casa para asegurarse de que sus maridos volverían sanos y salvos.

Si quieren una lista de supersticiones marinas en inglés, les recomiendo este enlace.

Y aquí en castellano

Lean el libro. Siempre se aprende algo más.

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3 comentarios

  1. Creo que a los lectores de este blog les puede interesar asomarse al grupo de "Periodismo científico y divulgativo" ya que sus puntos de vista son bastante clarificadores, y los informadores y divulgadores de ciencia siempre agradecen colaborar con especialistas. A quien se anime puede acceder a través del enlace

    http://www.linkedin.com/groupRegistration?gid=1791695

    Un cordial saludo

  2. gracias por la informacion me ha servido de gran interes cultural ya que quiero estudiar ca`pitan de la marina mercante y aunque no sea supesticioso me gusta conocer las que existen referente al mar chao

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