La Comisión propone utilizar incentivos fiscales para favorecer la investigación y el desarrollo

El pasado 22 de noviembre de 2006 la Comisión Europea adoptó una nueva Comunicación sobre un uso más eficaz de los incentivos fiscales en favor de la I+D con el objetivo de favorecer la inversiones en este terreno, reforzando la creación de empleos y el crecimiento económico en Europa.

En los últimos años este tipo de incentivos ha sido utilizado frecuentemente por los Estados miembros. Paralelamente, la industria ha adoptado un modelo de innovación abierto y la cooperación transfronteriza se ha generalizado, en particular en el sector de la alta tecnología. Sin embargo, la diversidad de los planteamientos nacionales a nivel fiscal está provocando que cada Estado miembro aplique los incentivos de forma independiente, y que no exista una harmonización a escala europea.

Con esta nueva Comunicación la Comisión pretende clarificar y homogeneizar las reglas aplicables a este tipo de incentivos fiscales, con el fin de ofrecer a los inversores una mayor transparencia y claridad.  Con el uso de estos incentivos la Comisión desea también facilitar la movilidad de los investigadores, atajando problemas como la doble imposición o favoreciendo la exención fiscal de los gastos derivados de esta movilidad.

En cuanto al alcance territorial de estos incentivos, la Comisión precisa en su Comunicación que los incentivos fiscales que limiten el beneficio de una medida de estas características a las actividades de I+D realizadas en el territorio nacional serán consideradas como incompatibles con el tratado CE.

La Comunicación también llama la atención sobre la posibilidad de que un incentivo fiscal que se limite a un grupo o sector particular pueda ser considerado como una ayuda estatal, en cuyo caso también es necesario que se respeten las reglas al respecto establecidas en el Tratado.

Por último la Comisión establece los principios directores que deben respetar estos incentivos fiscales:

–         Ser fácilmente accesibles a un gran círculo de empresas de I+D

–         Comportar reglas simples y costes administrativos y de conformidad reducidos

–         Prever las reglas de evaluación

–         Ponerse en marcha en el tiempo adecuado, de manera eficaz y previsible.

Según László Kovács, Comisario de Fiscalidad y Unión Aduanera, la «I+D es vital para nuestra economía y competitividad en este mundo cada vez más globalizado«, por lo que es necesario adoptar medidas adecuadas para lograr una mayor inversión. Con estas medidas la Comisión pretende alcanzar el objetivo de invertir el 3% del PIB en I+D de aquí al 2010.