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Sobre archivos fotográficos y la conservación de la fotografía
¿Para qué sirve un archivo fotográfico?

Juan Miguel Sánchez Vigil
El estado de la cuestión sobre la fotografía en los archivos es ciertamente motivo de debate. Durante este mes se han celebrado y celebran varios encuentros en los que este tema surge por los cuatro costados o los cuatro puntos cardinales. Fue tratado en los III Encuentros de Historia de
La conversación mantenida con Leopoldo Zugaza, presidente del Photomuseum de Zarautz, sobre estas cuestiones me lleva a plantear varias preguntas a los lectores con el fin de reflexionar sobre el asunto. De las respuestas tal vez saquemos conclusiones que nos servirán de referencia para plantear o solicitar a quien corresponda las políticas de actuación para romper con la…. ¿desidia?
Hace apenas unos meses planteaba yo en
Lanzo pues las cuestiones:
¿Es necesario conservar todas las fotografías?
¿De qué vale que conservemos cien copias iguales en distintos centros?
¿Para qué sirve un archivo fotográfico?
¿Debe exigirse de
¿Son conscientes los responsables de los centros del material que conservan?
Punto y aparte. Su turno…
A mi juicio creo que es importante mantener las fotografías y conservar, de esta manera, un archivo fotográfico importante, al igual que se recurren a textos para investigaciones, observaciones o trabajos, entre otros, muchas de las veces también hay que completarlos con fotografías, además pueden ser un fiel reflejo de algo que sucedió en el pasado o que actualmente ocurre y por lo tanto se puede aprender mucho de ellas.
Las fotografías pueden tener mucho valor dependiendo de aspectos como la antiguedad o la calidad, por ello es necesario que las conservemos.
– Mi opinión relacionada con la primera cuestión merece un sí, pero también un no. Todo lo que sea información útil debe ser conservado. Nunca se sabe cuando nos va a hacer falta echar mano de cualquier documento y para qué, por ello nunca esta demás conservarlos, incluidas las fotografías. Aun así, nunca está demás hacer una selección de las fotografías que son realmente necesarias y que aporten información más o menos relevante.
– En cuanto a la segunda cuestión, exclamo con un notable sí. En general, la información tiene estar al alcance de todos y en cuantos más sitios se halle, más facilidades tendrán los curiosos de encontrarla. Además, ¿no hacemos copias de seguridad de nuestros trabajos para prevenir posibles pérdidas? Lo mismo ocurre en el caso de las fotografías, pienso yo. Cuantas más copias, mejor.
– Un archivo fotográfico es otro tipo de documento informativo, por lo que es totalmente necesario. Igual que consultamos enciclopedias, testimonios, bases de datos… Los archivos fotográficos cumplen la misma función a la hora de aportar información, incluso, desde mi modo de ver, si el fotógrafo es bueno resulta mucho más ameno.
– Como ya decía antes, todo tipo de información no debe, sino que tiene que estar al alcance de todos. Todos tenemos derecho a querer saber y conocer nuestra historia y a satisfacer nuestra curiosidad. Se debe facilitar este derecho al máximo así que debería ser un bien al servicio del público.
– Seguramente no y no sólo que no tienen conocimiento de todos los materiales que poseen, si no que probablemente escasean de un montón de buenas obras que no se dieron a conocer, como son obras de fotógrafos anónimos, exiliados, censurados… y tampoco de ello tienen conocimiento.
La fotografía es un DOCUMENTO
El documento es INFORMACION
La información es IMPORTANTE
Lo importante tiene que estar VERIFICADO
Lo verificamos mediante un SOPORTE
Una fotografía puede ser todas estas cosas, y digo puede porque al igual que en los documentos escritos, unas serán desechables, según determinen los documentalistas encargados de tal tarea.
Por lo tanto respondo así a la primera pregunta: ¿es necesario conservar todas las fotografías?
NO. Obviamente, hay fotografías que no sirven para ningún tipo de estudio, hablamos de conservar fotografías de interés para el público y/o investigaciones. Tarea, por cierto, difícil de llevar a cabo.
A la segunda pregunta: ¿de qué vale que conservemos cien copias iguales en distintos centros?, hay que pensar en el riesgo de que un centro, imaginemos: el único que posee esos documentos, sufra un incendio, derrumbamiento, inundamiento o cualquier otro desastre. Se hace necesario, al igual que con los demás archivos y documentos tener copias de seguridad.
¿Para qué sirve un archivo fotográfico? Para verificar y complementar documentos escritos, para dar constancia de una realidad plasmando lo que era la realidad en sí, que nunca llegaríamos a conocer igualmente por muchos textos o descripciones que leyéramos.
La cuarta pregunta: ¿debe exigirse a la administración que haga públicos realmente los fondos de que dispone? Por supuesto que SI. ¿Por qué motivo no lo harían? Es un tipo de documento, transmite información, debemos tener acceso a ellos.
A la última pregunta: ¿son conscientes los responsables de los centros del material que conservan?, no se muy bien cómo contestar. DEPENDE de cada centro supongo. Si tuviera que generalizar me atrevería a decir que no, y los que sí tienen consciencia de ellos han realizado exposiciones de fotografías , lo cual me parece muy interesante y acertado.
Voy a intentar responder a las preguntas con ejemplos porque creo que es la mejor forma de explicarse.
Primero: ¿es necesario conservar todas las fotografías?
En la medida en que aporten información.
Por ejemplo, sales una noche de fiesta y sacas 354 fotos, te levantas a la mañana y las miras, la verdad es que hay muchas parecidas pero no vas a borrar ninguna ¿por qué? Porque no son iguales, cada una muestra un minuto, un segundo diferente de tu noche, muestra lo bien que lo has pasado, con quien has estado, que has hecho… y te hace recordarlo todo, pero si alguna sale borrosa o no enfoca a nada entonces esa la borrarás.
Sé que en el caso de las fotografías en los archivos no es exactamente lo mismo porque las que no aporten nada sólo ocuparán lugar innecesariamente, pero quiero decir que las fotografías normalmente son diferentes unas a otras y aportan nueva información.
¿De qué vale que conservemos cien copias iguales en distintos centros?
Continúo con el ejemplo anterior. Tras esa fiesta tienes tus 354 fotos y en esas fotos salen tus amigas asique te dan su memoria para tenerlas ellas también ¿por qué? Porque así cuando quieran verlas y recordar los momentos captados, la información que recogen, las tendrán rápidamente a su alcance.
De la misma manera si hay copias en distintos centros el usuario tendrá mayor facilidad para poder usarlas.
¿Para qué sirve un archivo fotográfico?
Sirve para dar información o mejorar la información transmitida por otro documento.
Por ejemplo: lees un documento que habla sobre la gran pobreza y sobre el hambre en África, si, te parece algo terrible pero si a la vez añaden una imagen de un niño casi en huesos acurrucado en el suelo sin poder moverse mientras un buitre se acerca a él con intención de comérselo…la cosa cambia, la información te llega mucho más.
¿Debe exigirse de la Administración que haga públicos realmente los fondos de que dispone?
Aquí no puedo emplear ningún ejemplo. Pero creo que sí, que los fondos deben ser públicos para que todos tengamos acceso a ellos porque para eso están, para servir de utilidad tanto a estudiosos como a cualquier persona interesada, si la información no es completa no nos servirá.
¿Son conscientes los responsables de los centros del material que conservan?
Supongo que en los centros habrá tal cantidad de material que llega un momento en que los responsables no tienen mucha idea de lo que hay. No son conscientes de todo lo que tienen.
Esto sucede por el alto crecimiento de documentos e información que se produce día a día y que se lo pone muy difícil.
Es irremediable no empezar este comentario, aunque seguramente ya haya sido nombrado por alguno de mis compañeros, con el popular dicho ”Más vale una imagen que mil palabras”,los archivos fotográficos son importantísimos desde muchos aspectos pero el que más resalta ,es, su papel vital en a historia.
Gracias a la imagen hemos conseguido obtener un archivo histórico muy amplio del que se pueden no solo sacar información sobre sus protagonistas ,lugares, acciones…..si no que se les puede poner caras ,hacernos nosotros mismos una imagen mental de cómo ocurrió, donde ,el qué.
Creo que eso es muy importante, aparte de que la historia narrada se puede contar desde muchos enfoques y nunca llegas a saber si es totalmente cierto lo que estas leyendo o lo que te están contando, fotografía inmortaliza los hechos y aunque no lo hace con las causas que las producen, digamos que materializan algo que ha sido real, y que no ha sido inventado. Ninguna fotografía es desechable, ya que brinda una gran información, cada detalle cuenta a la hora de analizarlas, y aunque parezcan que son iguales ,porque han sido hechas en el mismo sitio y en la misma ubicación con una de dos segundos no lo son a la hora de analizarlas.
Respecto a el almacenamiento de Fotografías en distintos centros e instituciones, yo considero que en los tiempos que corren es necesario, ya que hay mucha manipulación por intereses, y aunque se difícil que se produzca el caso, es mejor guardar varias copias, para si llega el momento se pueda aclarar la situación. Por otra parte es importante la copia de estas fotografías como en los documentos, en mira a un desastre natural o cualquier otra circunstancia que pueda eliminar estos archivos
Somos nosotros, todos, los que generación tras generación vamos dando forma a la historia por lo tanto esos documentos fotográficos deberían estar al alcance de todos, pero ante esto se levanta un problema sobre la privacidad de las personas ,el respeto sobre ellas o sobre los que sufrideros los hechos plasmados .Si todo el mundo tuviese acceso a esos archivos, sería imposible controlar a que causa o acción van dirigidos , y para que fin van a ser utilizados, pudiendo perjudicar a personas que lo único que han hacho es ser protagonistas de su propia historia.
1. Merece la pena conservar las fotografías ya que son una muestra del pasado.
Pienso que es mayor el recuerdo que podemos tener a través de una imagen que a través de un documento. En cualquier momento podemos echar mano de las fotografías, ya sea por necesidad o por puro entretenimiento.
En cuanto a conservar todas las fotografías o sólo unas pocas, considero que cualquier mínimo detalle contribuye también a mantener vivo ese recuerdo.
2. Decir cien es mucho, pero no estaría mal guardar dos o tres copias. Nunca se sabe qué va a pasar con las originales, ya que las podemos perder o se pueden deteriorar.
3. Un archivo fotográfico sirve para guardar todas esas imágenes que forman parte del recuerdo. Estas imágenes pueden estar referidas tanto a acontecimientos personales como a otros de carácter histórico o demás.
4. Pienso que la posibilidad de poder acceder al recuerdo ha de estar al alcance de todos. Además es algo que favorece a la Administración, ya que si ésto no ocurriera, esta institución no alcanzaría tanta relevancia, y lo que es más importante, la gente no tendría conocimiento alguno de todo aquello que forma parte de nuestra historia.
5. Deben ser conscientes ya que la documentación que almacenan en esos archivos representa circunstancias y momentos que contribuyen a la historia. Con ello podrán dar a conocer futuras generaciones y analizar la evolución que el mundo ha tenido.
Un archivo fotográfico no deja de ser imprescindible, por lo menos para mí, aunque sea sólo por su valor histórico,de recuerdo y testimonio…
Sobre su privacidad,es algo que debería discutirse con la fuente de esas fotografías,ya que en muchos casos provienen de familias y son valiosos recuerdos de generaciones pasadas.
Además de todo esto,no estaría nada mal la organización de exposiciones sobre este material…sobre todo aquellas de temática de comparación…porque,¿quién no se sorprendería de ver una foto de la Gran Vía hace cincuenta años,y al lado una de la actual, la que todos pateamos a veces a diario, sin darnos cuenta?
Tras leer esto, yo me pregunto: ¿Es necesario conservar los recuerdos de nuestros antepasados? ¿ y los nuestros propios? Y a la vez, me respondo a mi misma: Es necesario tanto queramos aprender un poco de lo que ocurrió antes de que nosotros llegásemos a este mundo, es necesario tanto como queramos conocer más sobre el mundo en el que vivimos, es necesario si queremos recordar en un futuro todo esto que vivimos, ES NECESARIO…No creo que necesite mas explicación.
Contestando a la segunda pregunta, no creo que sea imprescindible guardar 100 copias, pero unas cuantas sí, para asegurar su permanencia aquí, ya que millones de cosas podrían pasar, por lo que siempre es bueno tener más de una copia, mas de dos y mas de tres.
Un archivo fotográfico sirve para guardar todas aquellas imágenes que han formado y forman parte de nuestra vida, sirve para guardar nuestros recuerdos en forma de imagen, y así que en un futuro puedan verse y recordarse aquellos acontecimientos, hechos o personas.
Todas estas imágenes, creo que es justo que puedan estar alcance de todos y cada uno de nosotros, ya que si nosotros formamos parte del mundo, ¿Por qué no tenemos derecho a poder ver que ocurrió, que se hizo y por que, en el?
No se si serán conscientes los responsables de los centros, pero deben de serlo, ya que tienen a su cargo miles de imágenes que constatan todo el progreso que se ha dado en el mundo además de otra multitud de cosas, y son los responsables de que en un futuro, todo esto se pueda conocer y seguir adelante.
No es que crea necesaria la conservación de los documentos fotográficos, sino que la veo totalmente imprescindible. Las fotrografías, al igual que los elementos como libros, pinturas etc, son los responsables de que actualmente conozcamos nuestra historia, de que sepamos lo que pasó y podamos comprender mejor lo que ahora sucede. Una fotografía puede no reflejar nada, o por el contrario, ser el vivo recuerdo de un momento determinado, nos translada, nos hace ir a donde nunca estubimos.
Por todo ello, pienso que es necesario crear un archivo fotográfico, donde podamos consultar aquello que buscamos. Y más necesario aún en nuestra carrera, en la que debemos coger lo que sabemos y hemos visto antes, para mezclarlo con lo vamos adquiriéndo día a día con el objetivo de crear algo nuevo y diferente, y en este camino la inspiración que puede ofrecer la fotografía es sin ninguna duda dificil de rechazar.
¿Recuerdas lo que disfrutamos ese día? ¡Qué bien que pudimos estar todos juntos! y es que, hacía tanto tiempo que no nos reuníamos… ¡os echaba tanto de menos!. El otro día cuando viajaba en el tren, empecé a pensar en todas las experiencias que habíamos vivido ¿Te acuerdas cuando estuvimos bailando bajo la torrencial lluvia aquel martes de abril? llegamos empapados pero, ¿Y lo que nos reimos? o aquella vez que nos tiramos toda la noche cocinando para aquel concurso de comidas caseras.
Aunque no puedas responderme, me queda el consuelo de saber que cada uno de esos días fuiste felíz porque basta con mirar tu enorme sonrisa en estas fotografías que sostengo en mi mano. Fotografías que me acompañan allí donde voy porque me hacen estar más cerca de ti y es que en cada una de ellas, está representado un pedacito de nuestra vida.
Cuando te fuiste, pensé que mi vida había perdido todo su sentido; creí que ya nadie me devolvería esa sonrisa que tú tantas veces dibujaste en mí y aunque fue duro, aprendí a recordarte sin llorar para recordarte sonriendo porque así, es como te conocí y así es como tú eras. Las fotografías me ayudaron a recuperar lo que mi mente había tratado de emborronar y cuando hoy las miró, sólo puedo pensar que gracias a ti, supe sacarle el jugo a la vida.
"Una imagen vale más que mil palabras" y es que en ocasiones, basta mirar algo para recopilar la información necesaria. ¿Qué sería, por ejemplo, de una noticia sin una imagen que diese fuerza al texto?; ¿Cómo podemos saber a quien nos parecemos, si no vemos fotografías de nuestros antepasados?. Hay fotografías que impactan, fotografías que te hacen reír, fotografías que traen buenos o malos momentos…pero es vital conservar todas ellas, porque cada fotografía evoca un momento, una sonrisa, un llanto…y esas sensaciones son las que nos hacen personas.
En mi opinión, sí se deben conservar las fotografías, ya que son un bien público e histórico. El hecho de conservar tantas copias sirve, entre otras cosas, para que puedan acceder a ellas un número mayor de personas. Aunque es verdad que con la tecnología actual se pueden digitalizar las fotos, para una persona entendida en fotografía, nunca será lo mismo verla en su formato original que en una pantalla. El simple hecho de plantear estas cuestiones me hace pensar que, quienes almacenan estas fotos, no valoran realmente el significado real de estas fotografías. Estas imágenes que representan las sociedades pasadas, no son un simple objeto, sino que son un reflejo de nuestra evolución, e indudablemente nos pertenecen a todos.
Este tema de la conservación, tanto de fotografías como de documentos, es un ámbito siempre polémico debido a que ocupan un espacio y suponen una serie de responsabilidades. En el caso de la fotografía y respondiendo a las preguntas lanzadas por el autor creo que sí que es necesario guardar fotografías, es decir hacer un fondo de archivos fotográficos, valorándolas claro está y almacenando aquellas que alcancen unos niveles de interés x. Lo ideal sería poder guardar un original y una copia digital de ellas. Así todos los centros podrían acceder a las diferentes fotografías de forma rápida y segura. Sería así idóneo que la Administración hiciera públicos sus fondos, no por desconfianza si no por cuestiones de utilidad y para cubrir necesidades.
No hablamos pues de guardas miles de fotos iguales en distintos centros sino una original y una o dos copias exactas, a lo sumo, y el resto en formato digital. De esta forma cada centro será consciente del material que conserva y estaría obligado a hacer una recapitulación de todos los archivos que tiene y de poner a la disposición del resto de centros un sumario que los detalle para poder hacer siempre accesible esta información y la copia del archivo fotográfico por supuesto.
Si en muchos ámbitos de la vida nos hemos adaptado a la tecnología, éste tendría que ser otro punto de apoyo en ella. Las fotografías hay que conservarlas; una imagen vale más que mil palabras, el archivo fotográfico que poseemos es impresionante, puede resumir nuestra historia (o gran parte, más bien).Esos fondos salieron del pueblo y debería disfrutarlos el pueblo. La fotografía nos mueve, nos asombra, nos emociona… Por ejemplo, unas imágenes históricas fueron utilizadas por una campaña de publicidad que realizo Grey para la Comunidad de Madrid (“¿Qué pasaría si nunca pasara nada?”), todas esas imágenes de Madrid en distintas épocas llamaban la atención (independientemente de la polémica que se generó). La gente aprecia ver esas fotografías que tanto nos impactan.
Y es precisamente con el formato digital con el que hemos avanzado para conservar también estos archivos; los originales y alguna copia se deben mantener en papel, pero también tenemos que adaptarnos a las nuevas tecnologías, que nos facilitan esto, y así mantener copias digitales a su vez. Precisamente es Internet el mayor archivo fotográfico que tenemos a nuestro alcance. Cuando necesitamos de una imagen sobre un momento de la historia, por ejemplo, no es por costumbre irnos a un centro especializado; nos lanzamos al “click” para encontrar nuestra meta. La importancia digital cada vez tiene más peso y esto no hay que olvidarlo.
En primer lugar, creo que no es necesario conservar todas las fotografías, sólo las mas relevantes según el tema. Debería ser recogido todo el material fotográfico que haya sido publicado, en prensa escrita y publicaciones digitales para poder crear un archivo fotográfico con un cierto filtro y no incluir todas las instantáneas creadas por cualquier individuo.
La conservación de distintas copias iguales en distintos centros es una medida de seguridad para el documento. En caso de que se destruyera el original a causa del fuego, el agua u otro desastre, contaríamos con un salvavidas.
Un archivo fotográfico sirve como medio de documentación, para ser consultado y utilizado por cualquier persona. La fotografía es arte, es historia, es ciencia…
A la pregunta de si debe exigirse de la Administración que haga públicos realmente los fondos de que dispone la respuesta ha de ser tajante, rotundamente si, para poner a nuestro servicio toda la información que necesitemos de una forma ordenada y adecuada.
Creo que por regla general los responsables de los centros sí son conscientes del material del que disponen, para que esto siga ocurriendo es de gran ayuda la clasificación por temas y épocas de las fotografías. De todas formas, quizá veo más importante que se preste atención al cómo lo conservan.
Muchas veces me ha pasado de pensar que bueno seria si tuvieramos fotografias de la revoluciòn francesa, de la epoca medieval o todavia antes… desgraciadamente el hombre ha alcanzado ese desarrollo tecnològico solo al comienzo del ‘800, asì que tenemos testimonio visuales (que no se trates de pintura o escultura) solo a partir de esta epoca. Pero, relativamente cercana o lehos que sea, la fotografia constituye un fuerte legame con la realidad que representa: nos ensena lugares, tradiciones y estilos de vida. Cuenta sin palabras lo que otros hombres han vivido antes de nosotros; representa un patriomonio rico cuanto lo de los libros, aunquè mas inmediato. Por eso creo que todo tendria que ser conservado, si non en carteceo, por lo meno en digital, ahora que tenemos la suerte de desponer de tantas resorsas. Eso tambien podria resolver el problema del espacio para tener muchas copias en muchos centros: se podria redestribuir el material pero mantener una base de datos accesible a todos, asì que, según la necesidad, obtener una copia de la imagen buscada no vayas a ser asì dificil, aunquè sea conservada en un sitio muy lehos de ti. Pienso tambien que los fondos tendrian absolutamente que ser publicos, y no entiendo porquè ahora mismo no sea asì: quizàs porquè los responsables de los centros no se dan cuenta, quizàs porquè se la dan demasiado… pero al final, en cualquiera maniera, todavia, la pena es que no se consigue a disfrutar completamente del patrimonio fotografico que nos hemos heredado.
Al grano: nunca se sabe si en algún momento vamos a necesitar una fotografía o una imagen (ya sea con motivo periodístico, publicitario, homenaje, etc.) con lo cual, guardar todas sería importante (porque sino quién decide cuál es más representativa y cuál no), pero el tema de la conservación es otro punto. Debería conservarse todo en un solo lugar y en tres copias (a mi parecer). Uno digital (y que nunca se utilice), otro en diapositivas y el tercero con algún formato que pueda servir al público. Después hacer una copia de cada cosa (a partir de las 3 copias) y repartirlos entre distintos sitios. Es más o menos lo que hacemos con las fotos de casa pero en versión pequeña. Hay que tener en cuenta que, en la actualidad, tenemos más métodos de conservación y de organización (y aunque cueste trabajo) merece la pena el esfuerzo
Es imprescindible conservar todos los archivos fotográficos, pero debería realizarse una selección. No es cuestión de quedarse sólo las mejores estética o técnicamente, sino de clasificar los archivos según diferentes criterios. Guardar diferentes copias es una manera de proteger el archivo, y de paso puede estar a disposición de más gente. Y digo a disposición de la gente porque es obvio que debe exigirse a la Administración que estos fondos sean algo público. Tenemos derecho a poder aprender, y conocer mejor el mundo gracias a algo tan simple, y a la vez tan valioso, como una fotografía.
“La fotografía no puede cambiar la realidad pero si puede mostrarla…” Fred Mc Cullin.
La fotografía es el fiel reflejo de la realidad… muestra un hecho en sí mismo: Nosotros somos los dueños de los razonamientos y las sensaciones que nos inspiran. Es la mejor forma de demostrar que un hecho tuvo existencia real… Deben conservarse y estar a disposición de todos, sobre todo a la de aquellos que pensamos “si no lo veo no lo creo…”
La fotografía es un trozo de realidad captada que permanecerá inmóvil eternamente hasta su destrucción. Las fotografías son tan importantes que gracias a ellas recordamos y conocemos hechos, personas y situaciones del pasado. Las imágenes son muy importantes para visualizar la realidad pasada, son mucho más representativas que un simple escrito de un acontecimiento, gracias a estas imágenes podemos imaginar de forma más cercana cómo fue el pasado. Es necesario impulsar la creación de achivos fotográficos, no importa que las fotografías se repitan, lo importante es que, como los libros, lleguen a todos para que el mundo entero pueda visualizar lugares, personas, sentimientos, pedazos de nuestra historia, expresiones, situaciones pasadas…
Las exposiciones de fotografía, por ejemplo, son la ventana a la historia, aquellas que muestran a nuestros antepasados en el siglo XIX, o aquellas que muestran a nuestros abuelos durante la República o el franquismo nos hacen soñar, emocionarnos e imaginar cómo vestían, cómo eran determinadas calles del centro de Madrid en aquellas épocas. También nos muestran cómo son otras partes del mundo, otras culturas, otras vidas e incluso las caras ocultas de personajes que un día fueron famosos como Marilyn Monroe, o la cara desconocida de las torturas que se llevan a cabo en la prisión de Guantánamo. Las fotografías de intetrés general han de ser públicas, y debe haber las copias necesarias para que el universo acceda a ellas. Sin duda: una imagen vale más que mil palabras.
Siempre se busca reforzar los textos con imágenes, y más aún si éstos son históricos. Esto se debe a que una imagen a veces ayuda a afirmar o revocar lo que se ha escrito. Además, si tenemos en cuenta que vivimos actualmente en una sociedad donde predominan los medios audiovisuales, vemos que es casi indispensable que junto a cualquier información exista una imagen, que, como se suele decir, vale más que mil palabras. Pero así como existen textos erróneos también pueden verse imágenes que no coinciden con lo que se dice o con la realidad por lo que llevar a cabo un archivo fotográfico serviría para solucionar este problema.
La fotografia es el arte de fijar una imagen, un momento concreto del pasado para que perdure por siempre. Una fotografía nos aporta mucha información, sentimientos, emociones…vale más que mil palabras!! En pocas palabras un archivo fotográfico es un documento, una ayuda visual.
Es necesario conservar todos los documentos fotográficos existentes que realmente aporten información y sean válidos para el futuro. En al actualidad, estamos como la mayoría de las cosas que nos rodean, saturados. La facilidad de que cualquier persona pueda ser "fotógrafo" y pueda captar un momento de la historia es patente (por ejemplo ésto se puede observar en numerosos medios de comunicación que utilizan imágenes hechas por un ciudadano de a pie y no por un experto en la materia).
Creo que es necesario que por lo menos un par de centros conserven la misma imagen, ante posibles deterioros, o hechos ajenos a nosotros(incendios, inundaciones…).
Para concluir y respondiendo a las últimas dos preguntas creo que un centro de fotografico a no ser que tenga una buena y estructurada base de datos dónde sea fácil encontrar lo que se busca, no es consciente de lo que puede llegar a albergar dentro de sus cuatro paredes y en cuanto a si la Administración debe o no hacer públicos los fondos delos que dispone…creo que sería tan amplia que sería imposible…aunque si se pueden exponer por temas las imágenes cada cierto tiempo, con al finalidad de que todo el mundo pueda aprender e informarse sobre un tema en concreto.
"Si no lo veo, no lo creo" o eso dicen.
Creo que de esa afirmación radica la importancia de conservar las fotografías, sobre todo las históricas porque las sentimentales quizás nos muevan otros tipos de motivos.
En respuesta a algunas de las preguntas propuestas expongo que, su conservación no sólo es necesaria sino también importante para comprobar, recordar, argumentar, conmemorar, revivir…
Es importante tener algunas copias del documento por varios motivos:
a) Para no trabajar con el original y así evitar estropearlo
b) las copias en diferentes lugares responden a la garantía de que si pasa algún incidente en un centro tenemos más documentos en otros
No sé hasta que punto se deberían hacer públicos los fondos porque existe el derecho de imagen y la posible violación a la intimidad de las personas, pero si deberían tener un fácil acceso.
Estoy segura de que los responsables sí son conscientes de la importancia de los documentos (por algo son responsables) pero muchos subalternos quizás no y señalar la sorprendente “ignorancia” de la persona que en su día, tomó la(s) fotografía(s) que hoy han pasado a la historia.
Los archivos fotográficos siempre han sido de gran utilidad y lo refleja esa frase que escuchamos tantas veces, <<mas vale una imagen que mil palabras>>. Por lo tanto respondiendo a las cuestiones del artículo.
No veo necesario la conservación de todas las fotografías si las que aporten algo que no lo haga otra en su lugar, por ejemplo si una sale en negro ¿para que conservarla? o si una es exactamente igual que la otra pero un poco mas nítido ¿cual sería el fin de su conservación?
La segunda cuestión no la veo lógica ¿por qué tener cien copias iguales en cada centro? Dos o tres estaría bien pero cien lo veo un gasto excesivo, si multiplicamos por cien cada copia y a su vez por el número de centros en efecto serian demasiadas copias
Un archivo fotográfico puede tener varias utilidades, documentación, probar hechos, justificarlos, o explicar un hecho.
Creo que no debe exigirse a la Administración mostrar todos los documentos que posee si los que más interés tengan, no estaría bien que ocultasen fotos de interés por nunca mejor dicho propio interés.
Los responsables son conscientes de aquello que poseen pero no de retenerlos todos en la memoria
No se si será por superstición o por simple nostalgia pero el caso es que yo siempre he sido de esas personas que por guardar, guardan el ticket de la comprar y hasta dibujos de 3º de primaria. El caso es que después de guardar y guardar tantos recuerdos acabo siempre haciéndome la misma pregunta : “ ¿y que hago yo ahora con todo esto?. Lo mismo sucede con las fotografías , vale que sean muy representativas y que puedan llegar a alcanzar una importante relevancia histórica y lo que es mas importante aun , servirán de mucho cuando en un futuro alguien quiera investigar como vivíamos en el siglo XX y aunque ese investigador vaya a necesitar de muchos documentos y material fotográfico ,que sin duda será el que mas información le aporte, en el momento en el que ponga todos esos años y años de material sobre su mesa realmente no va a saber por donde empezar y flaco favor le habremos hecho entonces ¿no?. Así que por eso, muy a mi pesar por que si por mi fuese lo conservaría prácticamente todo, pensando no en la tradición y el mero recuerdo, sino en la utilidad real que las cosas pueden llegar a tener, creo que conservar hasta el mas mínimo resto fotográfico es simplemente echarnos a nosotros mismos mas trabajo encima y echárselo también a nuestras futuras generaciones. Porque de la misma forma que yo en mi vida personal acabo cediendo ante mi propia razón al tirar todos los recuerdos innecesarios tenemos que sabes distinguir entre lo que es y lo que no es realmente útil a la hora de contar la historia que hemos creado.
Con todo lo dicho no hace falta decir que, en mi opinión, guardar el mismo documento en infinitos sitios es una de las mayores tonterías, que en lo que a administración y organización se refiere, podríamos hacer. Por que al final siempre se induciría a error, se acabaría catalogando de una forma diferente la información o mejor dicho se tratará dicha información de una forma diferente. Aunque eso si, aforrándonos a eso de “errare Humanum est.” es cierto que, deberíamos de tener siempre algún comodín o colchón por ahí y si tener la misma información en ciertos lugares diferentes, pero con un poco de control y cabeza. Por que como ya he dicho antes un material fotográfico puede ser la ventana para que en un futuro se pueda mirar al pasado, a nuestro pasado, y ciertamente seria una pena arrebatarles ese privilegio de poder viajar en el tiempo simplemente con la ayuda de una fotografía y todo lo que puede llegar a mostrar. Y eso por eso mismo, porque esos materiales son nuestra historia, que todos nosotros tenemos derecho a verlos aunque solo sea por disfrutar de dicho material, sin de que les sirve tener ese material en una estantería acumulando polvo, sino se les da uso al final van a acabar por ser documentos olvidados y que y hoy en día están ahí pero siendo totalmente invisibles.
Las fotografías son un documento igual de importante que los demás. Puede resultar muy útil como método para conservar información, datos o como mero símbolo cultural, ya que muchas de ellas encierran situaciones que nunca se volverán a repetir.
Por ello, es conveniente que se conserven todas aquellas fotografías que tengan cierta relevancia en algún campo del conocimiento,historia..etc. Esto requiere la actuación de la Administración Pública para regular esta conservación, crear y financiar centros dedicados a ello, coordinarlos…etc.
Como conclusión, podríamos decir que los archivos fotográficos están ganando peso en el campo de la documentación en los últimos años, aunque todavía tenemos que hacernos a la idea de que las fotografías resultan igual de útiles, muchas veces, que los propios libros.
" Una imagen vale más que mil palabras"
Las archivos fotográficos son, por regla general, de un alto valor documental. Capturan objetivamente la realidad de un momento concreto de la historia y cuentan más de lo que aparentemente pueda parecer.
Los paisajes, la ropa, la moda, la fisonomía de las personas, la capacidad de medios disponibles para la fotografía… la historia queda estampada involutariamente siempre, en una imagen.
En cuanto a las preguntas:
1. ¿Es necesario conservar todas las fotografías?
Todas pueden tener un valor, pero es necesario realizar una selección objetiva de aquellos documentos más representativos para que la información no se multiplique y sea más accesible.
¿De qué vale que conservemos cien copias iguales en distintos centros?
Vale para que todo el mundo tenga igualdad frente al acceso a la información, pero en los tiempos que corren, quizá puedan sacrificarse las copias físicas por unas digitales.
¿Para qué sirve un archivo fotográfico?
Para crear una historia visual. Podemos conocer el mundo en imágenes si tenemos una base de lo que ocurrió de una forma mucho más didáctica y además son pruebas feacientes de lo que ocurrió en realidad.
¿Debe exigirse de la Administración que haga públicos realmente los fondos de que dispone?
La Administración debe hacer libre todo aquel fondo que considere de interés para el público.
¿Son conscientes los responsables de los centros del material que conservan?
Seguramente nunca somos conscientes de la riqueza que poseemos en realidad. Creo que sucede un poco como con el arte, que es algo que tristemente se valora con el prolongado paso del tiempo.
1.¿Es necesario conservar todas las fotografías?
Creo que el término TODAS debe de restringirse un poco, ya que realmente no es necesario conservarlas absolutamente todas…, pues desde la invención y comercialización a gran escala de la fotografía digital hay miles de millones de fotos sobre un mismo tema o acontecimiento que no es necesario conservar. Creo que se debería de hacer una definición sobre qué tipo de fotografías sí deberían conservarse.
2.¿De qué vale que conservemos cien copias iguales en distintos centros?
Pues sinceramente de no mucho. Deberían de digitalizarse todos aquellos documentos gráficos importantes, para que el acceso a los mismos fuera fácil y sencillo acceder desde cualquier biblioteca, centro de documentación…etc. Además creo que debería crearse un lugar donde sí se conservasen todos los documentos importantes, algo así como un centro nacional, que tuviese toda la documentación.
3.¿Para qué sirve un archivo fotográfico?
Para contestar esto elijo una frase conocida por todos, ya que en muchas ocasiones “una imagen vale más que mil palabras”
4.¿Debe exigirse de la Administración que haga públicos realmente los fondos de que dispone?
Es muy difícil tener una respuesta rotunda a esta pregunta, ya que existen multitud de casos en los que hay que tener en cuenta muchos factores, como la protección de datos, la protección de derechos de los autores o personajes que aparecen en estos archivos…etc. Así que debería de analizarse con detalle si deberían ser públicos absolutamente todos los fondos.
5.¿Son conscientes los responsables de los centros del material que conservan?
Creo que hay muchos casos en los que ese material no se valora o no se revaloriza hasta que pasan muchos años, con lo cual creo que en la mayoría de los casos no se sabe el valor que tienen estos documentos hasta que no pasa mucho tiempo.
Desde mi propia experiencia he de decir que los archivos fotográficos son una gran fuente de información. En concreto, me he embarcado en la realización de un blog en el que intento describir la historia del pueblo donde nací, y la posesión de un amplio archivo fotográfico desde hace bastantes años, conservado por mi familia, me ha facilitado su realización; gracias a las fotos antiguas, puedo mostrar hechos que con la descripción sería muy difícil enseñar, sobre todo para gente que no lo ha vivido o no recuerda ciertos acontecimientos.
¿Es necesario conservar todas las fotografías?
Organizar todas las fotografías resultaría un caos y algunas resultarían innecesarias por su contenido por lo que supongo que haciendo una selección de las fotografías más relevantes resultaría más facil y comodo.
¿De qué vale que conservemos cien copias iguales en distintos centros?
Esto no lo veo una innutilidad ya que a veces se da que las fotografías se han extraviado y nadie sabe que pasó con ellas, al igual que los documentos escritos. Pero bueno, para ello existe hoy día los archivos digitalizados para que no haya pérdidas ni deterioros físicos.
¿Para qué sirve un archivo fotográfico?
Es una forma física de conservar y recordar la historia, nos sirve para corroborar cosas del pasado.
¿Debe exigirse de la Administración que haga públicos realmente los fondos de que dispone?
No sirve de mucho si no son públicos.
¿Son conscientes los responsables de los centros del material que conservan?
Supongo que a veces no se valora lo suficiente y ello conlleva a que no se investigue sobre ellos.
¡Este le tengo “repe”! Diría un niño en el recreo. Pues así pasa con los distintos centros que tienen archivos fotográficos. En muchas ocasiones las fotografías se encuentran repetidas y están ocupando el espacio de otras muy interesantes. Siempre se ha dicho que la unión hace la fuerza, entonces… ¿Por qué no reunir todo el material archivado para conocer los fondos de cada uno y así saber lo que se tiene o no repetido o no se tiene? No hay que tener miedo a ser solidarios y prestarse las distintas fotografías. ¿O es que acaso hacíamos la colección de cromos separados del hermano?
Con el surgimiento de la fotografía, a mediados del siglo XIX, se abre una nueva vía de transmisión y conservación del conocimiento por medio de las imágenes. Gracias a esta técnica han quedado registrados los sucesos históricos más relevantes (S.XIX-actualidad), retratos de personajes reconocidos, obras de arte…
En cuanto a las preguntas planteadas, decir que:
1. ¿Es necesario conservar todas las fotografías?
"Las fotografías nos permiten recrearnos por un imaginario cargado de evocación y por momentos nostálgicos de lo que hemos sido, lo que actualmente somos y mirar posibles perspectivas futuras”. Por eso mismo es tan importante su conservación, ya que nos conduce a obtener indicios que dieron origen a un hecho en un pasado inmediato y a descifrar su posible contextualización espacial. Pero es importante señalar que, aunque todas las imágenes fotográficas tienen un valor particular, a la hora de crear un archivo fotográfico hay que poner en práctica un cierto filtro en cuanto a la selección de instantáneas que lo van a componer. En este sentido se puede crear una cierta confrontación de ideas…
2. ¿De qué vale que conservemos cien copias iguales en distintos centros?
En cierto sentido podría resultar un tanto absurda esta medida pero, si meditamos detenidamente sobre ello, lo cierto es que puede resultar muy útil ya que si el archivo fotográfico está compuesto por material físico, éste podría ser dañado por diversos motivos (agua, fuego, pérdida del color por el paso del tiempo…) y si contamos con diversas copias, igualmente físicas, en distintos archivos fotográficos o puntos geográficos podríamos salvaguardar dicho documento gráfico (por poco original que pueda resultar).Un ejemplo sería la conservación de ciertas colecciones de fotografías antiguas que, en ocasiones, plantea problemas complicados de resolver…con ello me refiero, por ejemplo, a la existencia bastante frecuente de negativos de nitrato (material autoinflamable que se empleó mucho desde principios del S.XIX y bien entrados los años 50 en España).
Pero, también es cierto que, actualmente, esta medida puede resultar un tanto prehistórica en el sentido de que con ciertos métodos como, por ejemplo, la digitalización podemos ahorrar espacio y tiempo (de búsqueda en el archivo como de desplazamiento físico de la persona interesada) principalmente.
3. ¿Para qué sirve un archivo fotográfico?
Debemos definir un archivo fotográfico o un fondo documental como “todas aquellas colecciones de imágenes fotográficas pertenecientes al siglo XIX, XX y el presente, que son producto de un propósito determinado en cuanto a su cantidad, temario y autoría. Las mismas poseen implícitamente un valor documental o estético”. Consiste, pues, en la selección, documentación y digitalización mediante escáner (en algunos casos, y cada vez más frecuentes) de imágenes históricas.
La fotografía es considerada, hoy día, como un documento de especial importancia para estudios históricos contemporáneos de ahí que se haya generalizado el uso de los archivos fotográficos para la realización distintos trabajos e investigaciones.
4. ¿Debe exigirse de la Administración que haga públicos realmente los fondos de que dispone?
Rotundamente SÍ!! Los conciudadanos debemos tener el pleno derecho de poder acceder a todo aquello que, en algún momento, ha formado parte de nuestra historia. Particularmente, estoy en contra del acceso restringido a ciertos documentos, ya sean gráficos o no. Pienso que, si supuestamente “todos somos iguales”, ello debería llevarse a la práctica…y que no sólo unos pocos, como lo son los investigadores, tengan acceso a ciertos documentos.
En cuanto a la Administración, podríamos decir también que, ya que ésta propicia centros de formación de restauradores y talleres que ejecutan estas labores con obras de otras ramas del arte, se podría exigir además la formación de personal que desempeñara estas mismas labores en centros de restauración de material fotográfico.
5. ¿Son conscientes los responsables de los centros del material que conservan?
Aquellos encargados de recuperar y mantener nuestro legado documental histórico han dejado de lado las fotografías, entendidas estas como documentos, durante mucho tiempo; sin embargo, otras expresiones artísticas han gozado de un mayor reconocimiento y trato, por parte de estos responsables, en detrimento de las imágenes fotográficas. Pero, también es cierto que esta idea está cambiando con el paso de los años y que el valor de las fotografías, y con ello de los archivos fotográficos, se está revalorizando. Tal vez tenga que ver en ello cierta potenciación del nivel cultural nacional, pero, sobre todo, gracias a un específico grupo de personas muy concienciadas en la recuperación y difusión de la fotografía antigua y, con ello, de la memoria histórica.
Cuando el volumen de la información es muy elevado, la consulta manual en un archivo fotográfico puede ser un tanto laboriosa. Por ello, sería conveniente que, si la consulta a una fototeca es muy frecuente y el número de usuarios significativo, los responsables de los centros tengan en cuenta la posibilidad de su automatización para, por un lado, conservar en las mejores condiciones el material que tienen bajo su tutela y, por otro, facilitar la información requerida en el menor tiempo posible. De este modo, podrían llegar a tener un mayor conocimiento acerca del material que tutelan…
1-¿Todas? Es un imposible innecesario. Estamos hablando de infinitas entidades hoy, que crecen exponencialmente cada día. ¿Algunas? Indudablemente, las más valiosas.
2-Para asegurarnos de su conservación en defecto de alguno de ellos, lógicamente.
3-Imposible de describir en unas líneas. Quizás si se pudiera adjuntar una imagen seriamos capaces de entenderlo y sobrarías las palabras. Para eso sirven.
4-Son un material cargado de información y relevancia que debería estar al alcance de todos, al igual que ocurre con otros documentos.
5-Si lo conciben como un tesoro, si. En caso contrario, no.
Era una calurosa mañana de agosto, y yo me encontraba como cada verano desde mis 9 años de vida, en un pueblecito pequeño de Extremadura, un pueblo de esos de toda la vida, donde la tradición está tremendamente arraigada. Esa mañana me planteé conocer el ayuntamiento por dentro, ya que estaba cansada de mirarlo por fuera, pero nunca me había atrevido a pasar, y todos sabemos la inquietud que tenemos a tempranas edades por descubrir todo y ver como son las cosas por dentro. Una vez dentro del edificio, vi que había una exposición de fotografía, y como mi pasión por éstas es tan grande, me decidí a pasar, y entre la multitud de fotos en blanco y negro de un montón de gente a la que no había visto en mi vida, de repente descubrí, una foto que me dejó atónita y dibujó en mi cara una gran sonrisa, esa foto era la de mi abuela, mi abuelo, mi madre y mis 6 tíos, aquella foto que tantas veces había visto en el comedor de mi abuela, donde mi madre apenas tendría 3 o 4 años. Fue tanta la emoción que sentí, que se desataron en mi sentimientos de alegría y a la vez melancolía y tristeza por aquellos que no están, pero fue tal mi conmoción , que en todo el día, no tuve otra cosa en mi mente que aquella fotografía, a mis 13 años, sentí que mi familia era muy importante, por que estaba expuesta en el ayuntamiento, enseguida llamé a mi madre, a mi abuela, estaba emocionadísima, pocas veces recuerdo haber vivido ese estado, y lo consiguió una simple fotografía, fue algo extraordinario.
Las fotografías sirven para descubrir lo desconocido, para recordar lo olvidado, para vivir lo jamás vivido y para acercarnos lo lejano. Es prioritaria en nuestras vidas, para una infinidad de cosas.
Por último me gustaría decir que bajo mi punto de vista, es muy útil conservar todos los archivos fotográficos, ya que muestran una gran riqueza histórica, cultural, humana…
Que se tengan las mismas fotografías en diferentes lugares, no me parece del todo correcto, ya que se podría optar por otras formas de tener esas fotografías, como puede ser digitalizándolas.
1. ¿Es necesario conservar todas las fotografías?
Si cada foto es una reliquia que nos cuenta un momento y un lugar determinado, habría que conservar cada una de ellas. Pero la saturación vendría más tarde. Por lo tanto, una buena elección de las principales o de las mejores sería la mejor opción para evitar el caos entre imágenes extremadamente parecidas.
2. ¿De qué vale que conservemos cien copias iguales en distintos centros?
No parece muy lógico guardar por centro copias y copias de fotografías. Sin embargo, si existe cualquier problema físico, nos puede dar una gran satisfacción saber que tenemos fotografías idénticas de la que prescindíamos con tanto interés; saber que no la hemos perdido puede ser una gran noticia para nosotros.
La digitalización puede favorecerlo bastante en todos los sentidos.
3. ¿Para qué sirve un archivo fotográfico?
Para ofrecernos todos los momentos valiosos de la historia o cualquier información, que posteriormente podrán ser usados por cada uno de nosotros como material profesional y de investigación.
4. ¿Debe exigirse de la Administración que haga públicos realmente los fondos de que dispone?
Sería una posibilidad bastante beneficiosa para todos; en concreto, para los que tenemos un difícil acceso. Aprenderíamos mucho más y nos identificaríamos más con la situación, ya que la imagen es un gran arma que nos facilita el entendimiento.
Sin embargo, cabe cuestionarnos si hoy en día se puede hacer público todo o se prefiere dejar al margen, y me temo que a menudo ocurre lo segundo.
5. ¿Son conscientes los responsables de los centros del material que conservan?
Un 90% aproximadamente es probable que sea consciente de lo que guarda, pero no escribo aquí el 100% ya que nunca le damos el valor completo que se merecen a las cosas en general; y eso nos ocurre con todo. ¡Más atención para una responsabilidad completa no vendría mal!
No es necesario conservar todas las fotografías, pero sí es imprescindible conservar aquéllas que tengan un valor histórico o cultural. Se debería de hacer una minuciosa selección para que no haya archivos ocupando un lugar innecesario. Por eso mismo creo que no es necesario hoy en día que guardemos cien copias iguales, ya que si se digitalizan esas fotografías pueden llegar a todo el usuario sin necesidad de que estén en cien centros distintos.
Un archivo fotográfico es una valiosa plasmación de hechos históricos. Nos ayudan a conocer o a recordar con precisión cómo acontecieron los hechos y eso es algo a lo que todo el mundo debería de tener acceso. Creo que la Administración debe hacer público esos fondos.
Creo que no se le da toda la importancia que se debería a ese material, es un tesoro único e irrepetible y se debería sacar mayor partido de ello.
Desde los comienzos de la fotografía, esta ha tenido una importancia latente en los trabajos de investigación, en la publicidad, en el reflejo de la sociedad… Pero también hay que tener en cuenta que no todas las fotos tienen la misma importancia y el mismo valor, sobre todo en la actualidad.
Los centros de documentación que poseen archivo fotográfico, deben saber que fotos tienen más valor y cuales no a la hora de guardarlas para su clasificación. Tienen que saber que fotos deben ser guardadas para un posterior uso debido a su gran valor, y cuales no.
En el siglo XIX los profesionales que poseían cámaras fotográficas eran escasos y por ello las fotografías que se conservas no son muy elevadas en su número. Todo ello hay que asociarlo a que la gente no había tenido contacto previo con este tipo de material visual, de ahí debido su gran valor e importancia de este avance tecnológico, por lo menos en mi opinión. Pero en la actualidad la mayoría de las personas tenemos la oportunidad de tener acceso a internet, a una cámara fotográfica, así como a diversos programas para su clasificación, conservación y revelación.
En relación con los responsables de los centros, creo que no son del todo conscientes de la acumulación de material que pueden llegar a guardar y conservar, ya que mucho material acaba repitiéndose en otros centros, perdiendo su valor.
¿El valor de una fotografia? MAS DEL QUE CREEMOS!! Y por supuesto que sirve de mucho tener varias copias del mismo archivo fotográfico. Creo que hoy en día debido a la digitalización se está perdiendo totalmente el valor de las fotografías. Yo cada día me doy mas cuenta del verdadero valor que tienen. Cuando veo que tengo millones en mi ordenador, mil intentos de foto hasta que salió la adecuada…sisi todas muy bonitas..pero ninguna impresa!! y luego llego a casa de mis abuelos, a mi casa…y veo lo bonitas que son las fotos en blanco&negro, los álbumes que mi madre tiene de su infancia…y veo como yo eso no lo tengo me da mucha rabia, por eso creo que si se tiene de cada foto 100 copias mejor q 50 y claro que tienen muchísimo valor!
Por otra parte deberían ponerse a la vista de todos, que todos podamos disfrutar de ellas con su debido cuidado y precaución, pues, sino de que serviría? sería como si el álbum de mi madre nadie lo puede coger…yo no podría disfrutar de ello!!
¿Qué te llevarías a una isla desierta? Esa pregunta que alguna vez nos han hecho no hay que dudar que las FOTOGRAFÍAS, para recordar, para no olivdar,y para sentirse cerca. No es necesario sino es OBLIGATORIO conservaar las fotografías, también tienen que estar en distintos centros para que a todo el mundo le sea accesible. Todas las administraciones públicas deben sin duda archivar las fotos, me gusta ver fotos de la guerra de mis abuelos,de todo. Me encanta ir a exposiciones y sentir que hubo vida y mundo.Cada mes sale una cámara de fotos nuevas,vivimos en un mundo donde las fotos deben ser perfectas y hace año lo imperfecto era lo perfecto. y Sí son conscientes de esto.
Creo plenamente que Sí, las fotografías han de conservarse, ahora, eso de tener 100 copias exactas repartidas por ahí… pues nosé hasta qué punto. Hay que guardar originales, por supuesto, pero en esta era de la tecnología opino que lo mejor sería tener un archivo online. De esta manera, además de guardarse todos los archivos sin ocupar espacio físico, estaría al alcance de todo el público que así lo precisase.
Con lo cual contesto a la pregunta, sí, creo que es necesario que la Administración lo haga público, ya que forman parte de la cultura, y la cultura (como no se cansan en decirnos) es de todos.
Creo que muchas veces, se tiene tanta, tanta información que no se valora realmente cada pieza. Pero lo que no le interesa a unos, a otros sí, así que todo debería ser conservado.
1. Como hemos visto en esta asignatura la Documentación se encarga de la conservación de archivos normalmente escritos, por tanto la conservación de fotografías creo que es necesaria pero siempre dentro de un tiempo y un límite determinado. Debería hacerse una selección de los archivos fotográficos más antiguos que sean más útiles, porque si no puede haber una saturación de archivos y siempre es mejor su renovación.
2. Sería importante la conservación de varias copias iguales como dice la segunda pregunta porque los usuarios podrían disponer de esos archivos sin necesidad de esperar un tiempo a que este disponible ya que podría facilitar su trabajo. En este caso cien copias creo que serían demasiadas.
3. Un archivo fotogŕafico puede tener múltiples funciones, puede verificar datos que un archivo escrito no puede realizar, así facilita el trabajo de los investigadores o usuarios porque proporciona datos observables a simple vista, que son reales y sobre todo más creíbles, es decir la verificación de la información es más concreta, real y creible que un archivo escrito.
4. Tanto como exigirla no se hasta que punto, pero si pienso que se podría proponer la exposición, divulgación de archivos fotograficos más antiguos o en desudo para que la gente pudiera disfrutar de ellos. Porque en los últimos años la fotografía ha sido muy demandada en el tema de exposiciones y de arte, y cada vez tiene más auge. Por tanto, la Administración también se beneficiaria de ello.
5. Pienso que si son conscientes del material que poseen por ello es su trabajo… Alomejor no lo saben aprovechar o divulgar de una mejor forma.
La fotografía es a día de hoy un componente más en nuestra rutina. Las imágenes fotográficas nos bombardean en todo momento (ya sean publicitarias o no). En un mundo como el publicitario, la fotografía es un elemento indispensable a través del cual la hace más eficaz. Por tanto deben conservarse para facilitar su labor, ya sea con diez o cien copias iguales en distintos centros.
En ocasiones, ni los centros ni los usuarios somos conscientes del material fotográfico que muchas veces utilizamos, pues tiene la esencia de plasmar en cuestión de un segundo una acción instantánea; ¿cómo sería esto posible de no ser por la fotografía?.
A medida que avanza la tecnología, el desarrollo de la fotografía se hace latente enriqueciendo su propio futuro en ámbitos como los virtuales en los que ya no importa únicamente el nivel icónico sino, también, otros factores como la propia interrelación social.
“Fotografías de la revolución”, o algo similar, se llama una exposición de fotografía acerca de las fotos del 1 de enero, día que comenzó el régimen de Fidel Castro en Cuba. Los columnistas dicen que por entonces el analfabetismo era tan alto, que las imágenes servían tanto como el mejor artículo informativo que pudiéramos imaginarnos. Y hoy, gracias a la conservación de esas fotografías (que sus autores jamás pensaron que formarían parte de la historia) podemos conocer un poco más acerca de aquellos momentos. Sencillamente, es que por encima de las palabras la fotografía la vemos, no deja lugar a opiniones, a fé…todos nos creemos lo que vemos. No sólo es necesario conservar la mayoría de ellas, o todas las posibles, sino que TODOS deberíamos tener acceso a visionarlas y a poder deleitarnos con ellas.
¿Es necesario conservar todas las fotografías?
y yo digo: ¿para qué queremos todas las fotografías? ¿Para complicar aún más el proceso de almacenamiento y su posterior búsqueda y recuperación? Pues no. No es necesario guardarlo todo, de hecho esto sería relativamente fácil, lo difícil es valorar cada una y eliminar todas aquellas que nos parezcan inservibles. Claro que eso es precisamente lo más difícil (elegir o descartar adecuadamente), pero para ello lo que hay que hacer es seguir un buen criterio de selección y catalogación.
¿De qué vale que conservemos cien copias iguales en distintos centros?
Conservar cientos de documentos iguales no sirve para nada excepto para dificultar aún más la ya de por sí ardua tarea de búsqueda y recuperación. Lo que hay que hacer es intentar llevar a cabo la mejor labor de gestión posible y facilitar de este modo el proceso documental.
¿Para qué sirve un archivo fotográfico?
El objetivo último en un archivo fotográfico es guardar, conservar y almacenar los documentos para que luego se puedan recuperar fácilmente. Es un proceso que especialmente se centra en el receptor intentando responder de este modo sus necesidades informativas.
¿Debe exigirse de la Administración que haga públicos realmente los fondos de que dispone?
No se si exigirse, pero lo que es evidente es que plena sociedad del conocimiento no tiene ningún sentido ni lógica alguna que la ciudadanía desconozca parte de esa información y de ese conocimiento al que tod@s tenemos derecho.
¿Son conscientes los responsables de los centros del material que conservan?
Desde mi modesta opinión, pienso que no. La verdad no tengo conocimiento sobre sus criterios documentales pero me temo que lo que probablemente esté ocurriendo es que debido a la saturación de información que existe en la actualidad, en los centros se amontonen documentos, tales como fotografías, y más documentos abocados a llenarse de polvo y estropearse. Y lo que es peor, que cuando realmente nos demos cuenta de su importancia y de la pérdida que ello ha supuesto, ya será demasiado tarde. ¿Actuamos?
Hay una cosa que todo el mundo desea pero que no se suelen plantear muchos, una forma de conseguir guardar todo lo que nos ocurre día tras día, con el fin último de recordar en un futuro los mejores momentos, y también los malos.
En un principio, se utilizó el diario para conseguir este fin, pero con el paso del tiempo y las mejoras notables en la tecnología, hemos pasado de escribir a hacer fotografías, con consecuencias a otro nivel, pero ese es otro tema.
Ahora mismo, cuando vamos a viajar para conocer, celebrar, reunirnos y aunque no haya nada planificado siempre llevamos con nosotros algo que permita plasmar estos momentos sobre el soporte fotográfico, ya sea el móvil o la cámara (analógica o digital), puediendo así rememorar estas situaciones y captar otras que aparecen sin previo aviso.
A partir de ellas podemos crear todo lo que queramos; desde calendarios, puzzles, trabajos y un largo etcétera. Son recuerdos preciados, que siempre queremos tener para un día melancólico ver el lugar al que fuimos o los amigos con los que disfrutamos de un viaje.
Obviamente, este tipo de fotografías no son las mismas a las que se refiere el artículo, pero existen muchos momentos históricos y otros no tanto, muchos tipos de personas con intereses dispares, que en cualquier momento van a necesitar acceder a este tipo de archivos, sea cual sea su finalidad.
Hace 21 días positive ,por primera vez y de forma manual, mis negativos. Realmente es la fase más emotiva y sorprendente de todo el proceso; puesto que, a diferencia del negativado observas como los primeros índoles de aquello que fotografiaste, hace ya unas semanas, aparece mágicamente.
El proceso no es muy complicado pero hay que tener en cuenta unas mediciones temporales muy exactas (especialmente con la luz del ampliador).
Positivé veintisiete fotos y, sin duda alguna, la mejor de todas ellas era la de mi persona favorita.
Jamás contemplaría la posibilidad que después de todo el esfuerzo que me ha llevado lograr esa foto (mediciones diafragma y velocidad, pasar a negativos, positvado, ampliaciones) desaparezca en los próximos años por la interpretación (falsa) de su falta de valor.
Mi foto no es sólo una simple continuacion de fases, conlleva mucho más.
Ojalá sea conservada por mis hijos, por mis nietos y así, consecutivamente.Y todo el mundo pueda ver a mi persona favorita.
Lo que ocurre con la fotografía es que ha sido un arte menospreciado durante muchísimo tiempo, incluso hoy en día no se valora como yo creo que debería hacerse. Por eso surgen este tipo de preguntas acerca de los archivos fotográficos y en cambio no ocurre con otros artes. Contestando a todas yo creo que sí deberían conservarse las fotografías porque es un tipo más de memoria histórica ¿por qué iban a deshacerse de un ejemplar que aparte de arte nos aporta datos de otras épocas? Es evidente que si hay cien fotografías iguales todas no van a conservarse porque ocuparían el espacio de otras que no están. Pero los archivos fotográficos sirven igual que los bibliográficos aunque no se consulten ni una tercera parte de ellos. Creo que debe exigirse que la Administración haga públicos los fondos que tiene y que también fomente su consulta y utilidad.
Siempre se ha dicho que una imagen vale más que mil palabras. Y aunque en determinados casos no sea cierto del todo, es algo indiscutible que el poder congelar momentos e imágenes es de gran importancia. En mi opinión, como amante de la fotografía que soy, creo que se deberían conservar todas las que se pudiesen, ya que hasta la más mínima fotografía refleja algo y son un tesoro. Y sí, deben conservarse varias copias en diferentes centros, para que sean accesibles al mayor número de personas posibles y para que haya siempre copias de seguridad, para que esas imágenes estén al alcance de todos. Y para eso es necesario que se archiven las fotografías, para que estén ordenadas y puedan estar disponibles para quien las necesite y cuando las necesite, por eso la Administración debería hacer público todo lo que posee, el conocimiento, el arte… es de todos. Aunque aún no se le dé a los negativos la importancia que se le da a los libros, son tan importantes como estos a la hora de realizar cualquier trabajo en el que se requiera una documentación previa.
La fotografía nos muestra la realidad de forma totalmente objetiva. Por eso, si buscamos la veracidad de alguno de nuestros recuerdos, la mejor prueba de ella sería la búsqueda de una fotografía acerca de eso. Por ello, se debe conservar los documentos, porque si no, todo lo ocurrido dejaría de ser objetivo para pasar a ser pura literatura. La historia no estaría tan clara sin las fotos en las que se ve plasmada. En este sentido, las fotografías, como buenos documentos, han de estar al alcance de todo el mundo, porque todos tenemos derecho a culturizarnos.
"10 millones de visitas que hemos experimentado en las primeras horas" decían los impulsores del proyecto Europeana para aludir a la caída de su servidor por exceso de visitas. Hablamos de LA biblioteca digital europea. Dicho así no parece nada, pero si lo traducimos vienen a ser más de dos millones de obras en 21 idiomas. ¿Habría sido posible este proyecto si no se hubieran conservado las obras?
Entiendo que sí que deben de conservarse los datos y más aún las fotografías que son un relato de lo que fuimos y somos. No obstante, como todo en esta vida, es necesario hacerlo inteligentemente porque de nada sirve tener millones de fotografías si no somos capaces de acceder a ellas. Por esta razón es necesario que exista una coordinación entre centros documentales en beneficio de su propia organización y, por supuesto, del consumidor. Éste, o más bien nosotros como ciudadanos, queremos conocer aunque sea por curiosidad y por esta razón estoy de acuerdo en que la Administración debería ponerlo a nuestra disposición. En mi opinión, una iniciativa como Europeana merece cuanto menos todo mi respeto ya que estamos hablando de la democratización de la información.
Por otro lado, ¿sabemos acaso lo que tenemos guardado en nuestros discos duros? Si imaginamos esto multiplicado por un millón es lo que sucede en los centros documentales y por eso entiendo que ni ellos sepan lo que tienen en sus manos. Por esta razón, porque estamos hablando de nuestra historia, debería existir una iniciativa que aunara los objetivos de los centros y les hiciera seguir un mismo camino.
Las imágenes captadas por una cámara son una fuente histórica fundamental para conocer nuestro pasado, y hoy existe una gran dispersión de los documentos fotográficos entre museos, bibliotecas, fundaciones, archivos, fototecas, etc. Además son muy pocos a los que se puede acceder libremente.
No veo tan importante pensar en si se deben conservar todas las fotografías o no, porque con las nuevas tecnologías no hay grandes problemas de almacenamiento para los documentos más nuevos, pero si una biblioteca quiere conservar una fotografía antigua, aunque existan más copias en otras colecciones, yo pienso que es mejor y hasta aconsejable, porque en caso de sufrir algún percance uno de estos archivos, no se correría riesgo de perder el documento, ya que existirían copias.
Como he dicho, la fotografía es una fuente documental impotantísima. Ya que a través de ella podemos conocer otras épocas, otros lugares, etc. Por todo esto, creo indispensable pensar en crear un archivo virtual unificado, con una base de datos única, que permita tener constancia de cuantos trozos de historia visual anden desperdigados por ahí, para que podamos tener acceso a ellos de forma libre, siempre que no tengan reservados los derechos de autor, entonces por lo menos tener constancia de que existen.
Supongo que es una ardua labor y que costaría mucho, por eso quizá no se ha realizado aún.
Paseando por el Rastro e inclinando la cabeza de vez en cuando te encuentras con unos tacos de fotos atados con gomas elásticas, si te dedicas a verlas, te encuentras con aristocratísimas señoras, con gitanos pastoriles, con señores de mirada fiera y severo bastón, con niñas de tirabuzones imposibles o casas dignas de Los Otros, pobres fotos, huérfanas, sin alma, sin familia e inconexas… y piensas si algún lejano día tu foto en Pacha con tus amigas valdrá unos eurillos en un mercadillo, o como archivo documental del ocio juvenil de principios del siglo XX. El caso es que las fotografías son grandes portadoras de información, necesarias para poder completar los documentos escritos, dotarlos de forma, de cara, de visión. La conservación fotográfica y audiovisual, me parece vital para transmitir la cultura por completo, si no, se esta dejando una historia incompleta que tiene demasiado que dejar a la imaginación, dichas fotos deben, o deberían ser públicas, pero no descuidadas, quiero decir, controladas y preservadas como objetos valiosos. La virtualización de las imágenes interesantes desde el punto de vista documental puede servir como ayuda para transmitirlas por Internet, de forma que sean accesibles a todo el mundo. En conclusión, conservar fotografías de importancia es vital para que permanezca el legado cultural y visual y es necesario que haya gente que se encargue de ello.