LA FIGURA DEL EXAMINADOR DE PATENTES

El título de patente concede al titular una serie de derechos exclusivos, en esencia le permite impedir a terceros la explotación de una invención. Este tipo de derechos, en principio son contrarios a la economía de mercado, basada en la asignación de la producción y el consumo de bienes y servicios que surge del juego entre la oferta y la demanda. Es en este contexto que cobra gran relevancia el que dichos derechos sean concedidos únicamente a invenciones que realmente suponen una aportación a la sociedad. Pues bien, son los examinadores de patentes los profesionales encargados en primera instancia de asegurar que las invenciones objeto de las patentes realmente las merezcan y en el caso de España su papel cobrará mayor importancia cuando la nueva Ley de patentes 24/2015 de 24 de julio entre en vigor el 1 de abril de 2017 y todas las patentes concedidas en España tengan que superar un examen sustantivo.

Esta entrada del blog está dedicada a exponer diversos aspectos de la profesión de “examinador de patente”.

¿Qué es un examinador de patentes?

Es un profesional que reúne una serie de características que se incluyen en esta lista no exhaustiva:

–       Es un funcionario o empleado público. Puesto que los derechos de propiedad industrial los concede el Estado, la tarea de su examen debe recaer en un empleado público, nunca uno perteneciente a la empresa privada.

–       Ha superado un duro proceso de selección: En este punto sería conveniente comparar el proceso selectivo de la OEPM (Oficina Española de Patentes y Marcas) con el de la Oficina Europea de Patentes. En el caso de la OEPM, el aspirante a examinador debe superar cuatro exámenes, cuyo contenido se puede conocer en las convocatorias publicadas periódicamente en el BOE y que exigen un importante conocimiento previo de las tareas a desarrollar: Derecho administrativo, Derecho nacional e internacional relacionado con la propiedad industrial, conocimientos técnico-científicos en la especialidad a la que se desea acceder, nivel avanzado de inglés (francés o alemán voluntarios para subir la puntuación) y  debe ser capaz de clasificar solicitudes de patentes de acuerdo a la CIP (Clasificación Internacional de Patentes)  así como de efectuar el examen de novedad y actividad inventiva de una solicitud de patente teniendo en cuenta el estado de la técnica proporcionado. En la Oficina Europea de Patentes  se valora más en el proceso de selección la posesión de habilidades idiomáticas (conocimiento de los tres idiomas oficiales, el inglés, el francés y el alemán), la capacidad de análisis de documentos técnicos y la especialización en un determinado sector de la técnica, además de que se realizan estudios psicológicos y médicos. La formación en legislación y evaluación de requisitos de patentabilidad se proporciona una vez el examinador ha sido seleccionado a lo largo de un período de dos años durante los cuales el examinador está en una situación de “prueba”.

–       La formación técnica-científica es fundamental para ejercer la profesión y el primer requisito es poseer una titulación de este tipo (Químicas, Biología, Arquitectura, Ingeniería, Física, etc).

–       Debe tener capacidad de análisis y de concentración para estudiar y evaluar documentación técnico-científica.

–       Debe ser capaz de situarse en la figura hipotética del experto en la materia.

–       Debe mantenerse al día de las últimas novedades en su sector de especialización.

–       Debe Conocer y manejar perfectamente las directrices de búsqueda y examen y toda la normativa legal aplicable, así como todas las modificaciones que en ellas se produzcan.

Ya dedicamos una entrada en el blog a profesionales del mundo de las patentes que alcanzaron la fama debido a otras actividades, pero es bueno recordar que se trata de una profesión que han ejercido personas de gran talla intelectual:

Las tareas del examinador en el procedimiento de examen.

En ciertas oficinas de patentes los examinadores evalúan aspectos formales en las primeras etapas del procedimiento:

–       Si se cumplen los requisitos mínimos para obtener la fecha de presentación.

–       Si se ha pagado la tasa de depósito y en su caso la de búsqueda.

–       Si la solicitud cumple con los requisitos mínimos que permitan su publicación.

–       Si se ha designado al inventor.

–       Datos de  representación.

–       Datos relativos a la divulgación en exposiciones oficiales.

–       Datos relativos a la prioridad reivindicada.

–       Presencia de reivindicaciones.

–       Redacción en el idioma de procedimiento.

También en las fases iniciales se examinan aspectos de patentabilidad:

–       Si la invención se encuentra incluida en las prohibiciones generales.

–       Si se trata de situaciones excluidas de la patentabilidad por atentar contra el orden público y la moralidad.

La tarea que más horas de trabajo de examinador consume suele ser la de la búsqueda del objeto u objetos de las reivindicaciones:

–       Antes se debe analizar cuidadosamente el alcance de las reivindicaciones.

–       Si hay dudas al respecto, habrá que tratar de aclararlas con el solicitante.

–       Se examina también si existe falta de unidad de invención.

–       La búsqueda lleva asociadas la redacción del informe de búsqueda y opinión escrita.

Si se solicita, el examinador deberá evaluar dentro del llamado examen sustantivo si se cumplen los requisitos de patentabilidad (novedad y actividad inventiva) y demás requisitos exigidos por la legislación, incluido el de suficiencia de la descripción.

En ocasiones los examinadores deben intervenir también en las oposiciones que se pueden presentar tras la concesión de la patente. Habitualmente intervienen comisiones formadas por varios examinadores y en ocasiones con la asistencia de un jurista.

Tanto en el procedimiento de examen como en el de oposición, en ocasiones se celebran las denominadas “vistas orales”, donde se escucha a las distintas partes.

Si en cualquier momento del procedimiento, fuera de los establecidos en la legislación, se presenta nueva documentación se deberá determinar si se trata de la corrección de errores manifiestos y en caso contrario rechazarlas.

Cuando se presenta nueva documentación, siempre debe evaluarse si se ha producido un aumento del contenido de la solicitud respecto al presentado inicialmente y en caso contrario rechazarla.

El examinador también debe asignar a sus solicitudes, con vistas a la publicación, el símbolo o símbolos correspondientes a la CIP (Clasificación Internacional de Patentes) y también en ocasiones y con fines internos el correspondiente símbolo de la CPC (Cooperative Patent Classification). Asimismo, periódicamente es preciso reclasificar solicitudes ya publicadas, debido a cambios en las clasificaciones.

Otras tareas

El examinador también debe atender por vía telefónica, escrita o presencial a todos los solicitantes que lo requieran tratando de resolver sus dudas.

En la OEPM se ha implantado un servicio denominado “examinador de guardia” en el que el cada día un examinador distinto se encarga de atender las consultas que sobre diversos aspectos del procedimiento de concesión de patentes presentan los usuarios de 9 a 14:00 por vía telefónica o presencial.

No es desdeñable la tarea realizada por numerosos examinadores en la formación de nuevos profesionales, en cursos de refresco, en cursos a examinadores de otras Oficinas de Patentes y en la divulgación de las patentes en universidades, ferias, congresos y empresas privadas.

También en ocasiones los examinadores deben elaborar informes técnicos requeridos por las áreas de recursos e informes periciales para asistir a la justicia.

Todas las Oficinas de patentes que son Administraciones de Búsqueda Internacional y de Examen Preliminar Internacional de acuerdo al Tratado de Cooperación en materia de Patentes (PCT) deben tener, según indica el capítulo 21 de las directrices de búsqueda internacional y de examen preliminar internacional del PCT un Sistema Gestión de Calidad y la OEPM no es una excepción; posee un Sistema de Gestión de Calidad que abarca todos los procedimientos aplicados en la Oficina. En este Sistema los examinadores de patentes juegan un papel fundamental:

Debe conocer perfectamente toda la documentación de calidad:

  • Manual de calidad.
  • Procedimientos.
  • Lista de documentación externa e interna.

Cumplimentar:

  • No conformidades.
  • Acciones correctivas/preventivas

Contestar a las quejas y reclamaciones de los usuarios.

Colaborar en las auditorías internas y externas que se celebran anualmente.

No todos los examinadores de patentes trabajan aplicando procedimientos de concesión. Por ejemplo, en la OEPM hay examinadores dedicados a la realización, ya sea a tiempo completo o de forma esporádica, de los llamados Informes Tecnológicos de Patentes, destinados a la determinación del estado de la técnica y/o la posible patentabilidad de invenciones como paso previo a la presentación de solicitudes de patente, como punto de partida de proyectos de investigación o para encaminar investigaciones ya iniciadas.

La Actitud y Responsabilidad del examinador de patentes

La actitud del examinador es muy importante. Siempre debe tratar de ser constructivo y útil. El examinador debe tener sentido de la proporción y no plantear objeciones poco sustanciales.

No se debe olvidar que la redacción de la descripción y las reivindicaciones de una solicitud de patente es responsabilidad del solicitante o su representante.

 

 

 

 

 

El examinador tiene asignado un tiempo máximo para la realización de las distintas tareas. Dicho tiempo no debe superarse.

Una vez más  conviene resaltar la importancia y responsabilidad del trabajo realizado por el examinador de patentes. En sus manos está el conceder derechos exclusivos únicamente a aquellas invenciones que realmente los ameritan.

Si bien un error cometido por un examinador puede ser subsanado en fases posteriores; oposiciones, recursos y procedimientos judiciales, ello provoca graves ineficiencias en el mercado y numerosos costes adicionales.

Por otro lado no hay que olvidar que el examinador es humano y puede cometer errores. En ese sentido la Ley española de patentes 11/1986 (Art. 37.2) y La Ley 24/2015 (Art. 42) establecen que:

“La concesión de la patente se hará sin perjuicio de tercero y sin garantía del Estado en cuanto a la validez de la misma y a la utilidad del objeto sobre el que recae”.

Aspectos positivos y negativos del trabajo como examinador de patentes.

Como toda profesión, la de examinador de patentes tiene sus sombras y sus luces:

Puntos positivos:

–       Es un trabajo autónomo. Permite la auto-organización y por ejemplo el teletrabajo (en la OEPM hay un programa piloto de teletrabajo para examinadores de patentes  desde 2013)

–       Permite estar en contacto con los avances tecnológicos.

–       Favorece el contacto con profesionales de otros países.

Puntos negativos:

– Es un trabajo solitario. No favorecer las relaciones sociales.

– Es fácil caer en la rutina.

– En ocasiones existe inseguridad respecto a si el trabajo se está realizando correctamente.

En cuanto al salario, es algo que deberá valorar cada examinador.

 

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11 comentarios

  1. A diferencia de Oscar, mi relacion con los examinadores de patentes de la Oficina española ha sido muy satisfactoria. En las dos patentes que he tramitado siempre me ayudaron y parecían conocer el tema.

  2. Siento mucho decir que me sorprende sobremanera, que pasen ese proceso de seleccion tan concienzudo…. asi como tambien me deja perplejo que se les exalte en este articulo… he tenido al menos diez interacciones con evaluadores de patentes, unas 6 en EEUU y 4 en España. Las 4 en España no han sido solo infructiferas y desagradables, sino que además (quizas por mala suerte) he tenido que interactuar con individuos bastante mediocres y sin ningún conocimiento tecnico siquiera cercano a lo que estaban evaluando… fue realmente de verguenza.

  3. Gracias por el comentario. La Oficina Europea de Patentes tiene una dirección de correo donde publicita sus Ofertas de Empleo: http://www.epo.org/about-us/jobs/vacancies.html También puedes acceder a ellas desde la web de la OEPM, en el apartado de empleo: http://www.oepm.es/es/sobre_oepm/empleo/index.html
    Las plazas para cubrir puestos en la OEPM salen en primer lugar en el BOE donde se aprueba la Oferta de Empleo Público del año en cuestión, y posteriormente se convocan mediante una publicación también en el BOE del proceso selectivo para ingreso, por el sistema general de turno libre, en la Escala de Titulados Superiores de Organismos Autónomos del MITC, especialidad de Propiedad Industrial.
    A través de este enlace de la web de la OEPM puedes consultar las ofertas de empleo http://www.oepm.es/es/sobre_oepm/empleo/index.html

  4. El examinador español es un funcionario de la Administración General del Estado, y su sueldo es considerablemente inferior al sueldo de un examinador en la Oficina Europea de Patentes.

  5. Me parece lamentable que en la OEPM el examinador tenga que dedicarse a temas puramente formales. El examinador está destinado a tareas más elevadas.

  6. Muy interesante este trabajo! Hay prevista otra convocatoria de plazas el próximo año?. Y en la Oficina Europea de patentes?
    Muchas gracias.

  7. Me he quedado impresionado por la diferencia entre el procedimiento de selección para ser examinador español y europeo. Mucho más exigente el primero. Supongo que ello redundará en un mejor sueldo para el español.

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