¿Quién pagará el IET?

A pocos días de que la Comisión Europea presente su propuesta oficial para la creación del futuro Instituto Europeo de Tecnología (IET), el diario Financial Times acaba de publicar un artículo según el cual tanto el sector privado, como los gobiernos de los Estados miembros de la UE, han expresado su negativa a cofinanciar  el futuro Instituto.

 

Basándose en el funcionamiento del Massachusetts Institue of Technology, José Manuel Barroso, Presidente de la Comisión Europea, presentó este proyecto como la “herramienta” que capacitaría a Europa para competir con la tecnología punta desarrollada en Estados Unidos o Japón. También en su día, anticipó que contaría para ello con 800 millones de euros procedentes de las empresas europeas, aunque parece ser que la realidad es que no aportarán fondos hasta el año 2010 (siendo 2008 el año en el que empezará a funcionar el Instituto).

 

Ante esta situación, Barroso y la Comisión se han quedado solos a la hora de financiar el IET; que contará para el periodo 2008-2013 con un presupuesto de 2.4 billones de euros, que procederán en su totalidad de la Unión Europea ( Fondos Estructurales,  VII Programa Marco y Derechos de Propiedad Intelectual generados por la propia actividad del IET).

 

Son diversas las voces que se alzan en contra o por lo menos se muestran escépticas ante proyecto en sí y la forma de financiarlo. Mientras parte de  la comunidad científica preferiría que se invirtiera en proyectos concretos en vez de en algo que sea una promesa para el futuro; los Gobiernos no han dado señal de que quieran contribuir con fondos y los empresarios muestran su indiferencia total.

 

Tampoco los líderes políticos se muestran grandes partidarios de esta propuesta. Incluso la canciller alemana Angela Merker, física, y normalmente partidaria de las ideas de Barroso, tiene sus dudas acerca de la futura estructura del Instituto. Además, algunos consideran que sus actividades podrían “chocar” con las desarrolladas por el recientemente creado Consejo Europeo de Investigación (CEI).

 

Sólo cabe esperar y ver qué pasa….

Compartir:

4 comentarios

  1. Pues es una pena que cuente con tan poco apoyo político. Me parece que a Alemania y a otros países que tienen la I+D más desarrollada puede que no les interese que tecnólogos de todos los países compartan mesa y mantel.

  2. Yo creo que igual empresas y gobiernos tienen la impresión de que el IET es más de lo mismo, una iniciativa más que en el marco de la Estrategia de Lisboa se solapará con el resto de iniciativas creando más burocracia y más confusión, sin añadir nada nuevo, ni un valor añadido concreto y visible. Así pues, ¿por qué invertir en algo que posiblemente no de beneficios? Pienso que la Comisión no ha sabido explicar correctamente para qué servirá crear un IET y por qué debemos apoyar el proyecto.

  3. ¡Al fin un poco de sensatez en la pesada maquinaria europera!

    Como no tenemos poco con los centros institutos ya existentes de la Comisión Europea, vamos y creamos otra media docena.

    Los comparamos al MIT en el nombre y ya está. ¡Mágia! un MIT europeo.

    Aclarémosnos que EEI queremos, y luego, negociemos con los grupos de presión de algunas áreas científicas ante la Comisión.

  4. Raúl,

    ¿Y quién se tiene que aclarar? ¿La Comunidad Científica "oficial"? ¿Las grandes empresas? Ambos, comunidad científica "oficial" y las grandes empresas, ya han mostrado su escasa capacidad para utilizar eficazmente los cuantiosos fondos europeos para I+D. ¿Va a seguir Europa metiendo dinero en proyectos, de los que no se sabe muy bien cómo se han utilizado los resultados?

    Este sistema ya no sirve para los objetivos que se persiguen hoy.

    Demoslé la oportunidad a institutos de este tipo, en los que presumiblemente la transparencia será mayor, la igualdad de oportunidades más fácil de propiciar y, en cualquier caso, serían espacios de I+D solventes a los que se podría acudir en busca de un referente.

    Un saludo,

    Rafa Mompo

Deja un comentario