Del estrés al cáncer: los antígenos intracelulares TIA.
Un grupo de investigación del Centro de Biología Molecular 'Severo Ochoa' (CBMSO) junto con una colaboradora de la Universidad de Salamanca (USAL), han descubierto que los antígenos intracelulares TIA protegen del crecimiento celular descontrolado al funcionar como genes supresores de tumores y guardianes celulares.