Cómo publicar tu trabajo en acceso abierto: los repositorios institucionales
Losresultados de la investigación financiada con fondos públicos deben seraccesibles al público sin restricciones; la existencia de Internet permite queesto sea posible. De esto trata, fundamentalmente, el acceso abierto. Elobjetivo de este movimiento es conseguir la disponibilidad universal, a travésde Internet, del conocimiento aprobado por la comunidad científica y académica.Las ventajas para la sociedad son incuestionables, pero también lo son para vosotros,como autores. Sin embargo, no voy a hablaros ahora del por qué publicar enabierto, sino del cómo.
1.-En primer lugar tendréis que saber si vuestra Institución tiene repositorio. EnEspaña son ya muchas las Universidades que tienen o están a punto de tener unrepositorio. Como casi siempre suelen ser iniciativa de las bibliotecas lomejor es que os pongáis en contacto con la de vuestra Institución. Muchas vecesnos falla algo tan simple, pero esencial, como el “marketing” de nuestrosservicios. Como espero que ya sepáis, la Comunidad de Madrid y el Consorcio debibliotecas públicas de Madrid y la UNED (Consorcio Madroño) hemos creado elportal “e-ciencia”, que consiste en un portal de acceso abierto a loscontenidos que tenemos las Universidades participantes en nuestros respectivosrepositorios institucionales. Podéis consultar allí qué repositorios estándisponibles, en qué situación están los que aún no se han incorporado (todos estánya casi preparados y estarán encantados de recibir vuestros trabajos); allíencontraréis la dirección de la persona de contacto que os podrá informar. Alas Universidades se unirán también otros Organismos Públicos de Investigacióncomo el CSIC o el CIEMAT.
3.- ¿Qué tipo de documentos podéis depositar en estosrepositorios? Pues todos los que representen vuestro trabajo de investigación oacadémico: tesis, artículos, ponencias, informes, documentos de trabajo,capítulos de libros, libros, revistas, teleconferencias, vídeos. Lascondiciones son pocas: que vuestro trabajo sea de carácter científico oacadémico, que esté en su forma definitiva, que os comprometáis a dejarlo allípara siempre y que, por supuesto, permitáis el acceso abierto al texto completodel mismo. Además, os pedimos que aceptéis una licencia de depósito queconsiste en declarar que sois los dueños de los derechos de ese trabajo y quepermitís al repositorio institucional distribuirlo libremente a través deInternet.
4.-El procedimiento es facilísimo, y los bibliotecarios, que son gente muydispuesta, os ayudarán si lo necesitáis. Hemos calculado que después de laprimera vez, no os llevará más de 5 minutos depositar vuestro trabajo en elrepositorio y a cambio, estará visible de forma inmediata (o casi, porque aveces es necesario un periodo de embargo – se está trabajando en las políticaseuropeas en torno a un periodo máximo de 6 meses-)
6.-Si queréis autoarchivar un artículo que todavía no habéis publicado, pero quepensáis publicar en algún momento (o estáis a la espera de su aceptación), lopodéis hacer si no transferís después el derecho exclusivo de distribución a larevista, es decir, establecéis una serie de condiciones a ese acuerdo. Paraello podéis utilizar esta licencia de publicación que están utilizando otrosrepositorios en otros países y en la que se especifican los derechos de laeditorial y los derechos que os queréis reservar vosotros respecto a lo quepueden hacer otros con vuestro trabajo.
7.-Finalmente, podéis publicar un trabajo que no está publicado en ninguna revistay que no pensáis publicar nunca en ninguna revista. En este caso sois vosotrosexclusivamente los que decidís qué puede hacer la persona que accede aldocumento de vuestro trabajo. Para eso utilizamos la licencia “creative commons”.
Hastael momento, sólo está disponible el 15% de los resultados de investigación quese generan al año en todo el mundo. Queda un largo camino hasta el 100% y esoque llevamos ya en esto del “open access” bastantes años. ¿Nos podemos permitirel lujo de que pasen otros tantos años más?