¡A la cárcel por no ser un científico infalible!

Se imagina que un médico vaya a la cárcel cada vez que su prescripción falle? ¿O que, ya puestos, un profesor sea condenado por el fracaso escolar de sus alumnos? Sí, sí, ya sé lo que está pensando, pero hablo en términos generales –no saque a colación aquel profe que le dejó para septiembre. Algo que no tiene nada de gracia es la sentencia que un tribunal italiano dictaba hace unos días contra seis científicos y un funcionario público por no ser capaces de alertar a los habitantes de la región de L’Aquila del tremendo terremoto que arrasó la zona y se llevó la vida de más de 200 personas el 9 de abril de 2009...

¿Se imagina que un médico vaya a la cárcel cada vez que su prescripción falle? ¿O que, ya puestos, un profesor sea condenado por el fracaso escolar de sus alumnos? Sí, sí, ya sé lo que está pensando, pero hablo en términos generales –no saque a colación aquel profe que le dejó para septiembre…

Algo que no tiene nada de gracia es la sentencia que un tribunal italiano dictaba hace unos días contra seis científicos y un funcionario público por no ser capaces de alertar a los habitantes de la región de L’Aquila del tremendo terremoto que arrasó la zona y se llevó la vida de más de 200 personas el 9 de abril de 2009. Huelga señalar el precedente que dicha sentencia supondría para el futuro de la ciencia y de los que nos dedicamos a ella. De aquí, a una caza de brujas cada vez que se produzca una catástrofe… sólo un paso.

Lo curioso es que, en definitiva, dicha sentencia no señala lo obvio. Una comisión científica no es infalible. A no ser que se demuestre una negligencia o fallo debido a mala praxis laboral, una comisión científica no es más que un elemento consultivo en manos de la Administración que la ha propuesto; Administración que, hasta ahora, había cargado con toda la responsabilidad en este tipo de catástrofes. Sin embargo, el juez Marco Billi ha considerado que los científicos infravaloraron los riesgos existentes –algo que, en sismología, es bastante complicado de establecer-. Una semana antes del seísmo, la Comisión de Grandes Riesgos anunció que no había datos suficientes para pensar en un peligro inminente. ¡Y tenían razón! Otra cosa es que la naturaleza decidiera sin el permiso de dicha comisión volcar su furia contra L’Aquila con un seísmo de 6.3 grados en la escala Richter. Los familiares de las víctimas, por otro lado, parecen satisfechos con la condena.

Muy mal augurio para el progreso de la ciencia, y de la sociedad en general, si el poder legislativo tiene que actuar de cara a los sentimientos de las víctimas. De no corregirse este fatal error, habrá que ver qué científico acepta en Italia ahora un cargo de asesor. El presidente de la Comisión de Grandes Riesgos, Luciano Maiani, desde luego que no. Ha dimitido, lógicamente, por creer que no se den las condiciones necesarias para trabajar con tranquilidad… ¡A ver quién es el guapo que se arriesga! Ahora, los científicos que analizaron la falla de Lorca, que pongan sus barbas en remojo…

JAL (CBMSO)

DIVULGACIÓN CIENTÍFICA DEL 29 DE OCTUBRE DE 2012

MADRI+D TV (Divulgación científica con cara, e imágenes, en 3 minutos)

ENTRE PROBETAS (Píldoras científicas en 2 minutos). Radio 5

PUNTOS DE VISTA Radio Exterior de España (cada 15 días. Martes)

A HOMBROS DE GIGANTES Radio 5

RADIO UTOPÍA

RADIOSÍNTESIS

FACEBOOK (José Antonio López-Guerrero)

FACEBOOK (Departamento de Cultura Científica -Centro de Biología Molecular)

TWITTER (JALGUERRERO)

TWITTER (DCCientificaCBM)

LINKED-IN (Jal Guerrero)

.

 

Compartir:

Un comentario

Deja un comentario