Las técnicas grupales como forma de detectar las necesidades de la comunidad

Cuando hablamos de técnicas grupales nos referimos a la utilización de la reunión de un grupo de personas. A través de esta reunión los participantes nos expresan desde su punto de vista los problemas principales y cuál es la actitud que ellos tomarían frente a los mismos para su solución o superación.

Para que los miembros de un grupo realicen con satisfacción el trabajo grupal, es necesario que, en su organización interna, existan condiciones que estimulen una relación social afectiva satisfactoria. Para esto, es importante tener en cuenta tres principios:

De libertad, para que cada uno pueda expresar sus sentimientos y opiniones frente al grupo y frente a los programas de trabajo, sin temor a sentirse objeto de burla, de censura o rechazo, por parte del grupo.

Igualdad, es decir, que al interior del grupo, todos los miembros sean tratados en igual forma y sus conocimientos sean valorados con los mismos criterios.

De solidaridad, por la cual todos los miembros se sientan parte de un grupo y con deseos de apoyarse mutuamente ante las dificultades que lo afectan.

Al comenzar se han de establecer unas mínimas normas de funcionamiento, como por ejemplo:

Periodicidad: días y horas de reunión, estableciendo cada cuanto se va a reunir el grupo, y la duración de las reuniones. Es importante insistir en la asistencia permanente de todos los miembros; por tanto, los días y horas deberán decidirse con base en la disponibilidad de todos los integrantes del grupo.

Las ausencias frecuentes deben analizarse al interior del grupo, pues son indicadores de que algo está sucediendo dentro de este.

El lugar de reuniones debe facilitar el funcionamiento del grupo. La existencia de un lugar fijo para las reuniones, estimula el sentido de pertenencia al mismo., aunque no es imprescindible.

Al comenzar una reunión de grupo, uno de los participantes tomará nota de lo que el grupo vaya aportando. Por ejemplo comenzaremos por solicitar a los participantes de la reunión que vayan diciendo los problemas que a su juicio tiene la comunidad, se irán anotando los mismos, una vez se hayan expuesto los problemas empezaremos a debatir uno a uno su importancia, escuchando y respetando lo que cada persona aporte.

Cada uno de nosotros tenemos un punto de vista distinto, si unimos todos los puntos de vista podremos observar realmente la necesidad que tiene nuestra comunidad. Por ejemplo si yo no tengo hijos o hijas el construir un comedor infantil no será tan importante para mi como para la persona que tiene 6, sin que por ello debamos renunciar los problemas que a nuestro juicio tiene la comunidad.

Nosotros los que vivimos en la comunidad somos los que realmente sabemos qué nos pasa, para eso vivimos en ella.

 

Evaluación y priorización de necesidades

Debemos partir de que el desarrollo de la comunidad debe comenzar desde “aquello” que es esencialmente significativo para la gente.

La primera actuación debe dar respuesta a una necesidad o a un problema sentido por la comunidad y ésta debe considerarlo de urgente satisfacción.

Esta actuación debe afectar a la mayor parte del grupo de la comunidad.

Debemos buscar el éxito y el logro de esa actuación ya que así tendría un efecto multiplicador ayudaría a conseguir una auto-afirmación sobre las personas que componen la comunidad y serviría para las acciones futuras. Sería interesante comenzar con lo fácil y continuar con lo difícil, esto nos haría ver que nosotros somos igualmente capaces de hacer cosas por la comunidad.

 

Cómo empezar

 

Una vez realizado el diagnóstico, evaluado y priorizado nuestras necesidades ¿qué debemos hacer a continuación?

Ver los recursos con los que contamos. Si necesitamos construir algo, cuánta gente trabajará, para ello debemos implicar al mayor número de personas para que trabajen todos. No es una buena idea que todo el mundo trabaje a la vez, ya que así trabajan tres y miran quince. Es necesario establecer turnos de trabajo.

 

Material que vamos a necesitar. En ocasiones los materiales que necesitamos los tenemos a nuestro alcance, maderas, etc…

Debemos responsabilizar a la gente. Para ello debemos encargar tareas a cada uno y se deben comprometer con la ejecución de su cometido. Por ejemplo uno se debe encargar de las obras, otro de los materiales, otro de organizar los turnos de trabajo, otro de solicitar ayuda externa si fuera necesario, etc…

Solicitar asistencia. La asistencia puede ser técnica o económica. La asistencia técnica está más a nuestro alcance. Nos podemos desplazar a las Alcaldías o a un organismo internacional que opere en la zona, para que nos aconsejen con sus medios técnicos. Conseguir asistencia económica es mucho más complicado, nadie da fácilmente reales, pero debemos intentarlo con los medios que vamos a aprender con este curso.

 

Participación, Diagnóstico de necesidades y el Trabajo en Grupo

 

Resumen

 

A través de la participación ciudadana, los ciudadanos podemos expresar nuestros problemas y podemos participar en las decisiones locales.

El principal requisito es la organización de la comunidad para trabajar en equipo y para trabajar con las demás organizaciones ya sean del municipio o de otro tipo de organización como un organismo internacional

“Quien no conoce la situación en que vive, difícilmente puede actuar sobre ella”

Para poder solucionar un problema o dominar una situación sin que otros lo hagan por nosotros, necesitamos adquirir los conocimientos necesarios. Actuar sobre algo que desconocemos, es como dar pasos de ciego o como pretender leer en total oscuridad.

En el diagnóstico se avanza poco a poco y muchas veces lo importante no es la cantidad de resultados, sino el camino recorrido hacia ellos, porque es precisamente durante el camino cuando la gente comparte actividades, aprende, se comunica, discute y crea alternativas de solución a problemas presentados sobre la marcha.

Para cada uno de nosotros los problemas de la comunidad pueden ser unos, para otras personas pueden ser otros distintos o los mismos pero con otro grado de prioridad o importancia, por ello debemos dialogar y llegar a un acuerdo.

El problema o necesidad sobre el que pretendemos actuar debe cumplir principalmente dos características: 

Que la mayoría de los componentes de la comunidad lo consideren grave y de urgente solución.

Que la solución de ese problema-necesidad afecte al mayor número de personas posible de    la    comunidad.

La respuesta NO ya la tenemos. Si no solicitamos o pedimos ayuda nunca sabremos si nos lo hubieran concedido.

 

 

 

Isabel Méndez Navas

Socióloga Salubrista

 

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